Temo caer en lo puro obvio. La vida es un “habérnoslas en el mundo”. Marx y otros lo vieron bien: el hombre está solo ante una aterradora naturaleza llena de sobresaltos y cambios más que impredecibles. Así, la naturaleza es múltiple y está viva: como bien supo Heráclito nada será nunca idéntico a este preciso instante en que tecleo para Vds. escuchando música tras haber estudiado.
La relación con la naturaleza, de la cual formamos parte, es donde reside el conformarnos como seres sociales puesto que beneficioso fue el hecho de organizarnos –desde épocas pretéritas- para cazar más y mejor. De ahí vendrían las versiones del antropólogo Marvin Harris: diferentes modelos de primigenias sociedades, siempre con un “redistribuidor” de la caza y comida acumulada para los tiempos en donde la naturaleza, de nuevo, se vuelve hostil: los largos inviernos. Nunca hubo un «comunismo primitivo». Nos guste o no.
El desarrollo posterior es fácilmente intuido: las primeras ciudades en el lejano oriente, las “polis” griegas, el imperio alejandrino y el romano, etcétera.
Pero estamos solos, no lo olvidemos. El humano es un ser que psicológicamente –y si tiene dos neuronas funcionando- reflexiona en un eterno diálogo «consigo mismo». Nietzsche decía que su diálogo era entre “ Yo con Mi”.
Los apellidos identitarios nada dicen de nosotros. Nuestros padres, a lo sumo, son importantes. El heredar de ellos lo mejor es nuestro deber: es la noción no manoseada de “tradición” que Hannah Arendt tanto reivindicara.
Estamos solos: tengan una mala noche por lo que fuere. Bien recordaba el Marx más genial (Groucho, of course), que él no podía imaginar nunca las angustias de una persona en medio de la noche. Lo consideraba la más pura intimidad. Y es ahí en donde me refiero a nuestra soledad: ahí habita. Estamos solos. Podemos acompañarnos bien: lo aconsejo. Una buena conversación con alguien inteligente y de humor sano vale más que cualquier prebenda que nos venda al mismísimo Mefistófeles.
Pero seguimos solos: dedicarnos a saber cómo llevarnos, con nuestros impredecibles momentos -pues naturaleza somos- es un arte que algunos lo han llamado Ética, otros Religión. Somos, en el fondo, unos bichos realmente curiosos.
Pero solitarios en el fondo y a la postre.
Para quien siempre ha vivido solo la soledad no existe. Es un estado habitual. Para quien vive pensando en no estar sólo, la soledad es una tragedia. Ahí adamos todos. Unas veces necesitamos compañia y, otras, …
Como dijo el gran antropólogo y amigo José Luis Cardero «Los dioses nos han abandonado» Algún día hablaremos largo y tendido al respecto Don Iñaki… Soledad bonito nombre para una compañera…
[quote:5d7861c5bb=»Javier Arizaleta»]Para quien siempre ha vivido solo la soledad no existe. Es un estado habitual. Para quien vive pensando en no estar sólo, la soledad es una tragedia. Ahí adamos todos. Unas veces necesitamos compañia y, otras, …[/quote]
Interesantísima reflexión Javier. Es otro punto de vista, sanamente sociológico, que me hace reflexionar: lo más sano que hay para acompañar la soledad 😉
Muchísimas gracias.
Amigo Iñaki para mi la soledad es algo que creo que no podria llevarla bien, soy una persona que necesito tener a mis seres queridos junto a mi.Eso depende de cada uno..
Es un tema para reflexionar.
Un abrazo..
Maika
[quote:4042cd75a2=»marco»]Como dijo el gran antropólogo y amigo José Luis Cardero «Los dioses nos han abandonado» Algún día hablaremos largo y tendido al respecto Don Iñaki… Soledad bonito nombre para una compañera…[/quote]
Un abrazo Mikel, no te he podido responder a primera hora de la mañana: me iba a trabajar -mejor que estar en el paro, bien lo sabes.
Te intentaba responder esta mañana, como decía, que tengo que seguir más al antropólogo José Luis Cardero: si vivimos sin dioses, muchos, viven en soledad y tal vez atraídos por el nihilismo destructivo. Si vivimos siendo ateos, con toda la desazón que ello conlleva pues no es nada fácil, también podemos caer «al lado oscuro» 😆
Gracias Mikel por tu comentario y referencias.
[quote:7ac522fa86=»Maika»]Amigo Iñaki para mi la soledad es algo que creo que no podria llevarla bien, soy una persona que necesito tener a mis seres queridos junto a mi.Eso depende de cada uno..
Es un tema para reflexionar.
Un abrazo..
Maika[/quote]
Me reconozco un fan de cierta soledad, con el móvil o el teléfono fijo de toda la vida al lado, mientras leo.
No niego el estar bien acompañado, es más, creo aconsejarlo en el «post». Yo también soy un ser sociable, por eso tal vez nos llevemos tan bien de manera «virtual» querida Maika 😀
Da gusto ver cómo os ha llegado a calar el tema: creo que en el fondo, muy en el fondo, nos sabemos solos. No es saber que la soledad nos invade y que, incluso, pueda llegar a ser una enfermedad. Creo que me refiero al hecho de que nacemos solos y morimos igual. El estar acompañados está muy bien en ambos casos, pero en la mismidad de la persona y partiendo del indiscutible hecho de que somos únicos e irrepetibles individualmente: hay cierto sabor a estar solo en tamaños aconteceres de nuestra experiencia vital.
Un beso Maika y muchísimas gracias por tus comentarios: ¡¡¡se esperan más tuyos y de los demás, NO QUIERO ESTAR SOLO en este jardín llenito de polen!!! 😉 😆