EL PLURAL MAYESTÁTICO

Nos gusta lavarnos las manos,
sobre todo desde que no sentimos

el dedo meñique.

Hay muchas cosas que no recordamos
de la calle Bergamín, la calle

de nuestra infancia.

Somos dos patos en una rotonda,
somos un coche lleno

de africanos.

Nuestro plato preferido es la lasaña
y por eso no nos gusta utilizar

el plural mayestático.

Publicado por

Txema Maraví Artieda

Soy de mi pueblo de toda la vida.

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