Ahora
que soy más
viejo que Homer Simpson,
y que los balones de plástico
pinchados y acumulados en mi tejado
son más de cien, puedo reconocer y reconozco,
que a veces lloro imaginando
mi funeral.
poemas de bolsillo
Ahora
que soy más
viejo que Homer Simpson,
y que los balones de plástico
pinchados y acumulados en mi tejado
son más de cien, puedo reconocer y reconozco,
que a veces lloro imaginando
mi funeral.
Soy de mi pueblo de toda la vida. Ver todas las entradas de Txema Maraví Artieda