Sigue la pista que
indica ese chorbo de pelo largo,
tiene pintura en los brazos, tiene costo
en un chivato.
Mira en el cielo, un punki espitoso toca
el yembé cerca de una nube,
cerca de una pluma
de pájaro.
Lo mejor y más ligero en una maleta
de ruedas, me despido con los
ojos cerrados y pelando
naranjas.