La vuelta del Lehendakari Sanz al nuevo curso político no ha podido ser más mediática, rueda de prensa al canto y acuerdo con el PSN para exportar a Navarra la nueva política de López de caldear las fiestas de los pueblos para maquillar los datos económicos, a falta de Consejero de Interior autóctono capaz de poner en marcha una cortina de humo similar, y a veces creo que de ninguna otra cosa tampoco, no estará de más utilizar las capacidades del de el vecino aunque algunas veces cruja más de la cuenta con el slogan preferido de Sanz, ese de “Que vienen los vascos…”
Pero hete aquí que el corellano, que no da puntada sin hilo, ha pretendido usar el viaje para aislar políticamente a Nafarroa Bai, y ya puestos a Izquierda Unida, excluyéndolos de cualquier acuerdo institucional en base a su “ambigüedad” con el terrorismo y su falta de respeto a las víctimas. La Estrategia del quesito que no cesa… No se trata pues de buscar la unidad contra el terror, lo común, lo que nos une sino de ahondar en las diferencias de los matices de la condena para obtener rendimiento político criminalizando al que no comparte su visión de la Navarra de cartón piedra que han ido construyendo a partir de la estafa del Amejoramiento.
Y para la operación, y coincidiendo con el inicio de la Liga, han buscado un símil futbolístico que cale en la población ansiosa ya por ver a los “galácticos” de Florentino y la frase, no podía ser menos, se ha elegido de el lenguaje florido-psicológico-filosófico del discurso de su Alter ego platense, nada más y nada menos que Jorge Valdano.
Y así el “cacho corelles” como le llamaban en sus correrias por la 2ª B con el equipo de su tierra, ¡lástima! de Messi desperdiciado… ha decidido “achicar espacios”, como si en esta Navarra nuestra no estuviesen ya lo suficientemente achicados para todo aquel que no circule por Príncipe de Viana o por el Paseo Sarasate…
Y yo, que estando de acuerdo, en principio, con algunos de esos “achiques”, tengo el temor de que nuestro hombre confunda el tocino con la velocidad o las txurras con las merinas que queda más local, temor que el mismo acrecienta haciendo mención a la exhibición de una bandera reivindicativa del acercamiento de presos, reivindicación perfectamente legal y constitucional, incluso más que la propia acción de gobierno que genera la protesta.
Pero a mi, desde mi modesta aportación al jefe del ejecutivo, se me ocurren unos cuantos espacios de impunidad para “achicar” a mayor gloria de sus últimos años de gobierno floral.
Prodríamos empezar por achicar el espacio de impunidad que tenemos al final de la peatonalizada Carlos III, donde hoy mismo luce una placa a nombre del título nobiliario de Tomás Domínguez Arévalo, colaborador del golpe de Sanjurjo, reclutador del requeté para Mola, Primer Ministro de Justicia con Franco, derogador de las leyes del matrimonio civil y firmante de más de 50.000 penas de muerte. Pero por no salir de tan “glorioso” escenario prodríamos “achicar” el espacio de impunidad que supone ese bodrio de la arquitectura franquista más rancia donde siguen reposando como héroes de guerra los restos de los dos mentados generales amigos y colaboradores del Conde.
Pero por no salir de tan “queridos” personajes para los navarros de bien, podríamos “achicar” el espacio de impunidad que supone que un ejército “constitucional” y “demócrata” tenga que sufrir en sus carnes la vergüenza de tomar el sol, jugar a pelota o, simplemente, tomar un baño en unas instalaciones que en su denominación, hoy todavía, recuerdan al asesino de Fortunato Aguirre o Rodríguez Medel, aquel “achicador” de espacios que en su afán por achicar el de los navarros escribió:
“Hay que sembrar el terror… hay que dejar la sensación de dominio eliminando sin escrúpulos ni vacilación a todos los que no piensen como nosotros”.
Pero ya en el Paseo Sarasate, y donde hoy se ubica la representación de la voluntad popular de los navarros, nuestro Parlamento, podríamos realizar un buen “achique de espacios de impunidad” permitiendo la comparecencia de organizaciones como Amnistía Internacional, y no solo a petición propia sino como un verdadero ejercicio de higiene democrática, para que cuenten a la representación de los navarros cuando, cuanto y como se respetan los derechos humanos en este Estado de Derecho de nuestros desvelos.
No sería mal “achique” tampoco destinar parte de esas fuerzas forales que van a investigar el txupinazo de Berriozar para ver si hubo “exaltación del terrorismo” o “menosprecio y humillación a las víctimas” a descubrir y detener a quienes humillaron y menospreciaron a las víctimas en Artesaia o el cementerio de Ansoain.
Y ya puestos… ¿No sería un buen “achique de espacios de impunidad? La colocación de cámaras en dependencias policiales, el grabado de los interrogatorios o la reducción de la incomunicación en la aplicación de la legislación antiterrorista. A lo mejor el “achique” de ese espacio de impunidad hubiera evitado muertes como la de Mikel Zabalza…
Así pues, D. Miguel, “achique” Ud., pero “achique TODOS los espacios de impunidad”…
Ander Muruzabal