Érase una vez un poeta
que no pudiendo soportar más el vacío que sentía
se quemó a lo bonzo
junto a una de sus motos preferida
“Es más fácil vivir de vender motos en llamas hoy en día
que vivir de la poesía y eso me asusta”
-Dijo el sabio poeta vendedor
de motos
“No reconocen ni de lejos mi talento,
lo digo como vendedor de motos experto”
-Espetaba indignado mientras ardía
“Ésta es mi moneda de cambio
y al que no le guste mirar
que no mire”
-Acabó por reivindicar
…