Ruta nº 12 – Carcastillo / La Oliva
DATOS TÉCNICOS:
GRÁFICO DE PENDIENTES:
DESCRIPCIÓN DEL RECORRIDO:
Normalmente, y cuando voy a hacer un recorrido, me fijo un destino que merezca la pena visitar, y en base a ese objetivo, diseño un recorrido, siempre menor de 20 km., para poder admirar, aparte del destino, los paisajes y lugares que lo rodean
Así lo hice en este recorrido en el que el destino era el Monasterio de la Oliva, en Carcastillo (Navarra).
Siempre que por cualquier razón oigo la palabra Carcastillo me viene a la memoria mi adolescencia-juventud, cuando a los 16 años estudiábamos en el Instituto de Tafalla y teníamos relación con compañeros de este pueblo que venían a estudiar a Tafalla. Allí estaban los Ayechu, los Tanco, los Azcona, los Zoco. Especial recuerdo tengo de Juan Carlos Pérez cuyos padres, creo recordar, regentaban el cine, hoy seguro desaparecido, de la localidad. Igualmente de Laura Sanchez Abendaño de quien todos estábamos «locamente» enamorados y nunca nos atrevimos a decírselo; sin dejar de hacer mención a aquellas rivalidades futbolísticas entre los históricos Larrate y Peña Sport en categoría de juveniles.
Una vez hecha esta introducción/recordatorio en la que se demuestra que entre «carcamales» anda el juego, nos centramos en el recorrido objeto de esta ruta.
El recorrrido está diseñado para poder comenzar dejando el coche en la tapia de cerramiento del Campo de Fútbol de la localidad, donde habitualmente juego el histórico C.D. Larrate, y que está situado en la Calle Carretera o Carretera NA-534.
Comenzamos nuestra caminata en dirección este, por lo propia carretera, despues de pasar un par de industrias (GKN Driveline y Bajamar), algún almacén, alguna granja abandonada y algún chalet de aparente «alta alcurnia», y después de 700,00 m. nos desviamos a la izquierda, por un camino típico de concentración parcelaria, es decir ancho, llano y con buen firme (Lo que mandan los agricultores en Navarra).
Seguimos el camino sin ningún problema, y a los 285 m. en un cruce de 4 caminos, nos desviamos a la derecha empezando un pequeño ascenso, siempre en dirección Este. A los 115 m. veremos una rudimentaria puerta, hecha con mallazos de obra, que da acceso a un vertedero controlado que es, sin ningún lugar a dudas, el tramo más «horrible» de la ruta. Durante unos 300 m. veremos el citado vertedero en el que unas pilastras de viguetas de hormigón y un mallazo de obra hacen de cerramiento. Estoy casi seguro que ese vertedero es propiedad del Ayuntamiento de Carcastillo y el impacto visual es feísimo; si fuese de algún particular ya le habrían obligado a tapiarlo o a hacer alguna regeneración vegetal o algo por el estilo, pero como es de la Administración todo vale (Alguna crítica habrá que meter a algo que no nos gusta. ¿O que?).
Una vez que pasamos esta desdichado tramo giramos a la izquierda, siguiendo el camino, y ya alejados algo de la localidad, estamos en el paraje de Larrate, y si giramos la vista a la izquierda podremos admirar una panorámica en la que se ven las localidades de Carcastillo y Murillo el Fruto, prácticamente en el amanecer de esta época, bañadas por el sol y como fondo una sierra de la que desconozco el nombre (Ver foto siguiente)
Seguimos por el camino, dejamos a la derecha una finca vallada donde un perro mastín de grandes dimensiones nos increpa mientras pasamos por delante, y a los 100 m de haber pasado esta finca se nos termina el camino.
Entramos en el primer tramo «salvaje» de los tres que pasaremos a lo largo de este recorrido. No hay que preocuparse, se trata de un pinar salvaje en el que lógicamente hay mucha vegetación, y que tiene algo más de dificultad ya que tiene bastante pendiente de subida. Con paciencia, y eligiendo pequeñas sendas por donde se ve que ha pasado alguien vamos ascendiendo en dirección Este. Repito que este tramo es algo «complicadillo» por la pendiente ascendente, tenemos que ayudarnos con el bastón alguna vez; de todas formas no nos apuremos si nos despistamos, ya que la carretera NA-534 discurre por la parte alta, y en cuanto pasa un coche lo oímos, y más o menos estamos situados.
Una vez llegamos arriba del todo salimos a la carretera por en medio de dos grandes pinos que están situados en la carretera.
Una vez que cruzamos la carretera nos introducimos en un camino sin pavimentar (Cuidado en este lugar porque hay dos caminos: uno pavimentado y otro no). En el croquis que adjunto, seguido a este párrafo, podemos ver el camino a seguir.
- Llevamos 45 minutos de ruta, y hemos andado 2,500 km. la media, de momento no es buena, pero hay que tener en cuenta que la subida por el pinar es dificultosa, y a poco que te desvies pierdes algo de tiempo.
Lo que no es complicado es el camino que vamos a coger ahora (El de la derecha de la foto), que es un camino completamente llano, muy bueno y que discurre en dirección Sur, dejando a la derecha un pinar ya más gestionado, por lo menos en esta zona, en el que se puede apreciar algún que otro banco y merenderos. Seguimos este camino durante algo más de un kilómetro, y como hemos dicho a la derecha tenemos un magnífico y cuidado pinar, a la izquierda tenemos campos de cereal, y en frente vemos otro pinar, y por encima de él, y en días claros, como en que me tocó a mí, podemos admirar la cumbre nevada del Moncayo.
- Si nos vamos fijando en el pinar que tenemos a nuetra derecha, llega un momento que el pinar termina (Aproximadamente al kilómetro de llevar andando desde la carretera), por que lo corta una especie de cantera de canto rodado, y desde donde se aprecia, a través de un pequeño barrando parte de Carcastillo. Aquí tenemos que tener un poco de atención, puesto que el camino se bifurca en dos, uno sigue a la derecha, pero nosotros tenemos que coger el de la izquierda, llevando, durante 350 m., el mismo guión que teníamos hasta ahora, es decir, pinar a la deracha y campos de cereal a la izquierda.
Poco a poco nos vamos introduciendo en el pinar que se asemeja mucho al Monte Plano de Tafalla, es decir vegetación a ambos lados de un camino estrecho y sinuoso con no más de cien metros entre giro y giro. Se puede apreciar que es zona de cazadores, «a puesto», de palomas o malvices, porque cada cierta distancia hay unos postes con unos carteles que indican «P13 o P14». Pienso que querrá decir Puesto 13 o Puesto 14. Tomamos nuestra precuación, por si acaso, y nos ponemos el chaleco reflectante «anticazadores». Durante 800 m. caminamos por un camino estrecho, agradable, sombrío, silencioso que al llegar a su final, y como si de una explosión de luz repentina se tratara, el bosque abre su, hasta ahora, sombría estancia regalándonos, desde la atalaya donde nos encontramos, una panorámica abierta y excepcional del comienzo de la bardena. Estamos en el paraje de Vallescura. Durante un buen rato, y tirando de prismáticos, podemos apreciar la inmensidad de la bardena, y más en un día claro como éste.(Ver foto seguida a este párrafo).
- He nombrado en el párrafo anterior la palabra «atalaya», que quiere decir, según la Real Academia de la Lengua «Eminencia o altura desde donde se descubre mucho espacio de tierra o mar». El camino que atraviesa el bosque que hemos pasado termina en la susodicha atalaya, y eso quiere decir que si el camino termina y estamos en una atalaya, el recorrido a seguir es una bajada que no tiene senda que seguir.
Entramos en el segundo tramo «salvaje» de los tres a atravesar en esta ruta. El desnivel que tenemos que bajar, rondará los 105 m. y no hay caminos, hay que bajar por terreno salvaje.
Lo primero que hay que inspeccionar, desde esta altura, es la zona que creamos más conveniente para bajar, porque las pendiente son pronunciadas, y una mala elección puede condicionar bastante la bajada en cuanto a tiempo y peligro se refiere. Una vez evaluada la situación decidí bajar por el lugar donde se veía que la vegetación estaba más abierta, al inicio, se tiene que bajar despacio, apoyándote en el bastón, y sin prisas, porque un tropezón, debido a la fuerte pendiente, puede hacerte rodar varios metros hacia abajo. Poco a poco la pendiente va disminuyendo, y si te diriges hacia la derecha de la bajada encontrarás un pequeño barranco que te lleva hasta abajo con las pequeñas dificultades propias de este tipo de bajadas. Una vez que sales a campo abierto, seguimos bajando hacia la carretera NA-128, atravesamos un corral de ovejas, pasamos por debajo de un acueducto que discurre paralelo a la citada carretera, y salimos a la misma, a la altura de la señal que nos indica que estamos en el kilómetro 34.
- Seguimos la carretera 165 m. por la carretera, a partir del Km. 34, y nos metemos por el primer camino que encontramos a la izquierda. De repente estamos en un paisaje completamente diferente al que hemos dejado atrás. Andamos 140 m. y giramos a la izquierda por un camino amplio y llano (De los de concentración parcelaria). Estamos rodeados de campos de cereal, en el término de El Villar. Avanzamos 550 m. por el citado camino, giramos a la derecha y pasamos por encima de un puente que salva el Barranco del Abejar.Giramos hacia la derecha, avanzamos 170 m. y volvemos a meternos por un camino que hay a la izquierda y que accede a unas fincas de cereal.Seguimos el camino, aproximadamente 300 m. hasta que termina. Estamos a punto de entrar en el tercer tramo «salvaje» de los tres que tiene este recorrido. Una vez que termina el camino bordeamos un pequeño campo de labranza, seguimos rectos, atravesamos un pequeño canal de riego, y nos metemos en el tercer pinar objeto de esta ruta. Se trata de un pequeño tramo de pinar. Son menos de 100 m., con un desnivel del 9%. Ascendemos tranquilamente hasta llegar, en su parte superior, a un camino llano que discurre paralelo al Canal de las Bardenas.
- Una vez que hemos ascendido hasta el camino, giramos a la derecha y durante 2,600 km vamos disfrutando de un paseo placentero y abierto, por un camino descarnado por el paso del tiempo, y desde donde podemos apreciar, desde la elevación donde nos encontramos, Carcastillo y todo su entorno por la parte derecha (Campos de cereal, granjas de cerdos, pollos, corrales de ovejas, etc), y del canal por su parte izquierda con toda la vertiente del pinar que se precipita sobre él. Es curioso observar la ingeniería hidráulica que nos puede enseñar un canal, en el que se pueden apreciar sus puentes, tajaderas, arriostramientos, reglas de medición de profundidad, escaleras de evacuación ante una posible caída al canal. etc.
- Llegando al segundo cruce del camino desde que lo cogimos, giramos a la derecha. Durante un kilómetro vamos descendiendo poco a poco disfrutando del mismo paisaje, y cuando llegamos al final del camino, y nos damos de frente con un despósito de agua, cuyas paredes están pintadas de color blanco, giramos a la izquierda; estamos en el paraje denominado «El Mosquete». Otros 760 m. de camino recto y ancho, en el que aparecen las primeras fincas de vid (Propiedad, creo yo, del Monasterio de la Oliva), nos hacen llegar a un giro brusco, a la derecha, desde donde ya apreciamos, en todo su esplendor, el Monasterio de la Oliva. Los últimos 800 m. en bajada, antes de llegar al Monasterio, nos desembocan en su Bodega. Cruzamos la carretera y nos introducimos en el famoso edificio histórico destino de este recorrido.
- Tengo la suerte que no hay visitantes y que la Iglesia está abierta; durante un buen rato permanezco dentro de la basílica admirando la sobriedad de la misma. No puedo verla con detalle porque unas verjas impiden el paso, solo se puede ver desde el fondo de la nave.
El Monasterio de la Oliva es un edificio……….Monasterio situado en término de Carcastillo, lindante con las Bardenas Reales de las que es congozante. Según la propia tradición cronística de este cenobio, su origen se remonta a 1134, en que el rey navarro García Ramírez hizo donación del término de Encisa, ubicado junto a la frontera con el reino de Aragón, al abad de Scala Dei, con objeto de instalar en el lugar una comunidad cisterciense. Este hecho encuentra una seria objeción al no hallarse testimonios ciertos de la existencia de la abadía francesa de Scala Dei con anterioridad al 1137, lo que indudablemente ha inducido a pensar en la interpolación o inexactitud de la data crónica del documento de García Ramírez, hasta el extremo de haberlo considerado incluso como falso, máxime si este instrumento no es original, sino copia del siglo XVI conservada en el Libro Becerro de La Oliva.
Este texto está sacado de la página web enciclopedianavarra.biz, si quieres saber más sobre este mágnífico conjunto de edificios, pincha en este trebol ♣
Una vez realizada la visita pertinentea anuestro destino principal, nos dirigimos al final del recorrido hasta Carcastillo, por un agradable paseo, jalonado con bancos cada 100 m. que discurre paralelo, e independiente, a la NA-128, y que hace que los últimos 2 km del este recorrido los hagamos, practicamente, en plan paseo de jubilado, no sin antes echar la vista atrás y poder observar la impresionante parte trasera del Monasterio.
Una vez dentro del casco Urbano de Carcastillo, me pierdo por sus calles, entro en un bar, me tomo una «maxicroqueta» con su correspondiente caña de cerveza (Más que todo por la hidratación), y después de algo más de 4 horas de recorrido, me meto en el coche para comenzar mi regreso a Tafalla.
Este recorrido está también publicado en mi página, en la siguiente dirección: Patxi Olite / Mi Blog.
Igualmente, y para el que quiera ver todas las fotos y descargar el recorrido para poder hacerlo por donde yo lo hice, podéis hacerlo pinchando en el siguiente enlace: wikiloc / Patxi Olite / Carcastillo
¡En fin! Objetivo cumplido por hoy. Volveremos a editar más recorridos.
Saludos: