Y aquí estoy,
esperando mi primera clase de piano,
cerca de un montón de huesos de pollo,
cerca de un contenedor.
No quiero luz natural,
sólo quiero empezar mis clases
y que me dejéis en paz.
Hace muchos años
mi amigo Fernando se rompió los dos brazos
intentando escalar una portería de fútbol.
Se le vino encima.
No la pudo esquivar.
Y aquí sigo,
esperando mi primera clase de piano,
con dos tubos de pasta de dientes en los bolsillos,
cerca de un charco de nieve.
No quiero hablar de su funeral,
sólo quiero empezar mis clases
y que me dejéis en paz.
Hace muchos años
mi amigo Fernando se rompió el cráneo
intentando escalar una portería
de fútbol.
Se le vino encima.
No la pudo esquivar.