Les parecía entretenido
andar, eran una nube que
siempre nevaba.
Sin embargo no se conocían lo suficiente
como para saber que no les gustaban tanto
los calcetines de colores.
Nunca bailaron juntos en una discoteca,
me temo que nunca
lo hicieron.
Eso sí, probaron juntos los Nuggets
de pollo del Makro y creo que un
día se regalaron ambos un
triturador de basura
orgánica.