ENTRE SEMANA

Toda la tarde
comiendo pipas
de nuestro propio girasol robado
 
Estaban crudas
pero no nos importaba demasiado
 
El sol calentaba con fuerza la gravilla
cuando los días eran muy cortos
y la primavera no llegaba
 
Y nos quedaba muy poco tiempo de libertad
Y ya nos echábamos de menos
 
entre semana
 

Publicado por

Txema Maraví Artieda

Soy de mi pueblo de toda la vida.

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