Homenaje a Steve McQueen con Miguel Juan Payán


Hoy homenajeamos a la leyenda Steve McQueen en compañía de todo un experto, el periodista, crítico de cine y escritor Miguel Juan Payán, os dejo con este completo programa de casi dos horas, una magnífica entrevista en la que aprendí muchísimo junto a Miguel en una distendida y amena charla. Espero que os guste, seguro que si. Un programa dedicado a la memoria de mi amigo Iñaki Merallo.

Escucha el programa pinchando aquí (Descarga mp3)

Excelente montaje audiovisual producido por la página web terrorynadamas.com de manos del gran Antonio Reverte, programa homenaje a Steve McQueen dedicado a mi Amigo Iñaki Merallo

el cine de marco en apple

Ken Takakura, honorable presencia


Su presencia en la gran pantalla ha dejado momentos inolvidables, ese gesto serio, duro de semblante firme. El llamado Clint Eastwood japonés siempre me agradó con su interpretación recta de mirada espontánea y serena, de pulso noble y movimientos suaves pero eficaces. Se dice que su verdadero nombre es Oda Goichi, otras fuentes apuntan que en realidad corresponde a Oda Toshimasha, quién sabe… el misterio de su mirada traspasa la propia realidad.

Tal vez esa mirada tenga algo que ver con su juventud de amargo recuerdo en la postguerra del castigado Japón. Ken nace en Kita, Kyushu (Fukuoka), un 16 de febrero de 1931 (De la quinta del protagonista de nuestro anterior artículo Dean Jones). Por lo tanto hoy en día cuenta con unos formidables 78 años llevados con elegancia y buena forma física.

Su adolescencia estuvo marcada por la picaresca de los mercados negros nipones, una realidad que continuamente llevó al cine interpretando a personajes precisamente de bajos fondos, que sin embargo siempre se ceñían a estrictos códigos de honor.

Su vida callejera no obstante no le hace renegar de los libros por los que muestra interés, nunca abandonó sus estudios e incluso se llegó a graduar en la prestigiosa Universidad Meiji de Tokio. Es en 1955 cuando una casualidad hace que se inscriba en un casting para la TOEI Film Company, la importante corporación audiovisual japonesa. Su registro resulta fascinante para los directores que lo contratan a partir de 1956 para películas interesantes para la época como la comedia «Choppu sensei”, u otros filmes como “Denko Karate Uchi” o “Nippon G-men”. Aunque son películas de poco interés Takakura comienza a interesarse por el celuloide con gran empeño y trabajo.

A partir de 1960 comienza a despegar su carrera, sin duda en parte se lo debe a su mentor el gran Teruo Ishii (Hombre de gran importancia para la compañía) que lo descubrió y confió en él en todo momento.Colabora con uno de los grandes del cine Yakuza como Kinji Fukasaku, en su película “Wolves, Pigs and People” de 1964. Sin embargo en contraposición a Takakura Fukasaku fue un defensor del cine realista relatando las miserias del Yakuza en el Jitsuroku Eiga.

Es en 1965 cuando llega el drama carcelario “Abashiri Bangaichi” interpretación que lo catapulta al estrellato siendo ya conocido en todo el país. Además produce una de las sagas más demoledoras y con más éxito de jápon, con un total de dieciocho entregas 😮 , En esta interminable saga Takakura hace el papel, en varias ocasiones, de estrella del cine de caballeresco nipón, el llamado «Ninkyo Eiga». Intentaba siempre revalorizar el romanticismo de unos valores tradicionales a través de los métodos Yakuza, defensores del débil, del oprimido por el poder político o caciquista del lugar o las simples amenazas externas. Todo ello plasmado en la frialdad pero carismática figura de nuestro protagonista hizo de él todo un icono alcanzando una muy notable fama y popularidad.


Con cierto encasillamiento Takakura trabaja principalmente en cine relacionado con el crimen o la Yakuza, se siente cómodo en él y sabe que gusta, sin embargo también se atreve con comedias y dramas sobre todo de temática Samurai, un ambiente el romántico que siempre le fascinó. Hay dramas de época memorables como la larga saga “Showa zankyo-den”. Rueda junto a directores especializados en esta temática y de altura como Daisuke Ito y Tomu Uchida, también lo compagina con teatro clásico e incluso musicales y hasta ciencia ficción, en auge por aquellos días en la industria japonesa. Una extensisima labor que se alargó hasta 1975 con más de 180 películas a sus espaldas con la TOEI.

1977 es su año en cuanto a premios, gana el Asia Pacific Film Festival, el Japanese Academy Award, el Blue Ribbon, el Kinema Jonpu o el Mainichi Film Concurs entre otros muchos, todo ello gracias a “Shiawase no kiiroi hankachi” (“The Yellow Handkerchief of Happiness”) del director Yôji Yamada, basada en la novela de Pete Hamill. Pero ahí no acaba todo, con la peli de Yasuo Furuhata “Eki Station” de 1981 gana el premio de mejor actor japonés, otros premios igualmente se lleva por o por “Shijushichinin no shikaku” (47 Samurais) en 1994. Su idilio profesional con el director Yasuo Furuhata lo lleva a realizar uno de sus mejores trabajos en 1999 con la valorada “Poppoya”.

Pero Ken Takakura da el salto a Hollywood con la estupenda «Comando en el mar de la China» con título original “Too Late the Hero” de 1970, magnífica película que por supuesto guardo con mimo al igual que su espectacular banda sonora. Nadie puede olvidar su semblante en medio de la jungla hablando por aquellos escondidos altavoces a unos apurados Michael Caine y Cliff Robertson. Con esa carta de presentación llega la gran delicia “The Yakuza” peliculón de Sidney Pollack en la que vemos a Takakura mano a mano con Robert Mitchum. Una cinta en la que se nota toda su maestría y conocimiento del género. También por esos años tenemos las películas «Kimi yo funnu no kawa wo watare» de 1976, «Fuyu no Hana» en 1978, o Antarctica en 1983. En 1989 llega la recordada “Black Rain” película de Ridley Scott, con Michael Douglas y Andy García. Tres años después “Mister Baseball” y es precisamente en 1992 donde pone punto final a su carrera americana para volver a su amada Japón. En los posteriores años ya no trabaja tan intensamente pero nunca deja de actuar.

Hasta la fecha sus últimos trabajos han sido el drama “Hotaru” en 2001 la cinta de 2006 “Riding Alone for Thousands of Miles” en fructífera colaboración con el chino Zhang Yimou.

En definitiva, Ken Takakura un actor para deleite del buen espectador que encontrará en su mirada el misterio de su honorable presencia.
http://www.youtube.com/watch?v=JBaUqNdm4uE&feature=related

Dean Jones, la sonrisa de Herbie


Hablar de Dean Jones es hablar de frescura, sonrisa y recuerdo. El recuerdo de aquel simpático y travieso escarabajo llamado Herbie que pilotaba nuestro Jones, o más bien Herbie conducía a Dean 😀 . Actores de sonrisa Disney que aparecían dibujadas a la perfección en esas cajas de galletas de los 50 más americanas que nunca.

El 25 de enero de 1931 nacía en la dulce Alabama nuestro Dean Jones. De infancia apacible, hogareño y campestre lo recuerdan siempre cantando entre tendidos de blancas sábanas y porches de madera al atardecer. Quería ser cantante o eso decía al cumplir 15 años, motivo por el cual abandonó los estudios, siempre persiguiendo ilusiones.

No fueron años fáciles y tuvo que trabajar duro para poder comer. En esos años desempeñó diversos oficios como recolector de algodón, una experiencia inolvidable que le hizo trabar gran amistad y conocer la dura realidad del trabajador de raza negra, ese fuerte vínculo también hizo desarrollar su pasión musical gracias a sus compañeros, cantando junto a ellos bajo el sol de Alabama.
Poco tiempo después trabajó como leñador, y junto a buenos amigos con los que compartía su amor por la música viajaron hasta Nueva Orleans para probar suerte en el mundo de la canción. Comenzó a cantar en un Night Club experiencia dispar que le hizo replantearse su futuro.

Intentó retomar sus estudios y volvió al instituto de Riverside, allí realizó una de sus ilusiones, un programa propio de radio local llamado «Dean Jones Sings». Pasó a la Universidad de Asbury en Kentucky pero no llegó a graduarse, sin terminar se alistó en el ejército, otra experiencia que tenía en mente…

(Dean Jones segundo por la derecha en su época de cantante)
El ejército le sirvió de soporte para trabajar en su ocupación preferida: Cantar.
Era en la Base Militar del Ejército del Aire en San Diego, y un buen día se presentó a un casting de figurantes para una película, había leído un anuncio en un periódico local. Se presentó y parece ser que gustó porque lo contrataron, la película era nada menos que «Marcado por el odio» con mi querido Paul Newman como protagonista, uno de los figurantes era nuestro Dean Jones y otro un tal Steve McQueen, que también debutaba en el mismo film.

Su aventura cinematográfica no cesó a partir de 1956 y como un torrente de casualidades comenzó a ser llamado encajando como secundario en diversos títulos: «Té y simpatía» (1956) de Vincente Minnelli, «Diez mil dormitorios» (1957), «El rock de la cárcel» (1957), «El último torpedo» (1958) y «Cuando hierve la sangre» (1959) Nuevamente coincidía en este título con Steve McQueen. Aparecer en estos títulos no solo engordó su cuenta corriente sino que le sirvió de trampolín para su afición musical y apareció en dos programas televisivos de renombre: «The Steve Allen Show» y «El show de Ed Sullivan».

Su vida ha sido una lucha continua para llegar a ser cantante pero cuanto más se empeñaba más ofertas cinematográficas surgían a su paso y menos como cantante 😀 . A partir de los años 60 trabaja en Broadway y estrena una obra que tres años despúes se llevaría a la gran pantalla con el título «Adam también tenía su manzana» el título original «Under the Yum Yum Tree». Estrena otro título llamado «There Was a Little Girl».

Es llamado para participar en series míticas como «Caravana» o «Bonanza» y también trabaja en las pelícuasl «Dos nuevos internos» (1963) y «Dos en la guillotina» (1964).

En 1965 protagoniza el comienzo de su idilio con Disney en la peli «El gato del FBI» una rocambolesca historia junto a Hayley Mills sobre un detective que investiga el porqué de un gato que lleva en su cuello el reloj de una secuestrada 🙁 . La cinta funcionó y de qué manera!! a pesar de poco después aparecer junto a Jane Fonda y Jason Robards en la comedia «Cualquier miércoles» el éxito del dichoso gatito catapultó su fama de actor Disney algo que no esperaba y que marcaría su futura carrera como icono Disney.

Se encasilló como actor familiar entrañable, algo que hizo de su semblante uno de los más queridos de aquella América en donde mayores y pequeños compartían merienda en torno a su televisor.
Llegaron múltiples comedias, como «Los perros de mi mujer» en donde da vida a un hombre al que unos perritos amargan la vida, produciendo buenos ratos entre padres y niños de la época. «Mi amigo el fantasma» junto a Peter Ustinov, o el comienzo de la saga legendaria «Ahí va ese bólido» junto a su amigo el inteligente Volkswagen blanco Escarabajo de dorsal 53.

En 1969 presentó un programa de Tv propio llamado «What’s It All About World».
Un año después protagoniza la comedia italiana «El invencible hombre invisible» y conjuga su trabajo igualmente en Brodway en el musical «Company» de Stephen Bodheim, también interviene en la serie de una temporada «The Chicado Teddy Bears».

Su periplo con Disney acaba en 1977 con la tercera entrega de Herbie «Herbie en el gran premio de Monte Carlo» (En la segunda «Herbie un volante loco» no interviene) Vuelve a retomar el papel de Jim Douglas haciendo tándem con el mítico VW, cinco años después vuelve con su coche para la serie «Herbie the love Bug» pero la serie acaba con brevedad. Otros trabajos destacan en esos años de finales de los 70 y principios de los 80 en telefilms variados como «When Every Days Was the Fourth July» o «The Long Days Summer». Comienza a ser igualmente llamado para salir como artista invitado en series de éxito como «Vacaciones en el mar» o «Se ha escrito un crimen».

En 1986 da la sorpresa protagonizando el musical de Broadway «Into the Light» otro de sus sueños particulares hechos realidad. Por otra parte, pudo representar su propio show titulado «St. John in Exile».

Ya en los 90 sigue en la brecha y actúa como secundario en la comedia «Con el dinero de los demás». Pero su papel más recordado fuel el de malvado veterinario asesino de perros, un guiño en contraposición a sus tiernas intenciones en las pelis Disney de antaño, me refiero a la comedia «Beethoven», por todos recordada.

Trabaja en otros títulos como «Peligro inminente» (1994) o «Un gato del FBI» (1997), remake de «El gato del FBI» con protagonismo de Christina Ricci, actriz interesante a mi parecer. Sin freno aparece telefilms como actor de reparto en «Salvados por la campana: Vacaciones en Hawai» de 1992 o en las secuelas televisivas y remakes de Disney «Internauta por accidente» (1995) o «Ahí va ese bólido de nuevo» (1997), con Jim Douglas en su cuarta y última aparición hasta el momento.

Su trabajo como actor de doblaje también es destacable en series de dibujos animados como «Superman» o la para mi mítica «Johnny Quest».

En los últimos años ha intervenido en algún telefilm como «Scrooge and Marley» (2001), en 2007 apareció en el cortometraje «Lavinia’s Hesit».

Sus proyectos inmediatos son el documental «You Know The Face» (es posible que ya se haya estrenado, lo desconozco) y la película de bajo presupuesto «Mandie and the Secret Tunnel» en la que estará trabajando ahora o recién habrá concluido.

Hoy en día cuenta con 78 años, dos hijos (con su primera mujer Mae Entwisle) y casado por segunda vez con Lori Patrick.

(Junto a su actual esposa Lori)

Dean Jones sigue conservando esa blanca sonrisa Disney que a todos nos cautivó.

Mark Harmon, el rey del telefilm


Hay actores que nunca llegan a dar ese salto definitivo de calidad, o que parece que les falta ese poquito para llegar a lo más alto, puede ser el caso del actor que nos ocupa, Mark Harmon. Interesante actor del que siempre pensé que pudo tener mejor suerte, interpretativamente hablando. Tan solo podemos destacar uno de sus trabajos como el más significativo, más por lo que le rodea, compartiendo pantalla con Sean Connery y Meg Ryan, me refiero a la ochentera «Más fuerte que el odio», «The Presidio» en su título original de 1988.

Siempre recordaré el comienzo de la curiosa «The Prince Of Bel Air» con aquel ligón limpiapiscinas que acaba saliendo con una debutante y jovencita por entonces Christie Alley. Fue el primer príncipe de Bel Air, mucho antes que el famoso Will Smith, aunque de eso ya nadie se acuerda… 😀

Quaterback en la UCLA allá por los 70 decían los que lo recuerdan que tenía buen brazo y que portaba el dorsal número 7, pero apenas dos temporadas pudieron disfrutar de su juego, pasó de lanzar el balón oval a lanzarse a las númerosas cheers leaders que desde la banda distraían su atención.
Después de varios años de veinteañero trasiego llega a la antesala de los treinta con una serie bajo el brazo que le abre las puertas a Hollywood, el actor encantador de animadoras y de atractivo televisivo se descubre con «Flamingo Road», o series del momento como St. Elsewhere (1982) haciendo de aquel Dr. Robert Caldwell, siempre fue la Tv o las producciones para Tv las que llamaron más a su puerta: «240-Robert» (1979), «Centennial» (1978) o «Sam» (1978). Fueron estas sus primeras series antes de sus «dorados» 80.

En 1984 llega la película «Tuareg, el guerrero del desierto» basada en la novela de Alberto Vázquez Figueroa, pero es recordado en su época por la película para adolescentes «Summer School» llenando portadas de revistas californanias para quinceañeras.

A nivel personal llega su momento más dulce con el telefilm «The Deliberate Stranger», por la que consiguió una nominación a los Globos de Oro como Mejor Actor, gracias a ello dos años después conseguiría el papel anteriormente citado «Más fuerte que el odio».

A partir de 1990 intenta seguir en la brecha con la serie Dudas razonables, junto a Marleen Matlin. También protagonizó una película de televisión basada en la vida de John Dillinger y obtuvo un papel en la superproducción Wyatt Earp junto a Kevin Costner (Probablemente su homólogo que alcanzó un peldaño más en su carrera respecto al bueno de Harmon) Actor de características similares, también «blandengue» pero con más suerte interpretativa, no creo que mayor calidad pero si algo más de empaque y presencia. A partir de ahí la carrera del californiano Mark comienza a decaer, tan solo destacando en la comedia infantil «Magia en el agua». Sin embargo cuando ya casi nadie se acordaba de él en 2003 resurge cual Ave Fénix con la serie «NCIS: Naval Criminal Investigative Service», realizando un estupendo trabajo y una sorprendente interpretación de su personaje el agente especial Leroy Jethro Gibbs.

Casado desde hace años con la también actriz Pam Dawber fue cuñado del mítico Ricky Nelson, actualmente tiene dos hijos, y a sus 57 años se ecuentra en una gran forma y no me extrañaría que tarde o temprano, nos sorprendiera con algún papel que nos devuelva la ilusión a los que siempre creimos en él, y nos saque de ser el presidente de los EEUU haciendo de padre de una adolescente que busca novio, o ese tipo de papeles que ya nos hemos cansado de ver, pero bueno… Mark Harmon por ahora seguirá siendo el rey del Telefilm y un Domingo lluvioso después de comer siempre nos quedará su presencia en alguna peli de Antena 3. 😀

Bloody Mirrors


Desde www.terrorynadamas.com nos llega su primer trabajo audiovisual titulado Bloody Mirrors, un proyecto apadrinado por el propio Paul Naschy en unión con el director Sergio Morcillo, el compositor Javier Garcia y el montador y técnico de efectos especiales Juan Becerra. Este estreno tendrá lugar el 27 De Abril De 2009 a las 19:00 Horas en Fnac Málaga. Estais todos invitados. Sin duda una atractiva propuesta.

Trailer de Bloody Mirrors

Mark Harmon, el rey del telefilm


Hay actores que nunca llegan a dar ese salto definitivo de calidad, o que parece que les falta ese poquito para llegar a lo más alto, puede ser el caso del actor que nos ocupa, Mark Harmon. Interesante actor del que siempre pensé que pudo tener mejor suerte, interpretativamente hablando. Tan solo podemos destacar uno de sus trabajos como el más significativo, más por lo que le rodea, compartiendo pantalla con Sean Connery y Meg Ryan, me refiero a la ochentera «Más fuerte que el odio», «The Presidio» en su título original de 1988.

Siempre recordaré el comienzo de la curiosa «The Prince Of Bel Air» con aquel ligón limpiapiscinas que acaba saliendo con una debutante y jovencita por entonces Christie Alley. Fue el primer príncipe de Bel Air, mucho antes que el famoso Will Smith, aunque de eso ya nadie se acuerda… 😀

Quaterback en la UCLA allá por los 70 decían los que lo recuerdan que tenía buen brazo y que portaba el dorsal número 7, pero apenas dos temporadas pudieron disfrutar de su juego, pasó de lanzar el balón oval a lanzarse a las númerosas cheers leaders que desde la banda distraían su atención.
Después de varios años de veinteañero trasiego llega a la antesala de los treinta con una serie bajo el brazo que le abre las puertas a Hollywood, el actor encantador de animadoras y de atractivo televisivo se descubre con «Flamingo Road», o series del momento como St. Elsewhere (1982) haciendo de aquel Dr. Robert Caldwell, siempre fue la Tv o las producciones para Tv las que llamaron más a su puerta: «240-Robert» (1979), «Centennial» (1978) o «Sam» (1978). Fueron estas sus primeras series antes de sus «dorados» 80.

En 1984 llega la película «Tuareg, el guerrero del desierto» basada en la novela de Alberto Vázquez Figueroa, pero es recordado en su época por la película para adolescentes «Summer School» llenando portadas de revistas californanias para quinceañeras.

A nivel personal llega su momento más dulce con el telefilm «The Deliberate Stranger», por la que consiguió una nominación a los Globos de Oro como Mejor Actor, gracias a ello dos años después conseguiría el papel anteriormente citado «Más fuerte que el odio».

A partir de 1990 intenta seguir en la brecha con la serie Dudas razonables, junto a Marleen Matlin. También protagonizó una película de televisión basada en la vida de John Dillinger y obtuvo un papel en la superproducción Wyatt Earp junto a Kevin Costner (Probablemente su homólogo que alcanzó un peldaño más en su carrera respecto al bueno de Harmon) Actor de características similares, también «blandengue» pero con más suerte interpretativa, no creo que mayor calidad pero si algo más de empaque y presencia. A partir de ahí la carrera del californiano Mark comienza a decaer, tan solo destacando en la comedia infantil «Magia en el agua». Sin embargo cuando ya casi nadie se acordaba de él en 2003 resurge cual Ave Fénix con la serie «NCIS: Naval Criminal Investigative Service», realizando un estupendo trabajo y una sorprendente interpretación de su personaje el agente especial Leroy Jethro Gibbs.

Casado desde hace años con la también actriz Pam Dawber fue cuñado del mítico Ricky Nelson, actualmente tiene dos hijos, y a sus 57 años se ecuentra en una gran forma y no me extrañaría que tarde o temprano, nos sorprendiera con algún papel que nos devuelva la ilusión a los que siempre creimos en él, y nos saque de ser el presidente de los EEUU haciendo de padre de una adolescente que busca novio, o ese tipo de papeles que ya nos hemos cansado de ver, pero bueno… Mark Harmon por ahora seguirá siendo el rey del Telefilm y un Domingo lluvioso después de comer siempre nos quedará su presencia en alguna peli de Antena 3. 😀

Estigmas de la Historia: Patton


Como ya os anunciaba hace unos días un nuevo proyecto lleno de ilusión se abre paso gracias a la próspera colaboración con www.terrorynadamas.com de la mano de Don Antonio Reverte y al privilegio de poder compartir micrófono con el antropólogo D. Jose Luis Cardero López. Os dejo con este estupendo programa (El segundo) sobre la figura histórica del General Patton. Su vida, su leyenda y por supuesto su cine a través del gran George C. Scott encarnando a George S. Patton.

Escucha el programa pinchando aquí

Descarga directa mp3

Carlos Villarías, un Drácula cordobés en Hollywood


*FOTO: Carlos Villarías y Barry Norton en “El código Penal”

Apenas hay datos, alguna reseña leve y muchas erratas, poco se ha escrito sobre Carlos Villarías, hoy en este humilde espacio de cine vamos a rendir el homenaje que bien merece, por fin tantos años después, cuando nadie anteriormente se acordó de hacerlo… nunca es tarde para honrar la memoria de los muertos, y Don Carlos Villarías siempre seguirá vivo en esa gran pantalla del celuloide olvidado, de algún estante polvoriento de la memoria lo rescatamos para dar a conocer y respetar su trabajo lleno de ilusión y esfuerzo, su gran presencia cinematográfica, su dicción exquisita, su mirada, su voz de blanco y negro satén.

Nacido en la Córdoba de 1892 un día soleado de San Fermín, su padre un militar errante nada menos que General de aquel ejército español de finales del siglo XIX. Sus continuos cambios de domicilio hacen de Carlos un niño muy observador, inquieto y con espíritu aventurero que años más tarde se materializará “al hacer las Américas”.

Realiza sus primeros estudios en San Sebastián, formándose en Derecho, carrera que termina en la Universidad de Valladolid. Pero siempre le atrajeron las artes escénicas, el espectáculo, el teatro. Poco después de abrir un bufete de abogados abandona los despachos para ser feliz rebajando su nivel de vida económica para buscar su propia ilusión, comienza trabajando en pequeñas compañías de zarzuela y opereta, Paris llama su atención y se traslada a la capital francesa para actuar durante un tiempo en “La Gaité Lyrique”, su afán de aventura y sueño le hace viajar hasta Génova y es en Italia donde establece los contactos necesarios para, desde el mítico puerto genovés, embarcarse hacia su máxima ilusión, viajar a los Estados Unidos de América.

Desembarca en el nuevo mundo el 13 de marzo de 1915, en poco tiempo domina el inglés, y es descubierto en una representación por un asombrado empresario llamado Lou Tellegen, que fascinado por su dominio del idioma y su dicción exquisita lo contrata para la compañía dramática que dirige. Al poco tiempo sigue su ascensión y forma parte del grupo fundador del Teatro español de Nueva York. Comienza a trabajar haciendo discretas apariciones en el cine mudo compartiendo escena con los grandes del momento, Rodolfo Valentino o Pauline Frederick. El 19 de Julio de 1930 Carlos Villarías firma un importante contrato con la Fox que se prolonga un año. Trabaja regularmente en estudios de Hollywood hasta 1935, después se traslada a México y regresa a España en 1949 en donde continúa su fecunda labor como actor cinematográfico, ocasionalmente figura con otros nombres artísticos como Carlos Villar o Charles Villar. Más de 80 películas en las que trabaja, es muy recordado por su mítica representación en la versión hispana de Drácula en 1931, calco del clásico de Bela Lugosi, de la propia Universal.
Falleció en Los Ángeles el 27 de abril de 1976.

Filmografía como actor:

1930: “El cuerpo del delito”, “Estrellados”, “El precio de un beso”, “Amor audaz”, “El hombre malo”, “Del mismo barro”, “El valiente”, “El último de los Vargas”, “Cuando el amor ríe”.

1931: “Drácula”, “La gran jornada”, “El código penal”, “Del infierno al cielo”, “El impostor”, “Svengali”, “Cuerpo y alma”, “Hay que casar al príncipe”, “Goldie”, “El pasado acusa”.

1932: “Hombres en mi vida”.

1933: “The California Trail”, “Dos noches”, “No dejes la puerta abierta”, “La ciudad de cartón”.

1934: “Granaderos del amor”, “Dos más uno, dos”, “Tres amores”, “Bordertown”, “Señora casada necesita marido”, “¡Asegure a su mujer!”.

1935: “An Old Spanish Onion”, “Goin’ to Town”, “El diablo del mar”, “Te quiero con locura”, “El misterio del rostro pálido”.

1936: “¡Ora Ponciano!”, “Irma la mala”, “El superloco”

1937: “Nostradamus”, “Ave sin rumbo”, “Tengo fe en ti”(Terminada en 1940), “La vida bohemia”.

1938: “Rose of the Rio Grande”, “Tropic Holiday”, “Verbena trágica”, “Mis dos amores”, “Starlight Over Texas”, “California Frontier”, “Paris Honeymoon”, “Frontiers of 49”, “El trovador de la radio”.

1939: “Papá soltero”, “Los hijos mandan”, “El otro soy yo”, “El milagro de la calle mayor”, “La inmaculada”, “Tropic Fury”.

1940: “Meet the Wildcat”

1941: “Hold back the down”

1942: “Espionaje en el golfo”

1943: “Canto a las Américas”, “¡Qué hombre tan simpático!”, “El padre Morelos”, “El hombre de la máscara de hierro”.

1944: “Hotel de verano”, “Tribunal de justicia”, “Cuando escuches este vals”, “La hija del regimiento”, “Asesinato en los estudios”, “El museo del crimen”, “El rey se divierte”, “Rancho de mis recuerdos”.

1945: “La barraca”, “La mujer legítima”, “La casa de la zorra”, “Rayando el sol”.

1946: “La pecadora de Magdala”, “Los siete niños de Écija”, “La otra”, “Vida íntima de Marco Antonio y Cleopatra”.

1947: “La diosa arrodillada”, “Una aventura en la noche”.

1948: “Zorina”, “Lola Casanova”, “Comisario en turno”.

1950: “Jack, el negro”

1951: “La ciudad de fuego”

1952: “Decameron Nigths”.

*Artículo dedicado a la memoria de Don Carlos Villarías.

*Agradecimiento especial:
A don Miguel Juan Payán por su documentación personal.
Fuente: “Los que pasaron por Hollywood”, de don Florentino Hernández Girbal.

Próximamente homenaje a Steve McQueen con Miguel Juan Payán


Hola queridos cinéfil@s, en breve tendremos con nosotros a un invitado de lujo, no es otro que Miguel Juan Payán periodista, crítico de cine, escritor (más de 40 libros publicados) además de profesor de Historia del Cine y Géneros Cinematográficos en la Escuela Superior de Artes y Espectáculos TAI de Madrid, entre otras muchas cosas… Toda una eminencia de la que podremos disfrutar precisamente aquí en «el cine de marco». Hablaremos sobre un actor de leyenda, homenaje al gran Steve McQueen, no os lo podeis perder, os dejo con un pequeño gran video sobre el mito.
Muchas gracias por estar ahí
Mikel Navarro–

La pasión de los fuertes


La cámara ascendente en praderas áridas de cabezas de ganado. El galope sacude el arranque del relevo en sonido de cascos de un caballo llamado viento que solo Fonda puede montar.

La definición de cine es el caminar de Henry Fonda sobre la tarima de madera con fragancia a flores de azahar. Tombstone es la polvorienta y silenciosa mirada de Doc Hollyday, los versos de Mature me elevan por encima del bien y del mal. Por una vez, la tasca de vino rancio se convierte en corral inglés de Guillermos atormentados, el pasado enigmático se esconde en la oscura camisa de un Doctor enfermo de amor. Escapa de su femenina y adorada pasión de segundas oportunidades, mi querida Clementine, el último cobijo de la autodestrucción en el destino marcado a fuego por el pasado.

Henry baila verdades innaugurando un templo inacabado de campanas que nunca sonarán a boda.

El egoismo implacable y destructor del malvado Clanton, empaque y fuerza en cada plano de su rostro barbado, de mirada ardiente que dispara postas de traición.

Y la agónica vida de Chihuahua se esfuma en cada canción que marca su epitafio de vidas aceleradas e ilusiones perdidas, de falsas princesas de una felicidad que nunca obtuvo en sus encierros de alcoba. El amor en 15 minutos de gloria pasajera. La lucidez en su último suspiro, callejón perdido en compañía de un doctor de oficios olvidados y diplomas rotos que cuelgan en la pared del recuerdo más infinito.

Ok Corral marca el testamento de las pistolas, la sentencia del silbar de muerte y pólvora. Donde los hombres gimen amarga venganza y gritan dolor. Solo nos queda la dulce voz de mi querida Clementine esperando un regreso prometido en el oeste de la seca esperanza.

Tombstone: whisky, sangre y fuego en el último renglón.

http://www.youtube.com/watch?v=hxG9u7y4YG4&feature=related