175 años de un Pacto que no lo fue

BanderolaEl pasado 16 de agosto se cumplían 175 años de la Ley -mal llamada Paccionada- de Modificación de Fueros de 1841. Con dicha Ley, se le arrebataba a Navarra su condición de Reino, incorporándola a la unidad constitucional española. Aquello era la plasmación legislativa del Convenio de Bergara de 1839 que puso fin, con el famoso abrazo entre Espartero y Maroto, a la Primera Guerra Carlista. Posteriormente, el Gobierno central eliminó la Diputación del Reyno, que emanaba de las Cortes, e impuso una Diputación de la provincia con personas elegidas entre los navarros (pocos) que no apoyaron al pretendiente carlista.

Todo lo anterior, hechos históricos, viene a refrendar que la pérdida de la condición de reino, y todo lo que lleva aparejado, es fruto de una derrota militar, y fue negociado por quienes el propio vencedor eligió. Por eso, resulta un insultante sarcasmo hablar de Ley Paccionada; Ley de Capitulación hubiera sido, sin duda alguna, mucho más acertado.

Es más, si se me permite el paréntesis: podemos decir que la Ley de 1841 fue nula, foralmente hablando. Y es que en su elaboración no intervinieron las Cortes de Navarra, que junto al Rey eran los únicos poderes competentes para modificar nuestras instituciones, y nuestras leyes. Y cerremos el paréntesis de historia-ficción, o de legitimidad-ficción, y volvamos a los hechos consumados.

El caso es que Navarra cedió entonces el poder legislativo, el ejecutivo y el judicial; modificó su organización provincial, y municipal, traspasó al Estado sus productos y rentas más saneadas; se perdió la capacidad de emitir moneda y se trasladaron las aduanas al Pirineo; se gravó con una contribución anual fija en vez del donativo voluntario, y se aceptó el servicio militar. A cambio de todo eso, Navarra retuvo una autonomía fiscal, tributaria, civil, administrativa, y de gestión municipal que derivó, entre otras cosas, en la creación de un caciquismo local que controlaba las instituciones navarras.

Aquella ley apenas tuvo apoyo interno. Por el contrario, el rechazo a la misma fue tan grande que hubo comisionados, como Fulgencio Barrera, a quienes sus paisanos tudelanos jamás dejaron de vilipendiar, hasta su muerte, como traidores a la patria.

Sin respaldo popular, sin cimientos legales sólidos… ¿cómo sostener la argumentación cuarentayunista? Ha habido varias líneas de justificación. Por un lado, se ha tratado de relacionar directamente la prosperidad de Navarra con la Ley Paccionada de 1841; argumentación paradójica, puesto que aquella Ley recortó una soberanía y unos recursos que hubieran sido mayores y, por tanto, hubieran permitido una aún mayor prosperidad. Por otro lado, hay quienes consideran que la Ley metió a un Reino medieval, como el de Navarra, en una sociedad liberal y moderna como la española de aquella época; y tal consideración supone tomar al pueblo navarro por incapaz de adaptarse a la realidad político-social que les rodease en cada momento. Igual que cualquier otra sociedad, sin duda Navarra hubiera adaptado sus leyes transformando sus Cortes medievales en verdaderas instituciones de representación popular. Si fuimos capaces de resurgir económicamente, con mayor razón podríamos haber evolucionado, por nosotros mismos, también en nuestras instituciones políticas.

Todo lo anterior me hace pensar que cualquiera que se considere navarrista (e inclusoNavarrísimo) ha de tener sus reticencias hacia esta Ley si la analiza fríamente. En cambio, son muchos los que la usan como defensa de lo navarro porque “el nacionalismo vasco quiere ver naufragar esta Ley”. Claro que el nacionalismo vasco aborrece aquella capitulación: porque el nacionalismo vasco anhela que Navarra, y el resto de los territorios forales, recuperen la soberanía perdida entonces. Lo que ocultan los presuntos “defensores de la esencia navarra” es que esa misma opinión fue mayoritaria en Navarra antes de que dejara de ser reino. Y de esta manera la reformuló Sagaseta de Ilurdoz, uno de sus mayores conocedores por su cargo como Síndico del Reino. Y es el planteamiento que mantuvieron las grandes figuras del fuerismo navarro en el siglo XIX: Arturo Campión, Iturralde y Suit, Hermilio de Olóriz, y otros intelectuales de la Asociación Euskara de Navarra, o ya en el XX figuras como Luis Oroz y tantos otros.

Para todos los mencionados, el elemento más determinante de la identidad política navarra estaría en el Fuero. Un Fuero entendido como poder constituyente originario e incondicionado, propio del pueblo navarro per se y no como nada debido o pactado. De ahí la reivindicación de la Reintegración Foral Plena, que era un sentir popular (un tanto confuso) en la Gamazada, y que tomó cuerpo de modo muy claro en la Asamblea de Ayuntamientos de Pamplona de 1917 o en el movimiento estatutario de 1931-1932. Aquella visión de la foralidad fue siempre defendida por el carlismo; y en la Transición coquetearon con ella desde el propio regionalismo navarro hasta aquel socialismo del PSE con sede en Pamplona e ikurriña en el balcón.

¿Qué legitimó, en fin, aquella Ley de 1841? Nada salvo el transcurso del tiempo y la adaptación de la ciudadanía navarra a la situación devenida. Pero las consecuencias de la Ley, ya apuntadas, nos acompañan, y cito palabras de Arturo Campion en 1891: “A la sombra adormecedora de esta ley funesta, que halaga ciertos prosaicos sentimientos de bienestar material, vivió tranquila Nabarra durante muchos años, resbalando pausadamente por el plano inclinado de la asimilación”.

Fluctuat nec mergitur (Lema de París)

Aquellos que renunciarían a la libertad esencial por comprar un poco de seguridad temporal no merecen ni la libertad ni la seguridad. Benjamin Franklin

ParisLa sociedad francesa, y en general la occidental, ha quedado en shock después de los terribles atentados de París del pasado viernes. Y es en este contexto en el que el Presidente de la República Francesa, François Hollande, hizo un discurso ayer que a muchos nos recordó el de George Bush tras el atentado de las Torres Gemelas, el 11 de Septiembre de 2001.

Las duras medidas que propone me parecen, de entrada, un inmenso error como ya lo fueran aquellas que nos llevaron a la guerra de Iraq hace ya 10 años. Medidas que serían aún más duras si Marine Le Pen, que cada vez está más arriba en las encuestas, accediera al cargo. Me centraré en las dos más impactantes que desde mi punto de vista vulneran las libertades más esenciales.

Cerrar mezquitas donde se imparta el odio. Esta medida, que a priori parece del todo lógica me parece un auténtico despropósito por varias razones. La primera, y más obvia, las mezquitas no delinquen, lo hacen quienes hablan dentro. Y dentro de una mezquita, quien lleva la voz cantante es el imán, y su junta directiva. No hace falta cambiar ley alguna para actuar, y si alguien de ese grupo mencionado actúa al margen de la ley generando odio hay mecanismos en la actualidad para detener y poner a disposición de la justicia. Me resisto a creer que la policía y los servicios secretos no sepan si en determinadas mezquitas se da o no esos reprobables mensajes. Las consecuencias de cerrar una mezquita no son menos graves porque estás yendo contra una de las libertades más básicas de la ciudadanía, que es la libertad de credo, y su libertad para ejercerla. ¿Qué mensaje mandamos al cerrar centros de culto? Los fieles que fueran a ese lugar se radicalizarán más sin duda alguna si en vez de detener y cambiar a ese presunto imán generador de odio por otro con un mensaje de paz se cierra su lugar de rezo. Además, cerrar una mezquita no evitará que sus feligreses se dejen de reunir en otro lado. Por no mencionar que los terroristas de Daesh aplaudirán con las orejas si se llega a este extremo porque eso alimentaría su discurso del choque entre fieles e infieles.

La segunda medida que se está barruntando es el cierre de fronteras para evitar la llegada de refugiados. Ayer Hollande dijo que o se reforzaban las fronteras exteriores de la UE o Schengen, el acuerdo que permite la libre circulación por la Unión, estaría muerto. Marine Le Pen fue más allá al pedir la prohibición de la llegada de más inmigrantes. Polonia, por su parte, anunció que no iba a aceptar ni un solo refugiado más (1). Otro despropósito a añadir. Según los datos que nos ofrece ACNUR (2) hay 4.180.631 refugiados sirios en los países vecinos. Esta cifra incluye a 2,1 millones de sirios registrados en Egipto, Iraq, Jordania y Líbano, y 1,9 millones de sirios registrados por el gobierno de Turquía. Además, hay más de 7,5 millones de desplazados internos en Siria. ¿De verdad es razonable pensar que toda esa cantidad de refugiados son peligrosos terroristas para la UE cuando precisamente están huyendo de la guerra y el terrorismo? Otro dato, y no menos importante, Daesh considera como traidores a los refugiados tal y como ha dejado claro en muchos de sus comunicados (3). A más, ayer mismo Heiko Maas, Ministro Justicia Alemania decía que el «pasaporte sirio (encontrado en uno de los terroristas suicidas en París) puede ser falsa pista para radicalizar el debate sobre los refugiados«. A mí me produce una inmensa tristeza ver este debate en una Europa dónde además de lo anterior nos estamos peleando por acoger a 150.000 refugiados en toda la UE.

Para mí, la prueba que hace que estos dos debates, los refugiados y las mezquitas, es un inmenso error es lo que se va sabiendo de los nueve terroristas (4) de la masacre en la capital gala. De ellos, cinco son de nacionalidad francesa, tres no se han identificado todavía, y uno de ellos es el que tenía el pasaporte sirio mencionado anteriormente. Según se ha podido saber todos ellos son jóvenes que proceden de los barrios bajos franceses y han estado envueltos en la delincuencia de poca monta. Según el artículo de Rafael Poch (5) en el que cita al magistrado de la sección antiterrorista de París, Marc Trédivic, el perfil de estos terroristas es que solo “un 10%” de las causas del reclutamiento de los yihadistas se deben al aspecto religioso. La atracción viene más “de los problemas que hacen que esa gente no esté insertada en la sociedad; ausencia de trabajo, su pasado violento de delincuencia, eventuales problemas psiquiátricos”, enumera. Así mismo, añade Poch citando al  psicoanalista de la Universidad Paris-Diderot, Fethi Benslama, los reclutas del yihadismo francés son perfectos analfabetos en materia religiosa. Son gente “que busca la radicalización, antes incluso de encontrar el producto”.

Hollande también habló de dos cosas más, aumentar la policía, y destruir a Daesh. No sé si con un aumento de policía habrá más seguridad porque viendo cómo actúan los terroristas se necesitaría un policía por cada ciudadano. Quizás sea mucho más efectivo invertir ese dinero en aumentar los recursos de Inteligencia que puedan analizar y advertir de posibles atentados.

En lo que estoy totalmente de acuerdo es en que hay que destruir a Daesh. Independientemente de que considere o no idónea una intervención militar visto el resultado final en Libia e Iraq, Francia parece que va a seguir esa senda. Pero aún cuando el uso del ejército fuera la mejor opción, el discurso del Presidente francés me genera muchas dudas. La primera es que para acabar con el santuario que los terroristas tienen entre Siria, e Iraq hay que mandar infantería. No vale con indiscriminados quirúrgicos ataques aéreos. Y para ello sólo hay tres opciones; mandar tropas propias, dejar hacer a kurdos, y al dictador Al Asad, o ambas juntas. Ayer mismo Obama descartaba mandar soldados americanos.

Dejar hacer a los kurdos es contrariar, si no algo mayor, a Turquía, cuando es perfectamente sabido que los turcos han estado y están bombardeando el Kurdistán (6). Por otro lado dar apoyo a Al Asad es dar un giro de 180 grados a lo que ha hecho Francia en los últimos años (7) que es apoyar financiera, y armamentísticamente a los enemigos del dictador sirio. En ese sentido llama la atención las declaraciones de Hillary Clinton en las que admitía que “financiamos mal a rebeldes sirios y surgió Estado Islámico” (8).

Y es aquí donde surgen nuevas preguntas sobre el futuro de esa acción coordinada que acabará con Daesh. ¿Quién ha financiado a Daesh?, ¿quién ha armado a Daesh?, ¿quién compra el petróleo a Daesh? Ayer mismo, el presidente ruso Vladimir Putin, cuya aviación desde hace unos meses está ayudando al régimen de Al Asad, lanzaba una velada acusación diciendo que “La financiación, como hemos sabido, proviene de 40 países, entre ellos varios países del G-20”, aludiendo de manera muy directa a Turquía y Arabia Saudí (9). Por el contrario, en dicha cumbre han acordado luchar contra la financiación de Daesh, y yo espero, por el bien de todos, que sea lo más temprano posible, y de la manera más eficaz porque ahogarlos financieramente es el primer paso para su derrota.

Espero que además de lo anterior se haya aprendido de una vez por todas la lección de la inmensa bisoñez que ha sido creer que se podía controlar a quién no puede ser controlado tal y como nos advierte el twittero @cierzo_bardener; “El yihadismo es la expresión militar de una ideología totalitaria que no admite en su seno ni el capitalismo, ni el comunismo, ni el nacionalismo, ni el laicismo, etc. a los que considera enemigos a eliminar y toda colaboración con ellos es considerada temporal a fin de eliminar un enemigo para posteriormente centrarse en el otro. Como en el caso del escorpión de la fábula, está en su naturaleza y espera el momento para revolverse contra sus antiguos aliados” (10).

Para finalizar, el mensaje de esperanza que nos deja el lema de la ciudad de París. Fluctuat nec mergitur, que significa “Es batida por las olas, pero no hundida”. Nos han golpeado sí, pero no nos podrán hundir.

José Antonio Beloqui

(1)http://www.eldiario.es/desalambre/Polonia-ultraderecha-xenofobia-rechaza-refugiados_0_452505040.html

(2) http://www.acnur.org/t3/que-hace/respuesta-a-emergencias/emergencia-en-siria/

(3) http://observatorioterrorismo.com/comunicacion-publica/daesh-lanza-una-campana-audiovisual-para-recordar-a-los-refugiados-sirios-que-llegar-a-europa-les-pone-en-serie-de-riesgo-de-fornicacion-sodomia-drogas-y-alcohol/

(4) (El Mundo) http://www.elmundo.es/internacional/2015/11/16/5649827446163fe8268b45d5.html

(5) (La Vanguardia) http://www.lavanguardia.com/internacional/20151116/54438864647/como-maldita-profecia.html

(6) (El Mundo) http://www.elmundo.es/internacional/2015/11/11/56435f83268e3ec4028b459e.html

(7) http://m.france24.com/en/20140821-france-arms-syria-rebels-hollande

(8) https://actualidad.rt.com/actualidad/view/136648-clinton-ayuda-rebeldes-sirios-estado-islamico

(9) (La Razón) http://www.larazon.es/internacional/putin-varios-paises-del-g20-financian-al-estado-islamico-CD11211641#.Ttt1MSTten1M35x

(10) http://blogs.noticiasdenavarra.com/prolibertatepatria/2015/11/16/paris-afganistan-2-0/

París, Afganistán 2.0

«Locura es hacer lo mismo una vez tras otra y esperar resultados diferentes«

Corría el año 1978 cuando la Unión Soviética se decidió a intervenir para frenar un sangriento conflicto entre facciones del Partido Comunista Afgano por hacerse por el poder. La guerra fraccionalista y la operación soviética para mediar entre ambas partes alentó a islamistas de diferentes grados para alzarse y ya en 1980 el gobierno afgano y las tropas soviéticas solo ejercían un control efectivo en las grandes ciudades del país.

EEUU ante la oportunidad que le había dado la historia para golpear a la URSS en su patio trasero apoyó, financió y armó (con la ayuda de los servicios secretos pakistanís) una red internacional de voluntarios islámicos para derrocar al gobierno comunista afgano y asestar un golpe que a la postre resultó definitivo a la Unión Soviética.

A este fin decenas de miles de islamistas acudieron a Afganistán desde el Magrhib hasta Filipinas e Indonesia, pasando por las repúblicas soviéticas de Asia Central, y una vez tomada Kabul en 1992 muchos de ellos volvieron a sus países radicalizados y con una gran experiencia en manejo de armas, lo que sumió a países como Argelia, Libia, Pakistán, etc. en un baño de sangre sin precedentes en el periodo 1992-2000 que a duras penas pudo ser sofocado.

El hecho de apoyar a una opción rigorista en un país de base tribal no funcionó y tras muchos conflictos sangrientos los Talibán se hicieron con el poder en el país mientras la atención pública se centraba en el derrocamiento de Sadam Hussein, en una invasión que atrajo a los desmovilizados de Afganistán y de las diferentes guerras civiles que azotaban el norte de África sumiendo Iraq en un conflicto sectario sangriento que a mayor o menor escala perdura hasta la actualidad.

Las Primaveras Árabes que comenzaron en 2011 preludiaban un aire de libertad en unos países del norte de África y Oriente Medio regidos por largas dictaduras o monarquías absolutistas. Así pues en cuestión de meses caían los gobiernos de Túnez, Egipto y Libia y sufrían bastantes apuros para mantenerse en el poder Ali Saleh en Yemen, Bashar al Asad en Siria y la familia real de Bahréin.

Si bien las primaveras árabes convulsionaron los países anteriormente citados, dos casos de entre ellos han causado terremotos a nivel internacional, de los cuales sufrimos las consecuencias y estos son Libia y Siria y que guardan enormes paralelismos con el caso afgano.

Referente a Libia y coincidiendo con rumores que circulaban por toda Europa de que se iban a descubrir la financiación por parte de Gadafi de numerosas campañas electorales de partidos políticos (y en especial Sarkozy y la UMP) que habían llegado al poder con ese dinero, estalló en el este de Libia un alzamiento cívico-militar que rápidamente fue apoyado por países occidentales y estados del Golfo dotando a este alzamiento de armas, voluntarios y cobertura aérea, haciéndose rápidamente con el poder en Libia el brazo político de la rebelión, una heteróclita amalgama de milicias tribales, federalistas e islamistas, saqueaban los arsenales del ejercito libio y se repartían el territorio libio en innumerables feudos enfrentado entre ellos.

Fruto del saqueo de los arsenales libios se generó una enorme inestabilidad en el Magreb ya que los grupos yihadistas de la región disponían de una fuente casi inagotable de armas y munición y al poco se estableció un emirato islámico en el norte de Mali que tuvo que ser abortado por Francia con la ayuda de tropas de los países vecinos. Otra parte del botín de dichos arsenales fluyo a milicias armadas en Nigeria, Túnez, Egipto, Argelia y Siria.

Desde 2012 hasta el día de hoy Libia ha estado sumida en el desgobierno, primero con un gobierno islamista protegido por unas milicias provenientes en algunos casos del extinto Grupo Islámico Combatiente Libio (vinculado a Al Qaeda) o de la Hermandad Musulmana, y después sumida en una guerra civil, cuando los islamistas se negaron a abandonar el poder una vez vencida la legislatura y en la que el ISIS y Al Qaeda crecen a sus anchas ante el desinterés europeo pese a ser una plataforma para lanzar ataques a centenares de kilómetros de Europa.

Siria, antaño parte del imperio colonial francés vio como una serie de malas cosechas y un empobrecimiento de la población unido a la involución política del país tras unos años de tímida apertura política dio lugar a una insurrección civil que con el tiempo fue instrumentalizada por los mismos grupos que en diversas ocasiones se habían alzado con anterioridad a fin de establecer un estado regido por la Sharia.

Francia, viendo la posibilidad de volver a influir en un país que había salido de su control en los años 60 apoyó inmediatamente a los alzados y en compañía de Turquía, Arabia Saudí y Qatar canalizó la ayuda proveniente de los países de la Unión Europea y EEUU. Durante años se ha armado a unos rebeldes moderados que si bien al principio tuvieron diversos éxitos militares, se han vistos diezmados por la incompetencia y la corrupción de sus mandos políticos y militares y las deserciones masivas a opciones más serias y /o mejor armadas.

Pese a que es francamente visible en lo que ha derivado el conflicto sirio en el que el ISIS controla prácticamente la mitad del país y lo que jocosamente sea venido a llamar Rebeldes Moderadamente Moderados (Al Nursa/Al Qaeda, Ahrar Al Sham,Liwa Al Quds,etc) se extienden por las provincias de Idlib y Alepo, el flujo de armas canalizados por Francia, Qatar, Turquía no se ha visto reducido aún a sabiendas de que dichas armas y hombres destinados a los rebeldes moderados acabaran en manos yihadistas ya sea por saqueo, venta o deserción de la tropas con las armas recién entregadas.

Conclusión

Lo anteriormente escrito no es fruto un análisis acrítico antioccidental sino de un serena reflexión que refleja el errado empeño de países occidentales en aliarse ocasionalmente con el yihadismo a fin de combatir a un enemigo común.

El yihadismo es la expresión militar de una ideología totalitaria que no admite en su seno ni el capitalismo, ni el comunismo, ni el nacionalismo, ni el laicismo, etc. a los que considera enemigos a eliminar y toda colaboración con ellos es considerada temporal a fin de eliminar un enemigo para posteriormente centrarse en el otro. Como en el caso del escorpión de la fábula, está en su naturaleza y espera el momento para revolverse contra sus antiguos aliados.

En los años 80 los voluntarios que combatieron para derrotar al comunismo eran del Magrib, Asia Central e Indonesia-Filipinas, los de esta década además incluyen decenas de miles de jóvenes nacidos en Europa ,EEUU, Canada y Australia y nada induce a suponer que no van a repetir el esquema reproducido en los 90 en el Magreb, esto es, radicalizar a la población musulmana y establecer allá donde puedan emiratos regidos por la Sharia.

Los que han cometido este horrendo crimen en París saben que están creando un caldo de cultivo para inestabilidades posteriores fomentados por los recelos interreligiosos entre franceses y la posible represión policial que hábilmente manipularan para mostrarla como un ataque al Islam cuando en realidad se trate de la desarticulación de un grupo extremista incompatible con lo que significa Francia y Europa. Y además saben que van a coger de improviso a los servicios secretos occidentales ya que éstos han considerado (salvo honrosas excepciones) la radicalización de su juventud como un problema lejano en el tiempo que con suerte les solucionaría un problema con un gobierno no amigo y con mucha suerte se quedarían o morirían en dicho país, cosa que como demostró el caso afgano no es cierta.

Es hora de tomarnos en serio, entre todos, el problema de la radicalización y el de los retornados porque explosiones como las de ayer son evitables a base de reforzar la vigilancia, pero el caldo de cultivo es más difícil de detectar y controlar y este es el descontento de la juventud (no necesariamente de origen musulmán) la falta de perspectivas de futuro y la facilidad con la que se propagan los discursos de odio y se financian estos discursos desde países anclados en el Siglo VIII.

Por @Cierzo_bardener

Enlaces

Gadafi-Sarkozy -> http://internacional.elpais.com/internacional/2015/03/06/actualidad/1425652258_623802.html

Guerra civil libia http://blogs.noticiasdenavarra.com/prolibertatepatria/2014/11/24/la-crisis-de-libia-en-el-contexto-regional/

->http://lendavant.com/el-terror-del-isis-en-libia/

-Armas francesas en Siria https://actualidad.rt.com/actualidad/174091-francia-entrega-armas-siria

[Enlace roto.]

http://www.europapress.es/internacional/noticia-hollande-confirma-francia-envio-hace-meses-armas-rebeldes-sirios-20140822060606.html

El Rubicón catalán

César RubiconCayo Julio César contempla la otra orilla del río Rubicón. Sabe lo que ocurrirá si lo cruza al mando de sus hombres de la XIII Legión. Es ley que un general que cruce ese límite con un ejército habrá deshonrado el juramento de la República.

Observa triste el lento paso de las aguas. Él jamás ha incumplido la ley. Ha sido un auténtico ejemplo en el cumplimiento del Cursus Honorum, haciendo y estando en cada cargo público cuándo y cómo debía. Una corona de laurel le recuerda cómo salvó a sus hombres, y cómo sus infames enemigos deben levantarse a aplaudirle porque es tradición que así se haga al portador de tan distinguido honor.

El caballo relincha, y casi desde aquí percibo el vaho de la nerviosa respiración del fiel animal de César. No es una decisión fácil.

Su pensamiento se dirige ahora hacia sus senadores enemigos. Esos togados que eran incapaces de moverse de su anquilosado asiento senatorial, y dejar morir a una Roma corrompida hasta en sus cimientos. Eran incapaces de ver la agonía de una República que pedía un cambio. No consiguieron destruir a su grupo aún cuando quedó descabezado tras la acción de quien se ve cómodo conspirando para mantener sus privilegios.

Sonríe pensando en su reacción creando el triunvirato entre Pompeyo, Craso, y él, y la sonrisa se torna amarga al recordar a su amigo Craso, y su muerte ante los partos. Algún día saldaría esa cuenta contra aquel indómito pueblo. El destino siguió siendo cruel y su hija, mujer de Pompeyo, y el niño que llevaba dentro  murieron al nacer dejando al albur del capricho de un hombre de provincias una alianza que hubiese salvado Roma. No tardó Pompeyo en dejarse seducir por los cantos de sirena de aquellos senadores ávidos de ver la destrucción de César. Entonces la situación se complicó para el hombre más famoso de la gens Julia. La guerra civil parecía inevitable puesto que si tenía que elegir entre perder su Auctoritas o su Potestas se decantaría por lo primero.

César no tiene otro remedio que violar una ley que si se cumple le destruirá. Después de conquistar las Galias para el Pueblo de Roma, verse relegado por un Senado ingrato es demasiado. Le viene a la mente la cara de satisfacción de Catón y demás personajes de similar calaña resonando a su vez en sus oídos los gritos jurando que le encadenarían, le juzgarían y le desterrarían. Eso si conseguía llegar vivo a Roma. Duda de que le dejen vivir, aunque si aceptara lo que le ordenan lo más seguro y honorable que puede hacer es arrojarse sobre su espada como patricio y descendiente del trono de Alba Longa que es.

Recuerda incrédulo la carta del Senado. En ella se le ordena devolver el mando de sus legiones. Él, acatando la legalidad, les entrega dos de ellas, y pide garantías senatoriales. La respuesta recibida es la anulación de todas sus leyes promulgadas mientras fue Cónsul, incluida su medida más querida. Aquella en la que concedía la ciudadanía romana a los habitantes de la Galia Cisalpina.

Aquello era la gota que colmaba el vaso. ¿Cómo se atrevía el Senado a negar lo que era suyo a aquellos hombres que habían derramado su sangre por la República? Aquellos que habían sido masacrados en Gergovia, y que habían sufrido un terrible asedio en Alesia. Él había padecido mil penurias con sus hombres, y había luchado codo con codo con ellos, y no podía dejarles tirados.

El último golpe recibido fue ver a los tribunos de la plebe, que eran intocables, verse arrastrados ante él llenos de jirones y moratones al tratar de vetar tal injusticia. El Senado ordenaba además expulsar a los galos del ejército. No cabían más humillaciones.

Ante la opción de ser juzgado por sus enemigos, o el suicidio honorable, solo tiene una salida; cruzar el Rubicón. A un hombre se le pueden exigir muchas cosas, pero no que sea el mártir de un régimen corrupto y abyecto dirigido por incompetentes, resentidos y ladrones.

¿Y qué tiene que ver esto con Catalunya? Nada. O tal vez sí. Sea como fuere las cosas ya no serán iguales.

Alea Jacta Est.

José Antonio Beloqui

Fuente: http://www.historialago.com/

El nacimiento del Estado Catalán

Ya se ha deshojado la margarita del 27S y como suele suceder tras unas elecciones todos dicen haber ganado. Desde el punto de vista de los escaños no hay mucho que decir. El Sí ha ganado con mayoría absoluta en el Parlament y tienen la legitimidad de llevar a cabo el proyecto con el que han ido a las urnas. Pero al ser unas elecciones al que se le han dado la etiqueta de plebiscitarias, creo que no es posible abstraerse de analizar el voto popular. Empezaré por lo datos que no tienen discusión.

La mayoría silenciosa constitucionalista en Catalunya

Con un 77% de participación y una votación tan ajustada creo que cabe decir que quienes sostenían que un aumento significativo de la participación se llevaría el independentismo por delante han errado definitivamente. Los catalanes han ido mayoritariamente a votar, y se han pronunciado. No se han quedado en casa dejando que otros decidan por ellos. Gana la democracia.

¿Catalunya Estado?

Los partidarios de que Catalunya sea Estado han vencido sin ningún tipo de duda. Que sea Estado significa que ellos sean el sujeto soberano para una elección de la trascendencia de un referéndum para elegir si se es independiente o no. Aunque se elija no, el sujeto político no cambia. En ese sentido, y hablando en términos de la pasada consulta del 9N, los del Sí-Sí (JxS, CUP), y los del Sí-No (CSQEP, Unió) han vencido con un porcentaje de voto del 59,22%. Aquellos que quieren mantener el Status Quo actual pierden con gran claridad, lo que hace inviable que la actual Catalunya encaje en el Estado de las Autonomías español.

Papeleta 9N
Papeleta de la consulta del 9 de noviembre de 2014

¿Catalunya Estado Independiente?

Aquí ya es cuando entramos en el terreno de las miles de interpretaciones que cada cual hará al gusto de sus propias filias y fobias. Partiré de datos forenses y a partir de ahí cada uno se puede montar el Lego que quiera. Yo, por supuesto, me montaré el mío propio.

Resultados 27S

Tanto Unió como Catalunya sí que es Pot (CSQEP) han declarado que no se les puede meter dentro del bloque del No. El propio Lluis Rabell decía que “Se puede ser independentista y votar CSQEP. Gentes como @indepesICV han presentado un manifiesto de apoyo a la candidatura que encabezo”. Así pues tenemos que el Sí ha obtenido el 47,78%, el No el 39,13%, y el Si/No el 11,44%. Por lo tanto el Sí es la opción más votada, pero no llega al 50%. El análisis de brocha gorda apuntando al No todo el voto que no sea a JxS y las CUP que se ha hecho, empezando por el propio Rajoy, no se sostiene porque ese 11,44% no se ha definido, y no hay ninguna prueba que pueda encajar ese voto en uno u otro bloque. Para eso habría que haber hecho un referéndum puro y duro a lo que se han negado por activa y por pasiva desde Madrid, y que ahora, cínicamente, cuentan los votos sin un análisis con un mínimo de rigor. Prueba de ello es que han sumado al No hasta los votos nulos.

El independentismo tiene una base del 47,78%, y un potencial de voto que podríamos establecer en el 59,22% que citaba anteriormente de ciudadanos que quieren que Catalunya sea un Estado. Ese 11,44% de indecisos lo son en tanto en cuanto aspiran a una negociación con el Estado español que pueda autorizar el derecho a decidir, o incluso reconocer a Catalunya como nación. Ni PP, ni PSOE, ni Ciudadanos están por la labor y es harto imposible que Podemos pueda conseguir ocupar 2/3 partes del Congreso de los Diputados que pudiera hacer posible esos cambios constitucionales. Con lo cual nos quedará por saber cuál será la reacción de ese 11,44% al ver esta realidad encima de la mesa después de las elecciones generales del próximo diciembre.

Es francamente dudoso que se pueda abrir el melón constitucional, y si se hace nunca vendrá reconocido el derecho a decidir. Por contra desde Catalunya no se admitirá nada menos que eso, con un pacto fiscal y blindaje de competencias. La miopía política española ha hecho que se vean ganadores porque los independentistas no han llegado al 50%, y no ofrecerán nada de enjundia a la ciudadanía catalana. Veo lógico que el porcentaje independentista consolide su posición, y que parte de ese porcentaje que votó Unió, y CSQEP se sumen superando el 50%. Cosa nada descabellada ya que del 11,44% bastaría que cambiasen el 2,23%.

Tanto Junts per Sí como las CUP han dicho que van a seguir hacia adelante. La mayoría absoluta del Parlament le avala para comenzar dicho proceso, que tendrá que superar el primer escollo de la elección del President. Las CUP no quieren a Mas y éste ha respondido que dará un paso atrás para favorecer la hoja de ruta. De confirmarse será la prueba definitiva de que quienes asociaban que Mas era el Proceso estaban totalmente equivocados. Por otro lado, las respuesta del Estado imputando a Mas por la consulta del 9N sumada a las declaraciones del ministro de Justicia en el que afirmaba que no se había imputado al President antes del 27S para no condicionar el resultado electoral es un escándalo mayúsculo en tanto en cuanto demuestra que la separación de poderes en España no existe. Sin contar que políticamente es una torpeza ya que esta vengativa jugada puede hacer que Mas sea reelegido.

Creo que Catalunya está legitimada para convocar su propio referéndum vinculante de independencia, así como iniciar conversaciones con Madrid de igual a igual hasta que haya ese referéndum. Los resultados del 27S le avalan para hacer eso pero me surgen las dudas para hacer una Declaración Unilateral de Independencia (DUI) porque aunque haya ganado en votos, el Sí no ha llegado al 50%, y en ese sentido incluso las mismas CUP han descartado hacer la DUI de manera inmediata porque “no se ha ganado el plebiscito”. Por otro lado es un auténtico escándalo que no se ha dejado votar al censo de los 200.000 catalanes del extranjero, siendo el caso más chusco de todos el de Roma. En la capital italiana se han perdido los sufragios, y se han considerado todos como votos nulos, sumándolos directamente al No.

Mi conclusión es que hace falta una interlocución, pero el problema es el de siempre, que no habrá nadie al otro lado para discutir las cuestiones de fondo. Por eso creo que, constatado ya que hay masa crítica para la independencia, ésta llegará tarde o temprano.

José Antonio Beloqui

Los viajes de la nave estelar, Catalunya

Una Declaración  Unilateral de Independencia  «condenaría (a Catalunya) a vagar por el espacio sin reconocimiento y a quedar excluida de la Unión Europea por los siglos de los siglos».  José Manuel García-Margallo, ministro de exteriores español

Uss-EnterpriseEl espacio: la última frontera. Estos son los viajes de la nave estelar «Catalunya», en una misión que durará cinco siglos, dedicada a la búsqueda de mundos desconocidos, al descubrimiento de nuevos estados y nuevas naciones, hasta alcanzar lugares donde nadie ha podido llegar.

Permítanme una poco de ironía adaptando el texto con el que comenzaba la exitosa serie de ciencia ficción Star Trek de la que soy fan incondicional, pero es que ha llegado a tal punto el nivel  de saturación con las advertencias apocalípticas sobre una posible independencia catalana que ya me lo tomo así, y mucho me temo que una gran cantidad de catalanes y catalanas también.

Y es que es eso lo único que llega. Amenazas, bravuconadas, y muchos golpeos en el pecho. Demasiados. Un engorilamiento político que como reacción lógica en el otro lado tiene un efecto de aumento de ganas de callarles la boca papeleta en mano. No ha habido un debate serio sobre qué puede aportar España a Catalunya, o las consecuencias positivas y negativas de la independencia. Se aferran a la Constitución como si fuese la Biblia, aluden a vagas declaraciones internacionales, hablan con cinismo de contar votos cuando se han negado a un referéndum puro, o tiran de los grandes, y no menos ridículos mantras como el DNI o dónde jugará el Barça la liga. Por no mencionar, claro, los inaceptables y repugnantes paralelismos entre la situación actual catalana y la Alemania nazi.

Si miramos un poco hacia atrás en la historia europea veremos que a principios del siglo pasado había 24 estados en nuestro continente; actualmente hay 47 (48 con Turquía), y de ellos, 16 se han erigido en nuevos estados durante los últimos 25 años. Ninguno de ellos ha vuelto a su estatus anterior de dependencia. Cabría preguntarse el porqué.

El argumento de la expulsión de la UE es el más curioso de todos. Para rebatirlo es conveniente tirar un poco de hemeroteca y ver qué decían los líderes europeos antes de la independencia de las Repúblicas Bálticas o Eslovenia cuando sostenían que nunca las reconocerían. Eslovenia se independizó en 1991, entró en el Consejo de Europa en 1993, ingresó en Schengen en 2004, y en 2008 presidió la UE. Con Catalunya se puede dar la paradoja de que no sea un Estado de la UE nada más independizarse, pero que todos sus ciudadanos sí lo sean tal y como se enteró el propio Rajoy en una entrevista en Onda Cero con Carlos Alsina (1). Si a esto le sumamos que Catalunya aportaría dinero a la UE creo que esa anómala situación no durará mucho en una UE que ante todo es pragmática. Con respecto al resto de líderes internacionales creo que pasará parecido. Nadie quiere que haya un problema territorial más, y ahí podemos enmarcar sus declaraciones, en el conservadurismo, pero una vez que ya se haya consumado, los Estados se adaptarán a la nueva situación. No me resisto a comentar las palabras de Cameron que dice taxativamente que Catalunya tendrá que hacer cola para entrar en la UE (no que no podrá independizarse) cuando él mismo ha convocado un referéndum para salirse de la UE.

Hace unos meses escribí (2) qué es lo que pensaba que iba a ocurrir, y disculpen mi arrebato de vanidad pero no veo que haya fallado mucho. Con la confianza que me da esto, y nuevamente discúlpenme, sumado a un seguimiento muy cercano de la realidad catalana creo que lo que dije en su día está plenamente vigente hoy. Hay una masa crítica que apoya el independentismo, y éste puede vencer. Lo que ocurra a partir de entonces se dirimirá en una mesa a negociación a tres bandas (España, Catalunya, UE) en el caso de que ganen las fuerzas favorables al sí.

Quienes se aferran con desesperación a la soberanía reconocida en la propia Constitución española les diría que toda ley, y más una constitución, es fruto de un pacto político, de unas normas de convivencia que pueden cambiar con el tiempo y a los hechos me remito. Es cierto que un porcentaje muy importante de catalanes votaron en 1978 a favor de la Constitución, pero no es menos cierto que ya han pasado casi 40 años, y que sólo los mayores de 55 años pudieron votarla, y que los que lo hicieron pueden perfectamente haber cambiado de opinión. Decía Jefferson, padre fundador de EEUU, que “la tierra pertenece a los vivos, y no a los muertos, y que cada generación es una nación distinta, y que no se puede obligar a la siguiente generación a cumplir lo firmado por la anterior al ser un contrato nuevo”. Jefferson indicaba que había que hacer cambios cada 19 años ya que “a la fecha del contrato, la mayoría de esos contratantes está muerta, y su contrato con ellos”. No hay más que ver la cantidad de enmiendas que tiene la propia Constitución de EEUU como para ver que algo de caso le hicieron.

Una Constitución totalmente rígida es igualmente frágil, y lo es más cuando ves que para unas cosas se cambian, y para otras no. Como he dicho, las leyes fruto del pacto político se pueden romper si no se renuevan los compromisos por la convivencia como acertadamente decía Iñaki Gabilondo recientemente. Y en esas estamos ahora mismo. Quizás sea ya tarde para Catalunya, pero la vía Foral siempre fue la mejor opción para encajar a las diferentes naciones que poblamos el Estado español. Herrero de Miñón apostó hace poco por ella para Catalunya pero no con mucho éxito (3).

Una simple modificación constitucional en su Disposición Adicional Primera reconocería la Reintegración Foral Plena para los territorios forales actuales, sumándole Catalunya. Ésta recuperaría su estatus de 1714, con la consiguiente actualización al siglo XXI, y hubiera bastado para dar estabilidad territorial a España hace unos años. Ahora ya no lo tengo tan claro ante el más que evidente cambio de mentalidad catalán que se han cansado ya de modernizar España, para pasar a modernizar su país. No obstante ésta sí sería una oferta en firme y clara, y no ese federalismo que nadie sabe qué es, y que por supuesto nadie se cree.

Pero claro, esta oferta confederal choca frontalmente con el problema de fondo de todo el problema territorial español. Y es que jamás reconocerá bajo su propio Estado a otra nación que no sea ella misma.

José Antonio Beloqui

(1) https://www.youtube.com/watch?v=oQWRCKO_1o0

(2) http://blogs.noticiasdenavarra.com/prolibertatepatria/2014/11/10/10n-y-ahora-que/

 (3) http://www.lavanguardia.com/politica/20140409/54405633933/herrero-minon-propone-reinterpretacion-constitucional-para-el-encaje-cataluna.html

 

A vueltas con la segunda vuelta

Suele ocurrir que cuando se pierde la capacidad para formar gobierno tras unas elecciones en vez de realizar una profunda autocrítica sobre las razones que te han llevado a perder el apoyo popular se tienda a criticar el sistema electoral. Es algo muy común en todos los partidos.
Tras las últimas elecciones municipales son el PP, y UPN quienes ahora cargan contra el sistema con argumentos de lo más variopintos que si los analizamos en profundidad vemos que no se sostienen demasiado.

El argumento de la lista más votada

Creo que es importante resaltar que nuestro sistema no es presidencialista sino parlamentarista por lo que para elegir a un presidente/alcalde, éste debe tener el apoyo de la mayoría absoluta de parlamentarios/concejales que componen la cámara correspondiente. Ser la lista más votada para lo único que te legitima es para ser tú el que lleve la primera intentona para formar gobierno. El aura de la lista más votada como mantra, y razón para gobernar está muy bien para levantar la moral de las huestes propias pero es muy poco razonable que, por ejemplo, un alcalde que tenga el 31% (UPN en Iruña) gobierne según esa regla una ciudad en la que el 69% no le ha votado cuando además hay una alternativa que sí suma dicha mayoría absoluta.

Con la cantidad de ayuntamientos que hay entiendo que exista la regla de que si no hay alternativa a la lista más votada, sea ella la que gobierne para darle cierta estabilidad, pero que sea ese el motivo único para que gobierne per se me parece un fraude democrático.

La doble vuelta

Paralelamente al argumento anterior viene el de “en una 2ª vuelta no pasarían estas cosas”, y efectivamente tienen razón en parte. Como he dicho anteriormente estamos en un sistema parlamentarista y por tanto no hay posibilidad de una 2ª vuelta en el sentido en el que se refieren los regionalistas. Para que ello fuera así habría que disociar las elecciones al Parlamento, y al Ejecutivo. Dicho sistema funciona en Francia, y muchos países, y desde un punto de vista democrático yo lo considero mejor al separar las elecciones para dos poderes diferentes, el Legislativo por un lado, y el Ejecutivo para el otro. La 2ª vuelta tiene que ver en que si un candidato al Ejecutivo no consigue tener la mayoría absoluta en unas primeras elecciones pasarán a un segundo corte las dos opciones más votadas, y entre ellas habrá una votación para elegir quién gobierna.

¿Realmente quiere UPN un sistema de doble vuelta?

Veamos la siguiente tabla con los resultados electorales en Navarra y Pamplona de las cuatro últimas veces que la ciudadanía navarra ha acudido a votar como muestra (UPN lleva gobernando desde 1996 pero como ejemplo vale). En ella he puesto los candidatos de las dos primeras fuerzas que se hubiesen enfrentado hipotéticamente en una 2ª vuelta al no obtener nadie la mayoría absoluta.

elecciones

A partir de estos hechos voy a hacer la siguiente pregunta, y que cada cual se responda a sí mismo… ¿Alguien se puede creer que con esos resultados en la mano en una 2ª vuelta los candidatos de UPN a la alcaldía de Pamplona/Iruña y al Gobierno de Navarra hubieran gobernado ininterrumpidamente durante los últimos 12 años del ejemplo?, ¿y desde 1996?
Yo desde luego no, y estoy convencido que en UPN tampoco. Por eso opino que su petición de una 2ª vuelta electoral es más postureo político que otra cosa que le sirve para intentar justificar ante los suyos su paso a la oposición.

José Antonio Beloqui

Yemen, Irán jugando en el jardín de Arabia

Encaje histórico en el actual conflicto

Cuna del histórico Reino de Saba, su islamización fue temprana pasando a formar parte de los diferentes Califatos que se sucedieron en el tiempo (El Califato Perfecto, el Omeya y el Abasida) aunque en el siglo IX, aprovechando la guerra civil que azotaba el Califato Abasida por motivos sucesorios, seguidores de una rama minoritaria del islam chiita (los zayditas) se hicieron con el control de la zona costera de Yemen donde ejercieron su poder aunque de iure formasen parte del Califato Abasida.

Por su posición estratégica como puerta del Mar Rojo y zona de paso en los viajes por el Índico, el territorio de Yemen sufrió conquistas de los diferentes imperios como el Ayyubi de Egipto, el imperio colonial portugués, el Califato Otomano a partir del siglo XVI o la tribu de los Saud mas adelante. Pero durante esos 12 siglos las diferentes tribu zaydis consiguieron ejercer el poder efectivo en Yemen ya sea por haberse librado del ejército ocupante o simplemente porque tras la conquista de ese territorio el control de estos sobre Yemen era solo nominal y el poder efectivo lo ejercían los jeques de las tribus locales.

La división del Yemen en dos partes diferenciadas vigentes durante la existencia de Yemen y Yemen del Sur se debe tanto a motivos históricos como religiosos. Dicha división ha rebrotado en la actualidad, dentro del marco de las Primaveras Árabes, tras el triunfo de la rebelión Houthi y el avance de sus milicias hasta tomar Sanaa y la capital del sur (Aden).

A mediados del siglo XIX Yemen formaba parte nominalmente del Califato Otomano aunque el poder efectivo sobre la zona se ejercía desde Egipto y es en esta época en la que el imperio británico se hace con el enclave de Aden para transformarlo en una colonia que con el devenir de los años firmará acuerdos con las tribus que pueblan la costa del Índico formando dos protectorados sobre la zona (uno oriental y otro occidental). Curiosamente todas las tribus que se desgajaron de Yemen para formar parte de la colonia de Aden y los Protectorados era musulmanes suníes de la escuela doctrinal Shafi, mientras que las tribus que seguían sometidas al Califato Otomano eran seguidoras del chiismo zaydi.

A finales del siglo XIX el descontento por el sometimiento de los zaydis del norte de Yemen al Imperio Otomano ejercido por el Bajá de Egipto dio lugar a una sublevación que acabó por restaurar al Imam Zaydi que con el tiempo y más protestas devino en la obtención de autonomía dentro del Califato Otomano. yemene tras indepedencia

Tras la I Guerra Mundial el norte Yemen accede a su independencia bajo la forma de reino regido por un imán zaidi y ya desde el primer momento, éste no reconoce los acuerdos fronterizos firmados por el Reino Unido y el imperio Otomano primero y el reino de Nejd y del Hiyaz (Arabia Saudí) después. Esto hace que se lance durante la década de los 20 a una guerra contra Reino Unido y Arabia para crear el Gran Yemen que incluyese Aden, los protectorados y la zona sudoeste de Arabia (Assir). El resultado de ambas luchas fue infructuoso ya que tras varios años de guerra contra Arabia el Imam renunció oficialmente a reclamar Assir fijando definitivamente la frontera con Arabia Saudí a mediados de los 30. Por otro lado los yemenitas consiguieron llegar hasta las puertas de Aden pero una contraofensiva británica los hizo retroceder y tras unas negociaciones el Imam reconoció en 1934 la soberanía británica sobre el sur de Yemen por otros 40 años.

Tras un periodo de relativa paz, los años 60 fueron convulsos en todo Yemen. En el Norte empezó una guerra civil a principios de la década con el fin de acabar con el imamato finalizando cuando los republicanos, apoyados por Egipto, derrotaron a los monárquicos, apoyados por Arabia y Jordania proclamando la Republica de Yemen. El Sur se vio convulsionado por la lucha de liberación anticolonial y la consiguiente marcha de los británicos de Aden, donde se acabó proclamando la Republica Popular Democrática de Yemen, de inspiración socialista y apoyada por la URSS.

yemen sur

La coexistencia entre Norte y Sur generalmente fue pacifica salvo pequeñas tiranteces fronterizas y siempre se buscó la vía de unificar ambos países, cosa que finalmente acabo pasando en 1990. Esta unión fue consecuencia de una guerra civil en Yemen del Sur unos años antes tras transformarse en un conflicto sangriento de dos semanas de duración en una soterrada pugna por el poder entre dos facciones del Partido Socialista que incluía una lucha ideológica entre ortodoxia y pragmatismo a la hora de aplicar el socialismo aderezada con una lucha tribal.

Esta guerra civil en la Republica Popular Democrática de Yemen provocó la muerte de varios miles de personas, la marcha de los cuadros más eficientes del partido (al militar en el bando perdedor) y que la URSS redujese considerablemente la ayuda que donaba a ese país en el periodo 1986-1989. En estas condiciones el Presidente de Yemen del Sur negoció con Saleh, a la sazón presidente de la Republica de Yemen una unificación de ambos países que tuvo lugar en 1990.

A pesar de la reunificación no llegó la paz a Yemen ya que cuatro años más tarde, el que fue presidente de Yemen del Sur se desdijo de la reunificación alegando marginación por parte del Norte, volviendo a proclamar la independencia. Tras varios meses de luchas entre independentistas del Sur con tropas del ejército de Yemen comandadas por Saleh con la ayuda de yihadistas y los salafistas de Al Islah se revertió la situación, y tras la toma de Aden volvió a unificarse el país.

Con el surgimiento de Al Qaeda, grupos de ideología similar se han ido haciendo fuertes en el sudeste del país bajo la pasividad del presidente Saleh (de confesión zaidi pero que se ha mantenido varias décadas en el poder gracias al apoyo tribal y de partidos salafistas sunís como Al Islah). La situación varió un poco tras el hundimiento del USS Cole a manos de Al Qaeda en Yemen en el que se tomaron represalias, pero sólo empezó a preocupar seriamente tanto a Yemen como a EEUU tras la fusión de las ramas yemeni y saudí de Al Qaeda en Al Qaeda en la Península Arábiga (AQPA) en 2009. Tanto es así que poco más tarde Saleh autorizó a EEUU a realizar bombardeos selectivos mediante drones a bases del AQPA, campaña que sigue vigente en la actualidad y que ha causado bastantes bajas en la cúpula de AQPA incluyendo a uno de sus líderes, el estadounidense Al Awlaki.

La Juventud Creyente  (Houthis)

Mientras en el sudeste de Yemen se hacían fuertes yihadistas retornados de Afganistán encuadrados en Al Qaeda y organizaciones afines, en la década de los 90 en el Norte surgió un movimiento destinado a revitalizar el zaidismo (rama moderada del chiismo) y levantar el orgullo de sus fieles. Esta corriente estaba arrinconada en cuatro provincias al norte de Yemen y otras tantas provincias del sur de Arabia Saudí, que sufrían la marginación y la violencia tanto del gobierno Wahabí de Arabia Saudí como del gobierno yemenita encabezado desde hacía décadas por el zaidi Abdullah Saleh.

Yemen_Ethno_Religious_sm

Esta organización se dio en llamar Shabaab al Munimin (Juventud creyente) e inmediatamente sus seguidores fueron conocidos como Houthis por el apellido de su fundador, Hussein Bad Ed Din al-Houthi, antiguo militante del partido monárquico conservador Al Haqq. La influencia de este grupo se hacía notar mayoritariamente en la provincia de Saada y se hubiese quedado circunscrita a esta provincia y las provincias aledañas si no fuera porque el presidente Saleh consideró en 2004 que los movimientos político-religiosos ponían en peligro a la República Yemeni y mandó detener a sus líderes tanto sunís como chiitas.

Hussein Badr Ed Din al Houthi negó que su movimiento quisiese poner en peligro el sistema republicano, negándose a entregarse junto a un grupo de seguidores, por ello Saleh envió al ejército a los bastiones houthis de la provincia de Saada comenzando una lucha a gran escala que terminó con la vida de 500 personas incluyendo la del líder houthi. Una vez acabada la operación militar, Saleh desató la represión contra los houthis (ahora comandados por Abdul Malik, hermano de Hussein Badr Ed Din) que incluyó centenares de detenciones.

La violencia rebrotó en 2005,contabilizándose 1500 muertos en varios meses de lucha y la dinámica de alzamiento, lucha con miles de muertos y represión estatal posterior se repitió cuatro veces más en el periodo de 2006 a 2009 ampliándose a las provincias limítrofes a la de Saada e incluso a localidades próximas a la capital yemeni. Pero es a partir de 2009 cuando la lucha se amplía a territorios fuera de los tradicionales bastiones houthis ya que esta organización había ganado carisma por su lucha contra el Estado, su antiamericanismo y por intentar acabar con el espíritu clanico y las rivalidades tribales yemenitas que tanto azuzaba Saleh para mantenerse en el poder, a base de crear un imaginario colectivo nuevo en el que integrarse estas tribus.

El crecimiento en esta fecha es tan rápido que incluso se unen al movimiento houthi tribus no zaydis, tribus que apoyaban al gobierno y que aun así sufrieron la represión estatal y tribus zaydis del sur de Arabia Saudí. Además los líderes houthis demostraron ser grandes mediadores en conflictos entre tribus, por lo que la violencia tribal descendió notablemente y los houthis alcanzaron gran prestigio en el norte de Yemen. Alarmado por ese crecimiento, Arabia Saudí lanzó un ataque a finales de 2009 contra los houthis seguido de otro ataque del ejército yemenita. Ante esta situación, los houthis se mostraron como defensores de la soberanía nacional en contra de la agresión saudí y del traidor Saleh. El conflicto duró bastantes meses ya que aunque se negoció altos el fuego éstos no fructificaban por la negativa de Saleh de liberar a los combatientes houthis presos.

La paz llegó a Yemen a finales de 2010 para ver cómo en 2011 comenzaba una primavera árabe que tenía la intención de mejorar las condiciones de vida de los yemenitas y expulsar del poder a Abdullah Saleh que venía ocupándolo desde 1978.

Primavera Árabe

En consonancia con los movimientos que se estaban dando en todo Oriente Medio, en Yemen estalló la Primavera Árabe a finales de mayo de 2011 y a ella se sumaron independentistas del sur, estudiantes, houthis y una alianza de tribus opuestas a los manejos de Saleh en el poder exigiéndole que abandonase la presidencia y que en el plazo más corto posible convocase elecciones. Pese a las múltiples dimisiones de gente de su entorno y de presiones del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), Saleh se mantuvo en sus trece y los episodios de violencia comenzaron a repetirse por territorio yemeni y a finales de marzo Saleh había perdido el control de 6 de las 18 provincias del país.

En el mes de mayo, tras muchos amagos de Saleh de aceptar la propuesta de la oposición y el CCG de renunciar al cargo de presidente, una de las confederaciones tribales más potentes le retiró su apoyo y comenzaron los enfrentamientos con armamento pesado durante todo el mes. El 3 de junio, tras un bombardeo al Palacio Presidencial, Saleh fue herido de gravedad y tuvo que marchar a Arabia Saudí para recibir tratamiento médico sucendiéndole de forma interina su vicepresidente Abd al Rab Mansur al Hadi que mantuvo el conflicto hasta el retorno de Saleh a finales de septiembre.

yemen 2011

Al finales de noviembre, Saleh cedió a las presiones de la Oposición y el del CCG y aceptó la propuesta de estos últimos por la cual Saleh cedía el poder a Al Hadi para que convocase elecciones (que ganó con un 99,8% de los votos y una participación del 65%) a cambio de aprobar una ley de inmunidad para Saleh y sus leales.
Los houthis e independentistas del sur se negaron a aceptar el acuerdo capitalizando la Oposición el reparto de poder entre próximos a Saleh, salafistas y grupos tribales, y ampliándose así su influencia a territorios previamente no houthis y gobernando como si fuesen un Estado dentro del Estado yemení.

Mientras las promesas de Al Hadi para alzarse con la presidencia en 2012 de reformar el país, la Constitución y el sistema político iban naufragando durante 2012 y 2013 ante la desesperación de los partidos de la Oposición que aceptaron el acuerdo propuesto por el CCG, en el Norte los conflictos entre houthis y salafistas comenzaron a ser cada vez más frecuentes en lo que parecía una instrumentalización de estos últimos en una lucha soterrada para enfrentarse a los houthis.

Una vez aplastados los salafistas en las provincias zaydis de Yemen y su evacuación a zonas de mayoría suní, los houthis se vieron con la fuerza suficiente como para reclamar al gobierno de Al Hadi que aprobase medidas que pusiesen fin a las causas que motivaron su alzamiento en 2004 (fin de la marginación económica, libertad para practicar el zaydismo y una autonomía para gestionar las provincias de mayoría zaydi). Ante la negativa de Al Hadi de aceptar las propuestas de los houthis, estos tomaron Sanaa y los centros de poder estatales (ante la sospechosa inhibición de elementos del ejército próximos a Abdullah Saleh y su partido, el Congreso General del Pueblo) y lograron de Al Hadi un gobierno de Unidad Nacional.

Pese al Gobierno de Unidad Nacional, Al Hadi persistió en su inoperancia para resolver los problemas que acuciaban a Yemen y para llevar adelante las reformas que necesitaba el país, por lo que a inicios de 2015 militantes houthis, secundados por miembros del Congreso General del Pueblo y militares leales a Saleh, tomaron los centros de poder en Sanaa y exigieron la destitución de Al Hadi al Parlamento, pero previo al debate de su destitución, houthis y leales a Saleh disolvieron el Parlamento y procedieron a la creación de un Consejo Revolucionario que incluyese a la mayor cantidad de fuerzas políticas y sociales yemenitas para que asumieran los poderes ejecutivo y legislativo hasta la convocatoria de elecciones.

Organismos internacionales y diversas provincias se negaron a aceptar la asunción del poder por un Consejo capitalizado por houthis y fieles a Saleh, por lo que reclamaron a Al Hadi que marchase a Aden y desde allí se proclamase presidente legítimo de Yemen y a esa ciudad como capital transitoria del país. Ante la tesitura de una división del país y/ o una guerra civil, houthis y militares próximos a Saleh avanzaron sobre la capital del sur tomándola el 22 de marzo.

Tres días más tarde de la toma de Aden por parte de houthis y próximos a Saleh, a instancias de Arabia Saudí se formó una coalición de naciones con el objetivo de desalojar por la fuerza a houthis y leales a Saleh del poder en Sanaa y devolvérselo a Al Hadi, e inmediatamente se lanzaron a bombardear posiciones estratégicas en territorio yemeni en una fase previa a lo que puede ser una invasión terrestre.

Contexto internacional

A nadie se le escapa que el conflicto que azota Yemen y la inestabilidad que sufre desde hace décadas no es un hecho aislado. Yemen se desangra desde hace décadas debido a su ubicación geográfica lo que en la práctica le convierte en el patio trasero de Arabia Saudí. Debido a eso Riad hará todo lo posible para tener un peón suyo dirigiendo la zona obviando antiguas fidelidades e incluso la confesión religiosa de éste. Esto ha quedado perfectamente demostrado en el apoyo que dio al Imam (zaydi) que reinaba Yemen en su lucha contra los republicanos apoyados por Egipto en la guerra civil, o como posteriormente desde Riad se acabó apoyando en el zaydi y republicano Ali Abdullah Saleh mientras fue presidente de Yemen para asegurarse el control del puerto de Aden y de Bab al Mandeb como salida al Índico para exportar el petróleo saudí. Esto es sumamente estratégico para Arabia porque la salida por Ormuz siempre ha dependido de la voluntad de su némesis regional, Irán. Como ya expliqué anteriormente, cuando las protestas de la primavera árabe amortizaron a Saleh, fue Arabia a través del CCG la que forzó su marcha del poder para ser sustituido por el suní Al Hadi para que en una operación cosmética intentase disolver la oposición interna de houthis, independentistas del sur y tribus.

Pero el poder de Arabia Saudí como potencia no podía ser eterno y en las últimas décadas han aparecido agentes que le disputan la preeminencia en diversos ámbitos, así por un lado tanto Turquía como Qatar le disputan el influjo ideológico a base de subvencionar a los Hermanos Musulmanes en contraposición al proselitismo wahabí saudí, por otro lado el resurgimiento del salafismo yihadismo tras la guerra de Afganistán han potenciado la figura de Bin Laden primero como líder de Al Qaeda y Abu Bakr al Baghdadi después como referencia para los seguidores del islamismo suní más extremista en detrimento de los Saud como guía a seguir. Por último y no menos importante, es Irán el que le disputa a Arabia el estatus de potencia regional en Oriente Medio, lo que ha dado lugar al surgimiento a una guerra total en la zona luchada a través de fuerzas regulares e irregulares en diferentes frentes.

Si bien al comienzo la sublevación houthi no suponía mucha preocupación tanto para el gobierno de Yemen como para los de Arabia o los de EEUU más centrados en limitar el avance de AQPA y circunscribirlo al territorio despoblado del este del país alejado de las vías de exportación del petróleo saudí, con el tiempo Arabia Saudí vio el potencial de la milicia houthi y que ésta pudiese hacerse con puntos estratégicos de Yemen vitales para el transporte del petróleo saboteando su mayor fuente de ingresos, lo que podría favorecer a su enemigo regional con el que además compartían fe religiosa.

religion oriente medio
Pese a que nunca se encontraron vínculos claros entre Irán y los houthis, Arabia empezó a sospechar de una estrategia iraní para cercar Arabia por tres flancos mediante gobiernos, organizaciones políticas y político-militares afines y se lanzó a una ofensiva a escala internacional basada en apoyar ilimitadamente a los rebeldes sirios. Dicha política ha tenido como efecto secundario la división de Hamas entre los que eran partidarios de recibir ayuda económica y militar de Teherán o de Riad que ha provocado una política errática de Hamas y fugas de su ala más radical. El apoyo a la tiranía de Bahréin a aplastar las protestas de la mayoría chiita mandado tropas para reprimir a los manifestantes, regar Líbano e Iraq de dinero para comprar voluntades en el ejército, gobierno y partidos políticos a fin de buscar la confrontación directa entre sunís y chiitas ha desembocando en un crecimiento exponencial de grupos armados extremistas sunís y conflictos sectarios y atentados terroristas.

En Yemen, Arabia Saudí pronto acudió con su ejército a socorrer a Saleh para frenar la expansión del movimiento houthi que ya amenazaba con afectar a las provincias saudís de mayoría zaydi y cuando la situación de Saleh era insostenible debido a la violencia generada por la Primavera Árabe Yemení rápidamente encontró recambio en la jefatura del Estado en la figura del vicepresidente Al Hadi (de confesión suní). Los manejos saudíes en Yemen cada vez eran más ostensibles a la vez que aumentaba la afluencia de dinero, armas y voluntarios a los houthis lo que les permitió tomar la capital yemeni con la anuencia del antiguo peón saudí, Abdullah Saleh, molesto por cómo había sido desechado desde Riad.

Si bien la situación en Yemen se podía haber reconducido mediante la aceptación de demandas houthis tales como la federalización del país, el enrocamiento de Al Hadi sabedor de que contaba con el beneplácito saudí y una cadena de atentados contra lideres houthis rematado con una masacre por atentados en mezquitas en viernes de oración reivindicados por un ISIS que no tiene infraestructuras ni hombres en Yemen, llevaron tanto a houthis como a seguidores de Saleh a avanzar a Aden para capturar a un Al Hadi que había huido a esa ciudad para mantener una ficción de gobierno legitimo apoyado por las naciones árabes sunís.

La coincidencia temporal de la toma de Aden con las rondas finales de negociación del acuerdo nuclear entre Occidente e Irán al que se oponen tanto Israel como los países árabes sunís encabezados por Arabia, han provocado que éstos hayan pasado directamente a una invasión militar en vez de proceder a la típica escalada diplomática de sanciones, con el fin de provocar una respuesta iraní en defensa de los houthis que hiciese descarrilar el acuerdo 5+1 sobre energía nuclear.

Conclusión

Diferentes países árabes se han enfrascado en una guerra con un enemigo que supuestamente es más débil que ellos pero que lleva años de experiencia en combate (tanto los houthis como los militares pro Saleh), conocen el terreno y tienen el apoyo de la mitad de los 24 millones de habitantes del país.

La premura con la que los países árabes sunís han formado una coalición militar, el apoyo de Israel, y el espacio temporal en el que se ha dado el ataque militar hace suponer que los implicados han intentado provocar una respuesta militar de Irán, aliado de los houthis por motivos religiosos (junto a Hizbullah) y del que se supone recibe apoyo militar que sirva de excusa para aplazar sine die o anular los acuerdos sobre energía nuclear que EEUU e Irán firmaran en fechas próximas, acuerdo del que se sospecha que tiene clausulas secretas que reconocerían a Irán como potencia regional en detrimento de la primacía de Israel como de Arabia Saudí.

Dicha premura en entablar batalla ha podido redundar en una falta de análisis de las consecuencias que podría tener un estancamiento de la ofensiva y por consiguiente una larga guerra para restaurar a Al Hadi, ya que si este conflicto se alarga solo tendrá como beneficiarios a houthis y gente pro Saleh por un lado como representantes de la defensa de la soberanía nacional frente a una coalición de países apoyados por EEUU e Israel, y por otro beneficiar a los integristas islámicos de AQPA e ISIS que se pueden beneficiar del caos para expandirse por Yemen e incluso debilitar sobre el terreno a ejércitos con los que se enfrenta directamente sus respectivos países, siendo Egipto un caso paradigmático ya que tiene muchos frentes abiertos y un envío de tropas tan lejos de su fronteras podría poner en peligro incluso su propia seguridad nacional.

Enlaces

Historia de Yemen

http://www.studylands.com/es/guia-paises/YE-history.htm

http://www.lonelyplanet.es/destino-asia-yemen-103-historia.html

http://www.ikuska.com/asia/datos/historia/yemen.htm

https://directa.cat/eternes-paradoxes-iemenites

Houthis

http://www.globalsecurity.org/military/world/para/shabab-al-moumineen.htm

http://english.al-akhbar.com/node/913
Primavera Árabe

http://english.alarabiya.net/en/views/news/middle-east/2014/09/30/The-Houthis-and-a-history-of-conflict-in-Yemen.html

Yemen

http://www.elmundo.es/internacional/2014/05/19/537a5314e2704e6e148b457f.html
Contexto internacional

http://www.cnnmexico.com/mundo/2015/03/26/que-busca-arabia-saudita-con-los-bombardeos-a-yemen

http://www.hispantv.com/newsdetail/OPINIoN/23087/Detras-de-la-agresion-saudi-a-Yemen
http://www.dw.de/gran-ir%C3%A1n-peque%C3%B1o-yemen/a-18346506

Osasuna, crónica de un forofo

Gol de Aloisi final de la Copa del Rey (Diario de Navarra)Nunca olvidaré la primera vez que fui al Sadar. Tenía nueve años y me llevaron mis tíos Eugenio y Paco, a los cuales agradezco que me enseñaran todo aquello, y que me llevaran al fútbol por primera vez. Guardo como un tesoro el recuerdo cuando fui ascendiendo por las escaleras de Preferente y cómo el manto verde se agrandaba a mis pies a la par que el ruido de todo el estadio me dejaba helado. Una mezcla de ilusión, y sorpresa se conjuntaron inoculando un virus que por mucha vacuna de racionalidad que he intentado meterme con los años siempre estará ahí.

Perdimos, claro, no todo iba a ser perfecto. El Valencia nos metió un 0-1 y mis tíos, ante mi cara de decepción me dijeron: «es que esto es Osasuna». A partir de ahí me enganché al fútbol en general y los rojos en particular, y vivía las derrotas y victorias como algo sin comparación. Osasunismo creo que lo llaman. No lo sé, lo único que puedo decir es que este Club me llenaba, y que a pesar de nunca tener un duro y no meter un gol al Arco Iris la garra y pundonor nos salvaban. La rasmia, ese concepto tan navarro, era el santo y seña y bajo éste se cimentó mi afición futbolera. Nunca grité tan alto como con el gol de Aloisi en aquella infausta tarde en el Calderón, y nunca disfruté/sufrí tanto con aquel gol del divino Trzeciak al Recre. Sentimientos encontrados ante las pocas alegrías que nos han dado pero que cuando han llegado han tapado todos los sin sabores deportivos.

Hoy me han arrancado esa parte de cuajo. Dos presidentes y parte de sus juntas directivas, junto con el gerente desde hace 24 años están detenidos por amañar partidos, y saqueos varios. ¿Amañar partidos? ¿Osasuna? ¿Todo era mentira entonces? Me pinchan ahora y no me sale la sangre, porque una cosa es tener la sospecha, y otra verlo en directo con toda su podredumbre al aire.

Desde hace ya un tiempo el fútbol me estaba desencantando por estas sospechas, y por todos esos chanchullos de los clubes con las deudas a Hacienda, y casi me obligaba a no ver resúmenes ni nada de eso. No obstante siempre echaba un ojo a ver qué hacían los míos, cosas del virus que comentaba antes. Pero lo de hoy creo que marca un antes y un después. Un crudo despertar para muchos que tenían/teníamos una venda en los ojos. Podemos echar la culpa a otros, o podemos decir que la liga está podrida, que lo está, y que otros lo hacen, y no dejarán de tener razón. Pero que Osasuna sea el chivo expiatorio de todo este asunto no quita un ápice de culpa a lo hecho. Y para mi no sirve excusa.

No llevaré a mi hija al Sadar después de esto. No puedo decirle que lo que está viendo es mentira, que es como el pressing catch y que no juegan de verdad. Esto es lo que habéis conseguido todos los que con vuestras acciones y omisiones habéis llevado a un Club como éste al abismo. Para todos vosotros, mi desprecio más absoluto.

José Antonio Beloqui

Reflexión acerca del Manifiesto Foral

Fuero JMUn mail llega a la bandeja de entrada: tengo un MD en twitter. Entro a twitter mientras me preparo un café mañanero. Asoma un “1” en el buzón. Es un mensaje escueto (140 caracteres no da para mucho) que dice así: “Estamos preparando un Manifiesto en defensa del Fuero. ¿Te apuntas?”

No necesitaba mucho más: Montoro, el PP madrileño, el Tribunal Constitucional, UPyD… estaban criticando, incluso atacando, el sistema Foral que durante tantos años ha caracterizado a Navarra. Días y días escuchando y leyendo barbaridades sobre lo que estimaban que es el Fuero demostraban un preocupante desconocimiento de qué es y en qué consiste. Días protestando en las redes sociales de la actitud de quienes lo acusan de injusto, de privilegio, de tantas y tantas cosas tan falsas como retorcidas intencionadamente y por fin alguien me decía que un grupo de personas se estaban moviendo para emitir un Manifiesto en el cual se defendería nuestro sistema Foral de dichos ataques, ataques que si bien podían ser verbales (caso del PP madrileño o UPyD) ya comenzaban a arreciar por parte del propio Tribunal Constitucional (sentencia del 26/06/2014 dice “…el sistema tributario que establezca la Comunidad Foral de Navarra deberá ser reflejo del estatal…” donde se anula todo rastro de autogobierno y de pacto entre las partes del que está regala la LORAFNA y el Fuero Navarro; o la sentencia de 26/04/2014 que dice que “no constituye un título competencial autónomo del que puedan deducirse especiales competencias…y que dee entenderse e interpretarse conjuntamente con el artículo 133 CE” donde degrada la Disposición primera de la propia Constitución y devalúa el Convenio Económico pactado entre Estado y Navarra, en la que el Tribunal Constitucional sentencia contra la propia Constitución que ha de defender)

Durante los días que fueron desde que recibí el MD hasta que por fin vio la luz el Manifiesto pensaba que por fin l@s navarr@s íbamos a tener algo en común que defender, algo que nos hiciera ver más allá de posicionamientos políticos, de siglas interesadas, de manifestaciones cargadas de despropósitos, de una lucha constante entre partidos. Algo que iba a hacer que todos tuviéramos un punto común que defender, que situara nuestra condición de navarr@s por encima de intereses personales y partidistas. Por fin íbamos a ir todos a una en defensa de algo que nos une a todos.

En momentos puntuales soñaba con una forma de Gamazada del siglo XXI, en la cual ni Yolanda Barcina iba a hablar como UPN, ni Bakartxo Ruiz como E.H.Bildu, ni José Miguel Nuin como I-E…ningún representante político iba a hablar desde sus siglas, sino como ciudadanos de Navarra. Era el momento, Navarra necesitaba de una unión como hacía más de un siglo que no se veía en nuestra Comunidad Foral.

Pasaron los días y por fin el Manifiesto Foral vio la luz. Era un folio. Nada más. No había florituras, ni posicionamientos políticos, no había intereses partidistas: tan sólo había Navarra. Había tardado pero los redactores del Manifiesto (José Antonio Beloqui, Eneko Abal y Carlos Aitor Yuste) lo habían conseguido.

Entusiasmado, vi como aparecía en la red. Y no sólo iba a aparecer en la red sino que también iban a salir a la calle para informar sobre qué decía el Manifiesto y recoger firmas. Lo mismo íbamos a pedir a familiares y amigos: firmas. Twitter se levantaría en apoyo del Manifiesto Foral.

Pero a medida que pasaban los días en vez de recibir apoyos masivos se recibieron apoyos y críticas feroces bajo unas mismas excusas:  “es un Manifiesto nacionalista”, “José Antonio Beloqui es del PNV”, “lo firma Pernando Barrena”. Esos eran los motivos que esgrimen aquellas personas contrarias al Manifiesto, críticas a personas que lo firman y apoyan pero no al propio texto del cual nunca han dicho nada ni de forma positiva ni negativa, ni diciendo qué modificarían para apoyarlo ni qué párrafo o frase les parece mal. Nada.

En ese mismo momento comenzaba una cruzada difícil pero necesaria: había que demostrar que todo lo anterior no era cierto. El Manifiesto no lo había creado ningún partido, no lo firmaba ningún partido, las firmas eran de navarr@s que defienden al nacionalismo y también defensores a ultranza de una Navarra no nacionalista que no quieren una anexión al País Vasco, gente perteneciente a partidos políticos y votantes de todas las fuerzas del arco parlamentario. No se veía ningún tipo de intencionalidad política más allá de la defensa de los Fueros. Los creadores lo tenían tan claro como lo tienen ahora: es un Manifiesto al que adherirse pero del que ningún partido se iba a apropiar.

A medida que pasaba el tiempo han sido ayuntamientos los que se han adherido, ayuntamientos en donde todos los partidos han sabido ver más allá de las siglas a las que representan. Poco a poco ha ido obteniendo el reconocimiento de Manifiesto que nos une a tod@s y como tal lo han apoyado en sus plenos. No se han parado a ver firmantes, sino el contenido del mismo. Lo realmente importante y por lo que el Manifiesto vio la luz.

Obviamente no comparto la ideología de las siglas de alguno de los firmantes. Pero esta vez no hay siglas, sino apoyos de ciudadanos. Ciudadanos que luego pertenecerán a uno u otro partido. Solo que esta vez no existen grupos políticos: tan solo ciudadanos firmantes que aspiran a defender el Fuero. Y como tal yo soy uno de esos firmantes.

@Jose_Miguel_78