En el bar
de mis piscinas no se
venden helados ni tampoco se sirven
cañas.
En el bar de mis piscinas sólo
hay telas de araña
y basura en la
barra.
En el bar
de mis piscinas no se
venden helados ni tampoco se sirven
cañas.
En el bar de mis piscinas sólo
hay telas de araña
y basura en la
barra.
Soy de mi pueblo de toda la vida. Ver todas las entradas de Txema Maraví Artieda