Dice el Talmud:
Tu amigo
tiene un amigo,
y el amigo de tu amigo tiene otro amigo;
por consiguiente, sé discreto.
Y dice Thomas Edison:
No sea que jodan tu éxito, eso es,
el éxito bien guardado, no vaya a ser que
te lo roben.
Malditos ladrones de éxito, están por todas partes,
no te fíes ni de tus amigos, llévate
el éxito a la tumba, que nadie
lo sepa jamás.