VERANO MUERTO

Recuerdo
el olor a saliva de mi madre
de cuando mi madre me limpiaba
la cara con saliva.

Recuerdo el olor a plástico quemado, y a piedra, y a barbo.
Recuerdo el olor a perro muerto a finales de verano.

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Todavía escucho el sonido de un motor cerca del río,
como un zumbido lejano que me impide
ser feliz
como lo fui entonces.

Publicado por

Txema Maraví Artieda

Soy de mi pueblo de toda la vida.

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