El Steady-Cam es una cámara especial que sirve para conseguir imágenes en movimiento con la máxima estabilidad posible, precisamente «estable» viene del inglés «steady», (cámara de estabilidad), este instrumento técnico sirve al operador de cámara para trabajar en un terreno inestable, sin este método implicaría complicadas y costosas instalaciones y montajes de alto presupuesto y estructuras aparatosas. El Steady-cam es ideal para rodar en escaleras, subir, bajar, planos largos… o una persecución a la carrera en plena selva, la estabilidad esta garantizada. Por mucho que intentemos mantener un buen pulso la cámara siempre tiembla o por mucho que nos vendan la mejor cámara del mundo de imágen imperturbable. La estabilidad de este aparato es debido a un complicado sistema electrónico que mantiene siempre la cámara a la misma altura del suelo por mucho que ésta se mueva. Este equipo puede pesar entre 10 y 30 kilos, para soportar durante un buen rato este peso el operador de cámara suele llevar una especie de arnés sujetado al pecho al que va enganchado la steady-cam. Hoy en día los nuevos sistemas son mucho más modernos y por lo tanto más ligeros.
La primera película en la que se utilizó esta técnica fue en 1976 en «Esta tierra es mi tierra» del director Hal Ashby y protagonizada por David Carradine, en esta secuencia podemos ver la steady-cam sorteando a decenas de personas en una multitudinaria campa hasta dar con el protagonista, durante este trayecto apreciamos una original toma estable y limpia. En 1980 la steady-cam evolucionó al introducirse algunas mejoras precisamente en el rodaje de «El resplandor» todos recordarán al famoso triciclo del niño recorriendo los pasillos del fantasmagórico hotel, parte ya de la historia del cine.
Hoy en día la Steady-Cam es un elemento más dentro del rodaje, un buen elemento sin duda para aportar mayor calidad al espectador que sin duda sabe apreciarlo.