Easy rider

Peli del año 1969 y premio Cannes: Mejor ópera prima. (Genial comienzo)

Dos motoristas de pelo largo de Los Ángeles se embarcan en un viaje hacia Nueva Orleans, cruzando el país por carretera, intentado descubrir América. Después de una venta de cocaína a un hombre de Los Ángeles llamado Connection, Billy y Wiatt, conocido como el Capitán América, asisten a una fiesta en Mardi Grasantes. Pronto emprenden el viaje a lomos de sus dos modernas motos, conduciendo a través del suroeste. En el camino se encuentran a un montón de inusuales personajes, entre ellos un ranchero y su familia, o un autoestopista de una comuna hippie, antes de ser arrestados en un pueblecito por parar sin un permiso. Su compañero de celda, un abogado borracho, les hace un gran favor sacándoles de la cárcel y luego decide unirse a ellos. George descubre los placeres de fumar hierba, pero un encuentro con unos ultraviolentos ángeles del infierno del sur prueba rápidamente lo acertado que está con respecto a lo peligrosas que son las vidas de Billy y Wyatt en un país que ha perdido sus ideales. Wyatt y Billy tratan de descubrir en Nueva Orleans los placeres del LSD junto a los piratas, pero el viaje ácido se convierte en algo mórbido. Al llegar a Florida, Billy quiere descubrir el sueño americano. En fin,una especie de «viaje» continuo es este film con la gran metáfora del comienzo con un Peter Fonda quitándose el reloj, y es que el tiempo no importa, la carretera grita libertad.

http://www.youtube.com/watch?v=v-073rIldKs

Blue velvet.

David Lynch construye su propio universo en “Terciopelo azul” es una película imprescindible para saber cómo es su director por dentro. Buena parte de los mundos que aparecen en el cine posterior de Lynch (y, habría que precisar, también en el anterior) están presentes en este trabajo que es a la vez declaración de principios y guía de estilo de su realizador.

Como sucede con frecuencia en su cine, David Lynch construye una historia en la que un acontecimiento fortuito deriva en una cadena de acontecimientos que descubren a los espectadores y a los mismos personajes de la película un mundo paralelo concebido como un plano diferente de la realidad en el que los conceptos tradicionales carecen de sentido.

El protagonista de “Terciopelo azul” asistirá, tras la casualidad, a la convicción de que el amor y el deseo no son como lo pintaban, y tendrá que lidiar contra una realidad contundente, cruda y poco amable. Si por algo más destaca la inquietante “Terciopelo azul” es por el sensacional trabajo de actores que despliega David Lynch, algunos de ellos llamados a ser presencias frecuentes en su cine posterior. Sobre todos ellos hay que mencionar especialmente a Kyle MacLachlan, quien a mitad de los 80 era un atractivo joven con una vena siniestra y un lustro después terminaría por asociar su imagen al agente Dale Cooper de “Twin Peaks”. Por cierto el casi olvidado Kyle siempre me recordó al gran Robert Vaughn sobre todo en su aspecto físico. También a Laura Dern, en una desgarrada interpretación histérica que le abriría las puertas para repetir con Lynch en “Corazón salvaje”, e Isabella Rossellini, esposa que fue de Lynch, quien en apenas un par de planos dinamitaba la imagen edulcorada que de ella había tenido el cine hasta ese momento. Desafío a la lógica, pesadilla sin voluntad de amable resolución y en ciertos momentos caricatura del cine de género, “Terciopelo azul” es una película hipnótica, poderosa, de una fuerza visual infrecuente y cuenta con una banda sonora escrita por Angelo Badalamenti que redondea un conjunto fascinante. Es, a la vez que un milagro del cine, una de las películas de referencia de los últimos decenios del cine internacional. Y volviendo al eje central del tema de por qué este artículo pues se lo debemos a Javier Arizaleta que para el va dedicado, y por cierto Isabella es genial… su voz da igual, no se la pierdan.

http://www.youtube.com/watch?v=_tQ-zGEJYi4

Puente sobre el río Kwai.

Quién no ha silbado alguna vez esta entrañable melodía… recuerdo cuando era chico subir contento las escaleras de aquella vieja casa dónde esperaba mi abuelo arriba sonriente, y acompañaba mi silbido conforme iba llegando hacia él. O cuando le esperaba en casa y sabía de su llegada porque venía ya desde lejos con su entrañable «huiuuu huhuhu hui hui huiiiiiii». Así es, hay momentos de cine que me recuerdan a pequeños retazos de mi vida, y en el «Puente sobre el río Kwai» me hace pensar en mi abuelo… y es que la escena que a continuación os brindo es memorable por su coraje, dignidad y honor. Ha pesar de todo nos enseña que hay que tener la cabeza levantada y seguir adelante con entusiasmo y ganas de vivir, el ser humano grita libertad en secuecias de cine que nos trasladan a la vida cotidiana. Alec Guinness es ejemplo de ello, templanza, dignidad, trabajo y honor. Seguiré silbando y recordando para siempre a mi abuelo mientras subo las escaleras que me llevan a mi hogar.

http://www.youtube.com/watch?v=TivfsjVRcOs&mode=related&search=

Desayuno con diamantes.

Amanece en la calle de la soledad, jamás nadie tuvo tanta clase para desayunar suaves movimentos delante del escaparate de diamantes de café con leche. Estilizado y desnudo cuello que sostiene la bella durmiente que esa mañana despertó para darnos los buenos dias, maravillosa y dulce Audrey, icóno de rostro angelical que adorna el mejor de mis recuerdos femeninos. Le acompaña la brisa melódica de Moon river, sombra trazada con las manos artesanas del mejor de los dibujantes, todo un diseño de mujer. Mención especial para el segundo de a bordo para mi siempre un buen actor George Peppard… solo con enamorarla es suficiente. Os dejo con uno de los comienzos mas tiernos, delicados y sencillos del mundo del cine.

http://www.youtube.com/watch?v=M51uBrf-8jw

Le mans.

Una mala época en lo personal para el actor se refleja en esta película, «capricho» genial de nuestra estrella. El empeño y el esfuerzo de esta película se refleja en un film de culto con una estética sublime. Planos segmentados, diseño estético de boxes mas de moda que nunca. El mono blanco de líneas verticales que descienden sobre su hombro superan los infinítos rotulos que luce Alonso hoy día. Me quedo con su amor a la velocidad esa que se lo llevó no en el asfalto pero sí en su edad, tiempo que nunca es fiel y le dió la espalda a los 50 años. cuando veo un coche rápido me viene a la cabeza McQueen y también Newman. Quizas por eso (casualidad de la vida) en la peli de animación «cars» el coche prota se llama McQueen y adivinen quien le da voz… efectivamente… Paul Newman.
Calienten motores……….con ustedes Steve McQueen.

http://www.youtube.com/watch?v=Ls08-F6I5Ss

La gran evasión.

Como petición de nuestro gran amigo Epicuro, me dispongo ha opinar sobre una joya que el cine nos dejó como legado, tanto en elenco de actores como su trama, como en momentos inolvidables de fotogramas que ya pasaron ha ser leyendas del celuloide. Elmer Bernstein, nos regala su melodia pegadiza (que hoy se tararea en campos de fútbol, segundo himno de la selección inglesa) en el video homenaje que incluyo es una versión cantada que creo que lo hace todavía mas emotivo. otra vez la dualidad Sturges- McQueen es sublime, sobre todo porque el rubio actor le debe su época dorada, (cierto que siempre lo fue) pero me refiero también en su vida personal, Sturges le dió estabilidad profesional y personal y fue el salto definitivo al estrellato. Salto que todos recordaremos en esa moto BMW que en realidad se hizo con un modelo Triumph. Y con esa moto esta en un cruce de caminos bajo un cartel que pone ACHTUNG y que hoy decora mi salón de estar. La mirada de McQueen molestada por el sol hace que su estrella esté mas viva que nunca.

Inolvidable el paseo hacia la «nevera» bajo la atenta mirada de sus compañeros, mientras otro le lanza su guante de basseball, y lo coje al vuelo… y en su último recorrido aquel guardia espigado (y sabedor que Berlín caerá) después de encerrarlo se detiene con semblante melancólico… y escucha como McQueen golpea su pelota contra la pared: «TOC TOC, TOC TOC».
Gracias Dios por haber disfrutado de este momento, este filme… obra maestra.

http://www.youtube.com/watch?v=oX5uG-9LVKE

Esencia de mujer.

Al Pacino nos deleita con la interpretación de un coronel retirado y ciego, sin muchas ganas de vivir… todo cambiará cuando conoce a un jóven(Chris O`Donnel, hoy no se sabe mucho de este actor) que se encargará de ayudarle como «lazarillo» por unos días. El caso que ambos aprenden y mucho, uno por recuperar las ganas de vivir, el chico por las peculiares enseñanzas de este veterano de pasión desenfrenada por las mujeres. Entrañable, divertida y llena de gran carga emocional, me quedo con varias escenas, la del paseo en ferrari, la de los peculiares consejos en el avión… el final… y sobre todo esta, el baile con una jóven, esencia de mujer que le hace recuperar el mejor de los sentidos… la vida.

http://www.youtube.com/watch?v=pNrdVCr_Fgk

OPERACIÓN DRAGÓN (Enter the dragon)

http://www.youtube.com/watch?v=5Ltnfr-vcJQ&mode=related&search=

El tema es que las artes marciales deslumbran todo, siquiera la excusa inicial para disparar la trama. Enter The Dragon es a todas luces un clásico : no sólo posee escenas y diálogos memorables, sino que funda un género entero. No es que antes de 1973 no existieran películas de artes marciales – la industria cinematográfica de Hong Kong y China se alimentaba de eso -, pero nunca tuvieron el alcance mundial como el que obtuvieron después de este film. Un público ávido de patadas voladoras acudiría en masa a los cines durante los 70 y parte de los 80, en plena euforia del cine de artes marciales. Si se pueden mencionar fenómenos que eclipsaron a la Bondmanía de los 60, sólo se pueden nombrar dos ejemplos de filmes basales que generaron una avalancha de imitadores y que desviaron parte del público habitual del agente británico : Enter The Dragon y, por supuesto, Star Wars.

El argumento del film es por todos conocido. Sin embargo, para la época es aún material fresco y realizado de modo impecable. Toda la ralea (en general baja) de imitadores que lo han seguido no han podido igualar y menos superar a la cinta de Bruce Lee. Desde Mortal Kombat, pasando por The Best of The Best, o películas de otros artistas marciales (Jean Claude Van Damme, Chuck Norris) han copiado punto por punto la trama de Operacion Dragon pero no han capturado el carisma del film. Incluso Bolo, el forzudo chino que participa en la cinta, reiteraría su papel durante muchos años en películas similares. Y sin mencionar la avalancha de pésimos imitadores de Bruce Lee que invadirían las pantallas en los 70 con producciones generalmente lamentables.

El Señor Han paladea algunas delicias mientras disfruta del torneo
La trama es básica, pero en la pureza encuentra la perfección del clásico. Bruce Lee es reclutado para infiltrarse en la Isla del Sr. Han, para descubrir que oculta en sus instalaciones. Lee es un héroe lacónico, de oscura presencia. Es un hombre que carga con dolor en su alma, y que reprime su furia. Ni bien llega a la isla y comienza a participar en los torneos, vemos que es despiadado y letal. Es un asesino que frena sus instintos de venganza, en pos de cumplir la misión primero, pero que no despreciará las oportunidades que tenga para cobrarse deudas con Han. Y si bien es un hombre mal herido espiritualmente, es también un tipo frío y calculador, que evalúa constantemente las posibilidades de ataque – solo lo hace cuando es preciso, no utiliza violencia excesiva a menos que la situación lo amerite -. Comparado con el Bond de Dr. No – que destilaba un aire de asesino implacable -, Lee es un equivalente que no gusta del estilo ni de la clase de 007, pero que resulta más letal por poseer motivos personales. Es una fuerza imparable de destrucción, reprimida hasta el momento en que considere conveniente desatarla.

Y si Lee es un héroe muy oscuro, como villano Han no se queda atrás. La presencia que le da Shih Kieh es impresionante; un hombre de refinados modales que puede ordenar acciones crueles sin inmutarse. Considerando que lo que hoy conocemos como blockbusters (las películas tanque que arrasan la pantalla) empezaron con James Bond en los 60, y que Enter The Dragon sería una de las primeras en arrebatarle el puesto central – un hecho que llegaría hasta nuestros días, donde cada estudio prepara una serie de filmes tanque para arrasar la taquilla -, el film obtuvo mucho éxito en gran parte a tomar elementos bondianos (el héroe, espía y asesino; el villano brutal; la base secreta a ser volada), devolverlo a sus esencias y enfatizar los matices más oscuros y crueles de los personajes centrales. Si Bond era un modelo de asesino con clase – al que se le fue limando oscuridades durante los últimos films de Connery – y era el modelo cinematográfico de accion por excelencia durante los 60, pierde el puesto en los 70 con iconos como Bruce Lee, que son aún más salvajes y despiadados pero con el carisma suficiente como para que el publico no los rechace. En el fondo estamos hablando de asesinos con causa justa – vale recordar los diálogos entre Bond y Scaramanga en The Man With The Golden Gun, que casualmente incluiría artes marciales y copiaría la secuencia final de los espejos de Enter The Dragon (escena que ambos filmes toman en realidad de la conclusión de The Lady of Shangai de Orson Wells) -. Pero quitemos las credenciales y los motivos, y veremos que el héroe y el villano no son más que individuos crueles que por una u otra razón operan de lados diferentes de la ley.

Así mismo la película, basada en un borrador de Lee, contiene muchas ideas personales del actor y de la particular filosofía del arte marcial que había creado – Jeet Kune Do -. Ciertamente se encuentran camufladas entre líneas – su intención era que fuera un vehículo para una nueva filosofía en artes marciales, donde cuerpo y espíritu actúan como uno solo a la hora del ataque y la defensa, y donde era posible generar una línea de conducta para evaluar al entorno que lo rodea -. El mismo se considera un arma en continuo perfeccionamiento, y que sólo debe entrar en acción en graves circunstancias, ya que su uso puede ser letal. Mucha de su filosofía, lamentablemente, fue podada por el otro guionista o quedó en el cuarto de edición (por ejemplo, en un momento Bruce Lee decía : «Cuando mi oponente se expande, me contraigo, y cuando se contrae, me expando, y cuando hay una oportunidad, yo no golpeo. Golpea por sí mismo.»).

El film contiene muchas escenas memorables de combate; es también una fuente incontable de anécdotas durante el mismo rodaje (extras retando a Bruce Lee; peleas filmadas que fueron reales más que coreografiadas por problemas entre Lee y miembros del casting). Y Lee exhibe no sólo un carisma impresionante que le otorga el merecido status de ícono cinematográfico, sino que además era un artista marcial envidiable. La velocidad de sus peleas es inconcebible; y como actor, su rol es cumplido de modo eficiente acorde a sus capacidades actorales. Me parece maravillosa la combinación Jim Kelly y John Saxon, Jim le da un toque exótico y de gran pureza y fuerza, crearía toda una moda, un actor negro con el estilo del cine mas blaxploitation, y John Saxon siempre fue un actor sin demasiada suerte pero inolvidable, aquí su picaresca y dotes de una especie de jugador de vida acelerada le da un toque distinguido. Los intentos de seducción de Han para que ingrese en su organización criminal podrían haber pasado directamente por el personaje de Lee – (trivia aparte : ¿a Saxon lo habrán elegido por un aire a Connery?). – posiblemente Roper y Williams sean ocurrencias del guionista Allin para darle un color multirracial al film, y no invenciones de la pluma de Bruce Lee -, amén que estén desarrollados como caricaturas – el personaje Williams es una fantochada -. Pero posiblemente esto pase porque en Hollywood no confiaban en que un actor chino pudiera cargar con éxito el film frente a las plateas yanquis y decidieron americanizar el libreto (un prejuicio idiota de la época; fijense sino ahora, donde hay blockbusters comandados por Jackie Chan o Jet Li).

Como curiosidades, en el casting figuran Jackie Chan y Sammo Hung, en papeles ínfimos – entre las decenas de luchadores que acuden a la isla -. El film cuenta con otra banda sonora memorable de Lalo Schifrin, acorde al espíritu de la trama. Y es una lástima que Lee falleciera tres semanas antes del estreno de la película. Las razones son dispares : algunos sostienen que consumía droga, otros que estaba experimentando con su peso – para volverse más rápido -, lo cierto es que un edema cerebral truncó su vida en el apogeo de su carrera. Quizás, al igual que James Dean, su muerte y su escaso legado cinematográfico (pero de calidad) sea lo que le brinde alcance de leyenda – ¿como hubiera seguido la historia sin Lee continuara vivo y filmando peliculas de menor calidad? -. Como una supernova, brilló en toda su intensidad en una última ocasión antes de extinguirse. Hoy en día todo un filósofo y Operación Dragón peli de culto.

BULLITT

Bullitt es cine puro, la atmósfera irrepetible y mil veces mal copiada de una leyenda. Esencia de San Francisco, persecución inolvidable y genuina, hasta el gazapo del escarabajo es perfecto… se respira tensión, carácter, adrenalina, libertad indomable de un auténtico animal de la pantalla. La mirada real de la sospecha que ya dejó de serlo en el aparcamiento semivacío de un soleado día en la bahía. Ford Mustang verde oliva, rival de su enemigo el sobrio Dodge Charger negro acharolado de ocupantes oscuros. Guantes de profesional para el veterano mudo y malvado, al que acompaña un malísimo y frio caballero de cabello blanco y rostro cuadiculado. Lalo Schifrin les acompaña con su melodía intrépida de sonidos sensibles en manos temblorosas de un volante que vibra. Sabe irse a tiempo para dejarnos el rugido del Mustang característico y pasional mezclado con el rudo carburador del Dodge. Se observan, se estudian, y llega el momento histórico que quedó en mi retina para siempre… al observar atónito el antagonista dónde diablos se ha metido nuestro Bullitt, y aparece de repente en el retrovisor del «malo» como surgiendo de las entrañas de la tierra, subiendo ese desnivel de carreteras diseñadas para el despiste. Simplemente genial.

http://www.youtube.com/watch?v=NmmwqbhNSco

Paralelismos

La pasarela de un aeropuerto como denominador común, comienzos de títulos de crédito memorables. El graduado imprescincible, escuchando el sonido del silencio me deslizo con la maleta del recuerdo… equipaje que después recogió Jackie Brown para de forma apresurada facturar los viajes del pasado. Tarantino nos hace un guiño mimetista y magistral con una Pam Grier mas setentera que nunca y un sonido funcky que recuerda a su black power de antaño… mientras, Dustin Hoffman sigue su camino, después del avión le espera un Alfa Romeo rojo que le llevará a la dama de fugas divertidas en autobús… pero esa es otra historia…

http://www.youtube.com/watch?v=PSdcGFR8VAU