EL CAMBIO CLIMÁTICO EN EL G8
La reunión del G8 esta semana en Italia está negociando un compromiso para limitar el calentamiento global por debajo de 2 grados centígrados. Se espera que en L’Aquila se pongan los cimientos de un nuevo marco mundial para reducir las emisiones de los gases invernadero. Barack Obama, ha prometido tomar acciones más contundentes para reducir el calentamiento global que las tomadas por su predecesor, George Bush. Muchos esperan que Washington acepte fijar un límite máximo para el calentamiento global de 2ºC. Los científicos dicen que si el calentamiento global supera los 2 grados centígrados, es muy probable que el sistema climático mundial entre en una espiral fuera de control: con fuertes sequías , inundaciones repentinas y el aumento del nivel del mar que resultarían en mayores niveles de pobreza y desplazamiento forzoso de cientos de millones de personas. Pero Canadá, Japón y Rusia están intentando vetar dicho límite de los 2 grados, por eso es necesaria una inmediata protesta global que contrarreste las posibilidades de veto. De hecho, dichos efectos climáticos ya han comenzado. Pero estamos aún a tiempo de evitarlo. Si todos nosotros nos unimos, juntos podemos demostrarles a los líderes que no permitiremos que den marcha atrás en la lucha contra el cambio climático. Las conversaciones, cuya culminación está prevista en diciembre de este año en Copenhague, podrían significar un cambio histórico hacia las energías renovables y un futuro limpio y mejor para nuestros descendientes. La decisión que tome el G8 esta semana será crucial a la hora de lograr un tratado climático global vinculante, justo en Copenhague. Al intentar bloquear el objetivo de los 2 grados, Canadá, Rusia y Japón están entorpeciendo las negociaciones sobre el clima, haciendo peligrar el tratado y nuestro futuro. Se trata de la última negociación cara a cara de los líderes antes de la Cumbre de Copenhague. Sabemos que la presión ejercida en el último momento puede cambiar sus posturas. Cuantas más personas seamos las que protestemos en los blogs, en los diferentes medios de comunicación, a través de eventos callejeros y reuniones más presión emplearemos contra los líderes poderosos en la Cumbre de Italia .Los primeros ministros Harper de Canadá, Aso de Japón y otros líderes podrían tener que enfrentarse a elecciones en los próximos meses y no se pueden permitir afrontar la vergüenza global en esta cumbre.
Si aprovechamos la ocasión y decidimos este año reconstruir los frágiles ecosistemas que nos protegen, podremos dejar a nuestros nietos como legado un planeta mejor.
El futuro de la humanidad está en nuestras manos.