Te lo cuento por
teléfono, cerca de un túnel,
tengo miedo, siento que todos
gritan mi nombre.
Me oculto, te describo un babero en el suelo,
un babero que ya no recoge
babas.
No sirve para nada en el suelo, te lo cuento por
teléfono, alguien grita mi nombre a lo lejos,
alguien plancha la oreja sobre un banco
de piedra, cerca de unos juncos.
Necesito esa voz que me reconforta, necesito
que desaparezca, entro en el túnel
y se corta la llamada.