Imágenes para una constatación: el horror de lo real
Dirección y guión: Brian De Palma. Intérpretes: Izzy Diaz, Daniel Stewart Sherman, Patrick Carroll, Mike Figueroa, Ty Jones, Rob Devaney, Kel O’Neil, Zahra Kareem Alzubaidi. Nacionalidad: EEUU. 2007. Duración: 90 minutos.
De todas las películas que se vieron en Sitges durante su 40ª edición, la más desoladora, la más inquietante, fue Redacted . A su lado, la legión de psicópatas, zombies, monstruos y otros engendros del mal escondidos en los kilómetros de celuloide que se proyectaron en la bella ciudad catalana apenas fueron gesto y figura impostada en un carnaval de acné y urgencias. Y es que, en Redacted , habita el horror de lo real y el dolor de lo posible, ése ante cuya visión el espectador percibe su inminencia. Inminencia que arrastra la funesta fatalidad de recordar que la bestia está despierta en nuestro interior y ruge.
Como vivimos en el año en el que la guerra de Irak se ha convertido en paisaje de cine, el filme de Brian De Palma corre el peligro de ser despachado como una contribución más a lo que se mece entre el oportunismo, las buenas intenciones y la pertinencia. Nada de ello tiene que ver con los motivos que alumbran Redacted , filme escrito desde una necesidad que se abisma hacia la pesadilla. A diferencia de Robert Redford, cuyo tejido fílmico pretende elaborar un titubeante discurso político, De Palma utiliza la guerra representada en la vieja Mesopotamia para desarmar al cine contemporáneo.
De Palma es cineasta postclásico antes de que el término se verbalizara. Practica un cine que sabe del cine, cine resabiado y a veces se diría que incluso cínico. No ha dudado en jugar, entre otros, con Hitchcock, Antonioni y Eisenstein en una corrosiva manifestación sobre la deriva del relato fílmico.
Pero ese jugar se transforma ahora en (con)jugar, para ello propone un proceso de declinaciones que se sirve de predicamentos muy distintos. De Palma, a partir de los diferentes soportes audiovisuales que acotan la contemporaneidad, ahonda en la misma obsesión perceptible en el George A. Romero de El diario de los muertos , algo que de manera más tangencial y frívola también respira en el REC de Jaume Balagueró y Paco Plaza. O sea, que Brian De Palma se apropia para su filme de los sedimentos audiovisuales que ejercen ese bombardeo de imágenes en los que se diluye la realidad.
La gran diferencia entre la guerra del Vietnam, el conflicto del Golfo y la invasión de Irak hay que buscarla en los ecos que de los tres conflictos bélicos se ha dado en los medios de comunicación. En cómo se cuenta y quién lo relata estriba su principal diferencia. De hecho, De Palma configura el origen de Redacted en torno a un pelotón inmerso en la guerra. Es el esquema de La chaqueta metálica , entre los soldados los hay brutales y los hay concienciados, la diferencia estriba en que ahora cada soldado es -o puede ser- un testigo con cámara, un recolector de imágenes en cuyas luces y sombras quedará impreso aquello que entendemos como «lo que ha acontecido», sucedáneo de la verdad.
En Redacted , a diferencia de la confusa La batalla por Hadiza , en la que su realizador se perdía en equilibrios imposibles y en justificaciones no pedidas, De Palma se sirve de imágenes nobles y de imágenes bastardas. Hay confesiones a cámara y cámaras de vigilancia que captan mecánicamente lo que acontece delante de ellas. De la suma de todas ellas surge un retrato pormenorizado, pero nada hay en esa adición de huellas que permita vislumbrar el hecho consustancial de ese despertar a la bestia interior. Ella, brutal y sanguinaria, es la que se pasea por Redacted acongojando al espectador ante lo que intuye como una extraordinaria película y un demoledor documento sobre la locura implícita en la violencia.
Cuando ví en el 73 el Fantasma del Paraíso, me pareció que Brian era un genio y que nos iba a dar muchas buenas películas. Espejismo. Ninguna de las posteriores me llegó a gustar del todo, salvo quiza Casulties of War. Supongo que terminré viendo esta como termino viendo casi todo, pero la verdad es que cada vez que veo su nombre en los títulos, me entra una pereza…
Enohorabuena por el Blog. Como os lo curraís…