EL NUEVO YOGA

Una prenda 
enganchada en la puerta 
de mi poema, una moda moderna 
me regala una gorra verde, me pongo esa gorra 
verde y salgo a la calle, en mi bolsillo 
una fotocopia en blanco y negro:

SE VENDE PIANO PETROF. 

No me gusta esa fotocopia, 
no me gustas Dr. Fell, la razón, no la sé,
puede que pienses que no rijo con claridad,
que lo que digo no tiene sentido, pero eso es porque 

no piensas como yo, 

nadie piensa como tú, dime que no, 
dime que no piensas que las artes 
marciales violentas son 

el nuevo yoga.

DELIRIOS

Quiero una 
botella rota en el suelo, 
quiero que las artes marciales violentas 
sean el nuevo yoga, quiero que las ratas y las 
palomas muertas tengan algo que decir, 

quiero chinches.

Sé que son delirios y que acabaré solo,
pero es que son importantes mis
delirios, no son para vosotros,
vosotros podéis volar,

dejadme en paz.

HUELE A TINTA

Dadme 
una silla para 
contemplar el paisaje,
dadme una lengua viperina,
dadme una lengua 

de bruja.

Dadme un lenguaje inventado,
huele a tinta de sello de caucho,
huele a tinta de sello de caucho de 

los pitufos.

Me han encontrado, no sé cómo pero 
me han encontrado, un chivatazo, 
un lector indignado, no lo sé,
reza un texto rojo en 

mi camiseta:

RETIRAD TODO LO QUE 
NO SIRVA CONTRA 
LA VERDADERA
LIBERACIÓN