Vida de paso…

Estamos en esta vida de paso”: latiguillo en el que sólo cree quien lo hace también en “un más allá” (monoteístas) o en la reencarnación a través de distintos “más allás” (orientalistas varios), paradójicamente desde un “más acá” (como diría el inmortal Epicuro).

¿Qué frustrante angustia, ansiedad o malestar oprime los pechos y nubla las mentes de quien siente que se engaña a sí mismo cobardemente pensando así?: no estamos de paso. Una vida: una ocasión. Ocasión de hacer lo suficientemente el gilipollas, de aprovechar el tiempo, de caer en errores que hacen aprender, etcétera. ¿Cuántas veces oír un “si yo tuviera 20 años con lo que sé ahora…”?: ¿Qué harías?, inquiero yo. ¿Qué?: estupideces, nada más. Sólo se es inconsciente cuando se debe y racional también. Hay quien lo llama madurar. Se aprende, aprendemos, a base de golpes. No cabe darle más vueltas: la vida es una y no nos quiere lo suficiente como para dedicarnos todo su tiempo.

Debemos habérnoslas solos en la vida: “ante” la vida. Al final es la mayor de las putadas (con perdón). Allá cada cual: llévense bien porque el trayecto está lleno de idiotas (la gente más interracial, interclasista e internacionalista que existe).

Vida solo hay una y a ti te encontré en la calle: ríanse. Viviendo. La vida es cosa seria: sin diversión y humor, no obstante, nadie: es. Pues nadie sería sin un ápice de sanas risotadas, sin humor negro. Es lo que nos queda: una herramienta. Sólo los que vemos de cerca alguna vez las entretelas de la parca maldita, sabemos que nada hay después. Nada. Sólo una vida: sólo una oportunidad de ser insensatos o todo lo contrario.

Nadie tiene derecho a juzgarnos ni a priori, ni a posteriori por vivir de manera diferente a la suya: Bertrand Russell tenía razón al hacer hincapié en la manida “higiene mental”: pensar en demasía sobre lo que los demás creen de nosotros, es una gran pérdida de energías y de tiempo. Emplear dichas joyas en otros menesteres, es una buena administración de nuestra ociosidad: un buen remedio.

Que piensen lo que quieran: yo llevo la cabeza rapada. ¿Alguien entre Vds. con el pelo azul? Ojalá que sí…

Una vida: una sola elección. Una, por tanto, única forma de disfrutar de lo que tan sólo poseemos de verdad: los sentidos, el cuerpo. ¿Problemas a la hora de emparejarse? ¿Da igual si es del mismo sexo o no?

Una vida: una opción.

¿Después?: nada.

Elijan.

Acerca de epicuro

Alumno de todo, maestro de nada...
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