«INFANCIA Y DERECHOS HUMANOS» Maika
«Infancia y Derechos Humanos»
Es difícil creer que alguien pueda deliberadamente torturar o hacer daño a un niño. Sin embargo, en todo el mundo los niños están sujetos a violencia y abuso. A veces se les tortura y asesina simplemente porque se han visto atrapados en una guerra o en un conflicto. A menudo se les utiliza como soldados o como mercancía sexual.
Los menores tienen unos derechos formulados en la ONU que han sido ratificados por todos los estados del mundo excepto Somalia y Estados Unidos.
Pese a esto, millones de niños son víctimas de violaciones de sus Derechos: más de 1 millón de niños se encuentran en centros de detención. En algunos países (Pakistán, Yemen, Arabia Saudí, Irán, Nigeria, Sudán, Filipinas, China,Congo) todavía se aplica la pena de muerte a los menores de edad. Todos los años millones de niños son víctimas del tráfico de seres humanos para su explotación laboral o sexual, miles de niños son secuestrados en el mundo o asesinados para trasplantes de órganos (en Honduras, Guatemala y Brasil). También son reclutados por grupos armados y fuerzas gubernamentales como niños soldados.
Cada año alrededor de 2 millones de niñas corren el riesgo de sufrir mutilación genital en diferentes países.
En general existe una gran diferencia de vida entre el Norte y el Sur. Mientras en Occidente los niños llevan vidas acomodadas donde no les falta de nada, tienen su playstation, TV, ordenador y sus propios móviles, por supuesto, también existen familias que sufren por no llegar a final de mes y necesitan ayudas económicas.
En el Sur los niños sufren enfermedades por falta de vacunas y de asistencia sanitaria, los abandonan o quedan huérfanos, pasan hambre, sed y muchos enferman de SIDA, ya que sus padres les han transmitido la enfermedad. La diferencia está en que estos niños del Tercer Mundo enferman y mueren por desnutrición severa o enfermedades erradicadas en Occidente como la malaria. No reciben ningún tipo de medicación, ni tienen acceso a una adecuada alimentación o educación.
Mientras los niños de los países del Norte son vacunados contra las principales enfermedades infantiles, pueden recibir tratamiento médico, tienen una familia que les ofrece de todo (pero se están criando en un mundo consumista y donde prima más lo material que los valores éticos), acuden a colegios donde reciben una enseñanza, no les falta ropa de abrigo, ni alimentos, ni juguetes.
Los niños del Tercer Mundo están sufriendo penalidades, sus rostros están envejecidos por las huellas del dolor o del sufrimiento ya que viven en unas condiciones de vida extremas (frío intenso, calor, hambre, sed, dolor…).
Pero en Occidente, a pesar de que los niños tienen de todo, sin embargo en ocasiones no son felices (les falta cariño por parte de unos padres que solo viven para trabajar y olvidan que un niño no es feliz con mil juguetes sino lo que verdaderamente necesita es la compañía y cariño de los padres, por eso son frecuentes enfermedades como depresiones, obesidad o trastornos alimentarios como anorexia..). Esta es la verdadera y auténtica realidad de la población infantil en el mundo.
Pero lo fundamental es que todos los niños merecen que se respeten sus derechos humanos, derecho a la salud, derecho a tener un hogar, derecho a una buena educación, sean de países pobres o ricos, todos tienen el mismo derecho a la vida y a una igualdad de oportunidades.
Maika Etxarri Yabar