El cielo arroja
bolas de fuego.
Su calor estimula
el acicalado mutuo.
Seres vulnerables
contemplan el amanecer africano.
Y yo pierdo el tiempo escribiendo un poema
que habla del tiempo.
poemas de bolsillo
El cielo arroja
bolas de fuego.
Su calor estimula
el acicalado mutuo.
Seres vulnerables
contemplan el amanecer africano.
Y yo pierdo el tiempo escribiendo un poema
que habla del tiempo.
Soy de mi pueblo de toda la vida. Ver todas las entradas de Txema Maraví Artieda