Toneladas de espejismo

Así está el panorama, vuelven los fantasmas de la crisis. Cuando saquen la cuenta volverá a salir, por patas, el burgués. La culpa del atasco será, por supuesto, de los ‘ninis’. En nuestras manos está decidir quién paga esta vez.

Ahora que ha aumentado el número de ricos, y tenemos más precarios que ‘youtubers’. El taxi es atacado por los de los micros, mientras Facebook vende tus datos a Uber. Derechos conquistados con valor y sangre, ahora se cuestionan y ponen en duda. La lucha de tantos héroes danza en el alambre. No dejemos que se quede, nuestra clase, viuda.

Y cierran bibliotecas y cierra el viejo cine. Y abren casas de apuestas en los barrios pobres. Volvemos a tener quien nos señale y nos arruine. Ahora tienen cuotas las minas de cobre.

Y mientras Pablo Motos blanquea a Abascal, Susanna Griso hace campaña por Rivera. Errejón ya se hace ‘selfies’ con la patronal. Ferreras, el retratito de Sánchez en la cartera. Todos son vértices del mismo prisma. Analiza y piensa que tienen el mismo amo. Los Botín ya son los reyes de la pista, están detrás de las tertulias que tragamos.

Después vendrá el nostálgico a ensalzar la transición. No todos son iguales y lo sabes. Algunos cambiaron la pana por el visón. Compara el historial de Anguita y el de Felipe González. Siguen montando plataformas antipueblo, edulcorante para animar la partida. Te dicen que no pienses, que ya lo hacen ellos. Te darán el sobre de la historia repetida. Se irá por el retrete la OPA hostil de Más País, andamiaje carcomido con aroma progre. Nos dicen que hay que ceder, que la vida es así. Los nuevos apuntalando el viejo orden.

Y si te dicen que es mentira y no estamos en guerra, diles que ya no son ellos los que escriben el cuento. Lo estaremos mientras ardan los pulmones de la tierra. Vamos perdiendo y el partido ya está en el descuento.

Y el tiempo pasa y no vuelve, y, a veces, duele pensarlo. Porque si Adur y Jokin, hoy, no duermen en casa, quizá no estemos a salvo.

A propósito

A propósito de las elecciones municipales y autonómicas que acabamos de padecer, un momento de digestión reflexiva se hace inevitable, más aún ahora que se avecinan retorcijones.

En muchos ayuntamientos y en Navarra volvemos a ver a la derecha brindando en copa de cristal Baccarat y con sonrisa indisimulada. Tras 4 años de gobierno del cambio y con el único mérito de repetir consignas caducas y ondear banderas de colorines, vuelven a la carga más unidos que nunca.

La propaganda mediática que manipula a papo desvergonzado ha funcionado a las mil maravillas. Es lo que tiene tener al periódico más vendido de la Comunidad servil a la causa. Y como no lo veían claro del todo decidieron juntarse como si fueran amigos de toda la vida. La derecha megalómana foralista (UPN), los ultraliberales provocadores antiforalistas (Ciudadanos) y el partido más corrupto de Europa (PP) en la misma batidora. Con el único punto en el programa «Que vienen los vascos y los bolivarianos» han vuelto a asaltar el poder.

Hoy tenemos una sociedad más justa, con menos desigualdad, con unos servicios públicos potenciados, unas pensiones más dignas, menos deuda y sin que nadie nos haya invadido. Seguro que se podría haber hecho mejor y que han quedado avances pendientes en el tintero. El problema es que, ahora, nos van a dejar sin tinta y sin papel.

Solo tengo claro que los trabajadores y pensionistas hemos perdido por difuminar el horizonte común y repetir sus exabruptos. Ellos, los que más tienen y menos van a tributar, han ganado. Han ganado porque ellos sí tienen conciencia de clase.

Amigo Pedro

Es martes y…

No sé por qué graniza en los albores del verano más caliente, no sé por qué supuran mares de los ojos a mi alrededor. No sé por qué se encoge el vuelo de estas alas de batida valiente. No sé por qué se me acelera el pulso en este silencio atronador.

No sé por qué ya no corre la tinta como un río desbordante. No sé por qué las rotativas han perdido la letra de tu guión. No sé por qué, la grada, ya no suena con la fuerza rabiosa de antes, con la última parada del ascenso y el gol de la salvación.

Quizá sea porque no encuentran tu brazo solidario cerca, tu desvelo preocupado o tu cuño de justicia social. Quizá sea porque no escuchan el abrir continuo de tu puerta, tu rugido sosegado o tu mano limpia y servicial.

Quizá sea por el recuerdo que duele y a la vez nos hace sonreír. Quizá sea por tu huella que reside en cada piedra de Aibar. Quizá sea por todo, quizá sea por ti. No sé, Pedro, si tú me puedes contestar.

El renacido

Es martes y…

Al tercer día resucitó de entre los muertos, proclamando triunfalmente su regreso como salvador.

No, ahora en serio, solamente es Pedro Sánchez que vuelve a tomar el mando del PSOE o lo que queda de él. Después de ser apaleado, vilipendiado y apartado por los que se decían compañeros, regresa con un triunfalismo de postal, para la hinchada militante y poco más. Renace de sus cenizas de político mediocre para seguir siendo lo que fue.

Pedro, ese hombre capaz de superar todos los hitos electorales del socialismo español, pero por abajo, y el artífice de un pacto con la nueva derecha ultraliberal para después culpar a la verdadera izquierda de no sumarse, ya está aquí de nuevo. Y lo hace con la firme intención de salvar a la patria de la corrupción y el mangoneo, con el traje de superhéroe puesto y cantando «La Internacional». Con un par.

Sin embargo, su victoria ante Susana y el equipo al completo, conserva una migaja de poesía clásica, de versos de juglar. Y es que, ver a toda la guardia pretoriana con las orejas por el suelo y la lengua atrancada, es pura lírica. Lo apostaron todo por que nada cambiara, por bloquear y blanquear, por callar y abstenerse. Por lo menos, esta vez, no han ganado.

Volverá el ataque de González, de Susana y de Cebrián. Lanzarán la proclama del miedo, de orden constitucional. Volverán con la vieja estrategia del insulto vía editorial. Volverán codo con codo, con sus fieles de la patronal.

A la calle

Es martes y…

Salgamos todos a la calle, para que a nadie más le obliguen a hacerlo.

15 de junio, es el día señalado para seguir acuchillando la espesa niebla de la humanidad. En un lugar de Leganés, una mujer, víctima de la execrable violencia machista y su hijo de 8 años con parálisis cerebral van a ser desahuciados por no poder pagar el alquiler de su vivienda. No cabe más dolor ni más injusticia en un titular.

Esta madre, ejemplo como tantas de lucha silenciosa, ha chocado de bruces contra un sistema al que, a papo lleno, llaman democracia. Su insistencia y valentía para reunir más de 90.000 firmas para solicitar un alquiler social, el apoyo popular y cierta propaganda mediática pueden hacer de esta tropelía un caso de justicia poética. Sin embargo, y por desgracia, es solo un grano más en este silo a rebosar.

Sistema envenenado que asesina por decreto, vidas resumidas en números estadísticos. La bondad avergonzada se ha refugiado en el gueto, lejos del banquero, del cleptómano y del cínico. La empatía se ha perdido en el candado de su caja B, es un bien preciado propio del resto de especies. El que manda dice que todo funciona bien, mientras nos desahucian y secuestran en los CIEs.

Anestesia general, sal de nuestro cuerpo endurecido y no dejes que sonriamos al fuego de su caldera. Anestesia global, sal de nuestro cerebro sumiso y déjanos romper la coraza de su trinchera.

El sitio de mi recreo

Es martes y…

Soy el pulmón que llena de vida este paisaje. Soy el murmullo que ahuyenta al silencio oscuro. Soy la pureza inocente carente de maquillaje. Soy lo que fui, lo que soy, también quiero ser futuro.

Estamos fuera del radio implacable de los rascacielos, de hecho podríamos caber todos en uno de ellos. Somos pocos sí, pero somos. Hemos decidido caminar lejos del humo que enciende cada semáforo y agarrarnos a una tierra que nos llama, que está gritando a un mundo sordo. No tenemos zona azul ni cinco aulas por curso pero creemos en nuestra forma de vida, y vamos a luchar por ella.

La despoblación de las zonas rurales es un hecho innegable que requiere de una reflexión y un análisis muy profundos. No se puede, ni se debe, pretender determinar la elección que cada individuo toma respecto al lugar donde decide vivir, pero sí se puede y se debe reforzar el andamio más vulnerable. Discriminando positivamente si es necesario, por supuesto.

Los colegios rurales están sufriendo la injusticia de un sistema de cuotas envejecido y que urge renovar. No somos números, ni podemos pretender que se administren vidas como porcentajes. Cada niña es un latido para el pueblo, cada niño es otro latido más.

Soy el soplo nuevo en el recreo más feliz. Soy la luz despierta en el rostro primaveral. Soy la tiza digna sin renuncia ni desliz. Soy el eco eterno de nuestra escuela rural.

Emoción de censura

Es martes y…

El grupo parlamentario de Unidos Podemos ha puesto encima de la mesa una posible moción de censura contra Mariano y su gobierno. La idea es que el resto de partidos, en consonancia con sus declaraciones anticorrupción, se junten para dar forma a una alternativa digna. Se trata de poder mirar a los ojos de la gente, nada más.

Tras un reposado análisis y un concienzudo debate interno que debió durar entre 13 y 15 segundos, PSOE y Ciudadanos dejaron claro que su compromiso contra el mangoneo y el atraco es innegable y está fuera de toda duda, por eso, no van a apoyar la moción y van a dejar que el agua corra. Vamos, que ya pueden​ salir Soraya y ‘La Cospe’ con capucha en vez de mantilla que Rivera y los golpistas de Susana no van a mover un dedo, no vaya a ser que les salpique sin querer.

Esperanza entre sollozos, el silencio de Rajoy, el atraco a mano armada. Una nación hecha trozos, el inmovilismo de hoy, su indecencia, su papada. Socialistas de hojalata, extremo centro liberal, la muleta del ratero. Miseria de la que mata, pueblo daño colateral, su impunidad, su dinero. El obrero por las calles, el primero de mayo, la ‘mani’, los sindicatos. La jornada de elecciones, el desastre, el desmayo, la emoción, el arrebato.

Trama saqueadora que nos sigue gobernando. Trama, plaga endémica, que no pagará jamás. Cada nuevo caso es un caso aislado para los Hernando. Cada nuevo caso es, para su saco, un voto más.

Francia sumisa

Es martes y…

Nueva cita electoral en la vieja Europa y nueva derrota de los que esperaban un cambio de rumbo. Esta vez era Francia la que tenía que elegir, y ha elegido. Macron y Le Pen se verán las caras en la segunda vuelta, mientras dan la espalda a una masa anestesiada.

Y no será porque ​no había donde elegir. La debacle de los partidos clásicos y la efervescencia de nuevas alternativas ponían encima de la mesa un abanico de posibilidades entre las que resistía algún gramo de decencia. Sin embargo, el recuento ha sido tajante. Los inventores de la guillotina han pasado por el filo buena parte de su pasado de libertad, igualdad y fraternidad. Queda el lema y poco más.

Ahora, en la segunda vuelta, tendrán que posicionarse a favor del ultraliberalismo antipersonas o el nacionalismo xenófobo. Menudo cuadro les ha quedado. O Guatemala o ‘guatepeor’. Y, sinceramente, no sé quién es quién.

Vuelve a ganar el fantasma, la sombra oscura del poder. De las urnas sale banca o raza blanca, ¡qué pastel! Mientras la alta esfera ríe, la ‘troika’ se despelota. Y el pueblo que, desangrado, ha olvidado lo que vota.

«Ni patrie, ni patron. Ni Le Pen, ni Macron».

Despiertos y combativos

Es martes y…

Alberto Garzón, una de las pocas mentes lúcidas que nos quedan por estos lares de miseria moral, compartió, no hace mucho, la vivencia de un profesor de la Universidad de Salamanca que produce vértigo.

Resulta que, año tras año, el primer día de clase realizaba siempre las mismas preguntas a sus alumnos y, curiosamente, casi siempre obtenía las mismas respuestas. Las cuestiones venían referidas a los peores gobiernos del mundo y el nombre de sus dirigentes. Rápidamente, saltaban a la palestra Cuba, Venezuela, Castro o Maduro. Sin embargo, ninguno de ellos había visitado esos países situados a miles de kilómetros, ni había indagado en exceso sobre los mismos.

Inmediatamente, el profesor les preguntaba por el nombre del presidente portugués, y, a pesar de lindar con Salamanca y de que la mayoría de los alumnos había estado en Portugal, obtenía un silencio por respuesta. Tras una pausa meditada, les lanzaba la siguiente reflexión: «¿Quién está pensando por vosotros?».

No se trata de juzgar las miserias y grandezas de cada nación, no es una cuestión de compartir o rechazar su forma de actuar. Basta, tan solo, con depurar y contrastar la información, que acostumbra a llegar amputada y con ganas de infectar.

Que no te vendan la moto de buenos y malos. Que no te cuenten la historieta del paraíso feliz. Que no te domen a base de zanahoria y palos. Que no te ganen la partida de pensar por ti.

Un paso más

Es martes y…

Debería ser un viaje sin retorno, sin billete que devuelva lo avanzado. Un testigo que no suene a tiro sordo, un entorno sin balas ni camuflados.

Este pasado sábado se escenificó en Baiona la entrega del arsenal que ETA todavía guardaba en su poder, haciendo participe a varios representantes de la sociedad civil que quisieron unirse a un acto de enorme profundidad. Con mucha mayor simbología que relevancia puntual, no es sino un paso más en el eterno camino hacia una paz verdadera, sin apellidos ni dictados.

Nada, absolutamente nada, puede justificar la sangre ajena, el sometimiento agónico o la imposición totalitaria. Y eso, vale para todos. Los años de incertidumbre soterrada, bajo una nube perenne que se resistía a romper, tienen que dar paso a una luz sin remilgos, con memoria y sin espinas. Cada zancadilla, llena de demagogia y oportunismo, es una piedra gigante de irresponsabilidad, que, aún así, no podrá interrumpir un paso firme y decidido.

Es hora de la empatía, de la mano y la mirada. Es la hora del recuerdo, del presente y el mañana. Es la hora de los puentes, de la voz en la batalla. De luchar con la garganta, con ideas, sin metralla.

El resto del viaje está por escribir, teniendo siempre presente que el pueblo que olvida su historia está condenado a repetirla.