Su presencia en la gran pantalla ha dejado momentos inolvidables, ese gesto serio, duro de semblante firme. El llamado Clint Eastwood japonés siempre me agradó con su interpretación recta de mirada espontánea y serena, de pulso noble y movimientos suaves pero eficaces. Se dice que su verdadero nombre es Oda Goichi, otras fuentes apuntan que en realidad corresponde a Oda Toshimasha, quién sabe… el misterio de su mirada traspasa la propia realidad.
Tal vez esa mirada tenga algo que ver con su juventud de amargo recuerdo en la postguerra del castigado Japón. Ken nace en Kita, Kyushu (Fukuoka), un 16 de febrero de 1931 (De la quinta del protagonista de nuestro anterior artículo Dean Jones). Por lo tanto hoy en día cuenta con unos formidables 78 años llevados con elegancia y buena forma física.
Su adolescencia estuvo marcada por la picaresca de los mercados negros nipones, una realidad que continuamente llevó al cine interpretando a personajes precisamente de bajos fondos, que sin embargo siempre se ceñían a estrictos códigos de honor.
Su vida callejera no obstante no le hace renegar de los libros por los que muestra interés, nunca abandonó sus estudios e incluso se llegó a graduar en la prestigiosa Universidad Meiji de Tokio. Es en 1955 cuando una casualidad hace que se inscriba en un casting para la TOEI Film Company, la importante corporación audiovisual japonesa. Su registro resulta fascinante para los directores que lo contratan a partir de 1956 para películas interesantes para la época como la comedia «Choppu sensei”, u otros filmes como “Denko Karate Uchi” o “Nippon G-men”. Aunque son películas de poco interés Takakura comienza a interesarse por el celuloide con gran empeño y trabajo.
A partir de 1960 comienza a despegar su carrera, sin duda en parte se lo debe a su mentor el gran Teruo Ishii (Hombre de gran importancia para la compañía) que lo descubrió y confió en él en todo momento.Colabora con uno de los grandes del cine Yakuza como Kinji Fukasaku, en su película “Wolves, Pigs and People” de 1964. Sin embargo en contraposición a Takakura Fukasaku fue un defensor del cine realista relatando las miserias del Yakuza en el Jitsuroku Eiga.
Es en 1965 cuando llega el drama carcelario “Abashiri Bangaichi” interpretación que lo catapulta al estrellato siendo ya conocido en todo el país. Además produce una de las sagas más demoledoras y con más éxito de jápon, con un total de dieciocho entregas 😮 , En esta interminable saga Takakura hace el papel, en varias ocasiones, de estrella del cine de caballeresco nipón, el llamado «Ninkyo Eiga». Intentaba siempre revalorizar el romanticismo de unos valores tradicionales a través de los métodos Yakuza, defensores del débil, del oprimido por el poder político o caciquista del lugar o las simples amenazas externas. Todo ello plasmado en la frialdad pero carismática figura de nuestro protagonista hizo de él todo un icono alcanzando una muy notable fama y popularidad.
Con cierto encasillamiento Takakura trabaja principalmente en cine relacionado con el crimen o la Yakuza, se siente cómodo en él y sabe que gusta, sin embargo también se atreve con comedias y dramas sobre todo de temática Samurai, un ambiente el romántico que siempre le fascinó. Hay dramas de época memorables como la larga saga “Showa zankyo-den”. Rueda junto a directores especializados en esta temática y de altura como Daisuke Ito y Tomu Uchida, también lo compagina con teatro clásico e incluso musicales y hasta ciencia ficción, en auge por aquellos días en la industria japonesa. Una extensisima labor que se alargó hasta 1975 con más de 180 películas a sus espaldas con la TOEI.
1977 es su año en cuanto a premios, gana el Asia Pacific Film Festival, el Japanese Academy Award, el Blue Ribbon, el Kinema Jonpu o el Mainichi Film Concurs entre otros muchos, todo ello gracias a “Shiawase no kiiroi hankachi” (“The Yellow Handkerchief of Happiness”) del director Yôji Yamada, basada en la novela de Pete Hamill. Pero ahí no acaba todo, con la peli de Yasuo Furuhata “Eki Station” de 1981 gana el premio de mejor actor japonés, otros premios igualmente se lleva por o por “Shijushichinin no shikaku” (47 Samurais) en 1994. Su idilio profesional con el director Yasuo Furuhata lo lleva a realizar uno de sus mejores trabajos en 1999 con la valorada “Poppoya”.
Pero Ken Takakura da el salto a Hollywood con la estupenda «Comando en el mar de la China» con título original “Too Late the Hero” de 1970, magnífica película que por supuesto guardo con mimo al igual que su espectacular banda sonora. Nadie puede olvidar su semblante en medio de la jungla hablando por aquellos escondidos altavoces a unos apurados Michael Caine y Cliff Robertson. Con esa carta de presentación llega la gran delicia “The Yakuza” peliculón de Sidney Pollack en la que vemos a Takakura mano a mano con Robert Mitchum. Una cinta en la que se nota toda su maestría y conocimiento del género. También por esos años tenemos las películas «Kimi yo funnu no kawa wo watare» de 1976, «Fuyu no Hana» en 1978, o Antarctica en 1983. En 1989 llega la recordada “Black Rain” película de Ridley Scott, con Michael Douglas y Andy García. Tres años después “Mister Baseball” y es precisamente en 1992 donde pone punto final a su carrera americana para volver a su amada Japón. En los posteriores años ya no trabaja tan intensamente pero nunca deja de actuar.
Hasta la fecha sus últimos trabajos han sido el drama “Hotaru” en 2001 la cinta de 2006 “Riding Alone for Thousands of Miles” en fructífera colaboración con el chino Zhang Yimou.
En definitiva, Ken Takakura un actor para deleite del buen espectador que encontrará en su mirada el misterio de su honorable presencia.
http://www.youtube.com/watch?v=JBaUqNdm4uE&feature=related