TE VIGILO Y TE QUIERO DESDE UNA PAPELERA

El corazón verde
del tomate se parece a
tu reflejo en un charco, te reconozco
y te quiero a kilómetros pero no
te soporto montado en

tu patinete.

Un edificio de ladrillo no es un edificio rojo,
te observo y te quiero a lo lejos pero no
te soporto montado en tu

bici de carretera.

Te vigilo y te quiero desde una
papelera, cruzas la calzada
y te atropella

un coche.

Publicado por

Txema Maraví Artieda

Soy de mi pueblo de toda la vida.

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