Menuda fiesta

El canal internacional de TVE me ha permitido seguir un poco el panorama televisivo a pesar de estar en África. Un servicio de mínimos muy interesante sobre todo porque sustituye la publicidad tan machacona de estos días por recopilaciones tipo Las veinte canciones de tu vida o Elvis al completo . Seguramente entre los espectadores de esta cadena hay mucho sentimentalismo que explotar y los discos, al fin y al cabo, no tienen fecha de caducidad como el turrón de jijona. Pude seguir la gala del 50 aniversario de TVE. Un espectáculo pesado de ésos que lo mismo sirven para entregar unos premios que para una gala benéfica o la nueva programación y hacerse la pelota. Presentado por Anne Igartiburu -al parecer el único valor en alza que posee esta cadena-, Laura Valenzuela, rescatada del baúl de la naftalina, y la eternamente afónica Paula Vázquez que, al parecer, estuvo alguna vez en TVE. Buscaban de manera descarada tocarnos la fibra con supuestos momentos estelares y presuntas actuaciones entrañables. Lo que consiguieron fue un homenaje al aburrimiento. La gala sólo podía enganchar a nostálgicos de otros tiempos y a algún gallego exiliado en los confines del mundo. Se homenajeaba a quienes hicieron de Rafael y Lola Flores cantantes populares, utilizando para ello a Bisbal y Rosa, que son el mejor ejemplo actual de personajes cuya fama se engrasa a diario en la programación. Si lo que pretendían era ofrecer una visión global sobre los 50 años de la televisión, lo que finalmente consiguieron fue que diéramos las gracias por llevar 15 años con otras ofertas. La voz en off de quien presentaba era la de Constantino Romero y éste aparecía allí sentado entre el público en una sala que albergaba a más de 3000 invitados, cifra similar a la de los que van a prejubilar en la casa. Dicen que para esta fiesta no hay presentadores.

3 comentarios en «Menuda fiesta»

  1. Te tomo el testigo, compañero Javier: en poco tiempo me voy allende los mares.

    En principio pensaba dejarme llevar por el empalagoso concepto llamado «espíritu navideño» (azucarado como un guirlache) y decirte que prometo ver algo del Canal 24 horas de TVE allá donde esté, pero aunque en otras ocasiones lo he hecho con fabuloso resultado -sobre todo en lo que a telediarios se refiere- he de decir que tu excelente descripción de dicha «gala» (o lo que fuere) no hace sino replanteármelo.

    Buena apreciación en cuanto a la asistencia de invitados: podían haber puesto, precisamente, a los futuros damnificados. Sería todo un «festival» el ver a tantos injustamente tratados volcar sus frustaciones sobre personajes repelentes.

    Saludos Javier, bienvenido y… hasta la vuelta.

  2. …y es que ya casi se echa de menos las casposas y caramelizadas galas de nuestro querido Jose Luis Moreno, en donde nada ya sorprendía y lo malo era bien reconocido, sin sorpresas desagradables y chascos sin argumentos como los que vemos hoy en día, la gracia residia en un sin fin de dudosos modelos que nunca supe porque perpetuamente lucian bañador, o las desgastadas gracias de un cuervo Rockefeler de jaulas polvorientas en cajones de cómoda. Monchito nunca me terminó de convencer y el bueno de Macario, competía con doña Rogelia abuela de Mari Carmen. Si lo mejor de la gala son imágenes en blanco y negro… ya lo decía yo que el NODO superaba y con creces a Anne, no menos empalagosa que Moreno pero con falta de hierro. La primera ya no lleva el maillot oro y las noches de bohemia y pasión se quedaron en el televisor ELBE de olvidados espacios de barrios sésamos y equipos A, efectivamente la quinta de espinete ya no volverá.
    Saludos- 😀

  3. [quote:d9c00865fa=»marco»]…y es que ya casi se echa de menos las casposas y caramelizadas galas de nuestro querido Jose Luis Moreno, en donde nada ya sorprendía y lo malo era bien reconocido, sin sorpresas desagradables y chascos sin argumentos como los que vemos hoy en día, la gracia residia en un sin fin de dudosos modelos que nunca supe porque perpetuamente lucian bañador, o las desgastadas gracias de un cuervo Rockefeler de jaulas polvorientas en cajones de cómoda. Monchito nunca me terminó de convencer y el bueno de Macario, competía con doña Rogelia abuela de Mari Carmen. Si lo mejor de la gala son imágenes en blanco y negro… ya lo decía yo que el NODO superaba y con creces a Anne, no menos empalagosa que Moreno pero con falta de hierro. La primera ya no lleva el maillot oro y las noches de bohemia y pasión se quedaron en el televisor ELBE de olvidados espacios de barrios sésamos y equipos A, efectivamente la quinta de espinete ya no volverá.
    Saludos- :D[/quote]

    A José LUis Moreno no hay que echarlo en falta nunca entre otras cosas porque él se presenta de una u otra menera. Sus programas de gala y noche de fiesta fueron el pesebre de los artista en la televisión pública, dinero para que cantantes que en realidad deberían pagar por salir en tv. Hay un humor facilón que practican estos humoristas de pacotilla que no tiene perdón.

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