Con el lema Apadrina para dejar de apadrinar para conseguir fondos y poder seguir avanzando, la Fundación Vicente Ferrer impulsa su tercer cibermaratón hasta el 20 de diciembre para apadrinar niños en la India. El año pasado se consiguió apadrinar 3.000 niños, y gracias a estos apadrinamientos 14.000 personas se vieron beneficiadas durante todo el año. La Fundación lanza de nuevo esta iniciativa con el objetivo de dar a conocer las necesidades de una de las zonas más pobres y necesitadas de la India, Anantapur. Es una ONG comprometida con el proceso de transformación de esta región y de una de las comunidades más excluidas del planeta, los dàlits o intocables (la casta más baja de la India). Actualmente, su trabajo llega a 1.874 pueblos, beneficiando a más de dos millones y medio de personas.
Yo tengo una niña apadrinada, se llama Nagarathna y vive en Bangalore. Ella tiene su propia familia, pero para mí es como una hija, la quiero mucho a pesar de la distancia, de los miles de kilómetros que nos separan. Cada vez que recibo una carta de la India con noticias de ella, de todos sus logros y progresos, no puedo explicar la emoción tan grande que siento en mi interior. Animo a todas las personas que apadrinen niños en este cibermaratón, porque con ello se logra ayudar a miles de personas, a un poblado entero. Cuando apadrinas, tienes la oportunidad de conocer el valor real de tu ayuda a través de la vida del niño y su familia. El apadrinamiento significa ayudar a toda una comunidad, porque la contribución mensual no se destina únicamente al niño, sino a mejorar las condiciones de vida de todo el pueblo. Como padrino conoces al niño mediante fotografías, cartas y dibujos, y recibes información sobre los progresos de tu ahijado, su familia, del poblado donde vive y toda la comunidad. Gracias a esta colaboración, la distancia entre Anantapur y los padrinos desaparece, se unen por una misma ilusión y un mismo compromiso. Gracias a los apadrinamientos en la Fundación se pueden construir escuelas en la India para que los niños reciban una educación adecuada, centros sanitarios y hospitales para tratar personas afectadas por el VIH/sida, asistencia nutricional, construcción de viviendas, talleres profesionales para mujeres (para que logren una independencia económica), pozos de agua potable, proyectos de microcrédito, etcétera.
Lo importante es que cada persona actúe según su conciencia, pero no es justo que en pleno siglo XXI existan países como la India, donde reina la pobreza, la marginación social y una grave discriminación hacia la mujer. Existe demasiado consumismo en nuestra sociedad, el apadrinar un niño es un acto de solidaridad, y creo que si muchas personas lo harían conseguiríamos un mundo mejor para todos, especialmente para nuestros hijos. Apadrina a un niño o haz llegar este mensaje a quien creas que puede hacerlo.Si quieres ayudar a transformar la sociedad en humanidad, colabora, por supuesto que todo esto logra cambiar la vida de miles de personas en la extrema pobreza.
Si quieres contactar con la Fundación Vicente Ferrer, puedes hacerlo llamando al 902 222929 o al 902 370377. Con la ayuda de todos este reto puede ser posible, sólo hace falta voluntad y sensibilización hacia los países y pueblos más pobres del planeta.
Maika Etxarri Yábar