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La revista “Journal of Sexual Medicine” publicó hace poco un artículo en el que sus expertos (Los sexólogos Eric Corty y Jenay Guardiani de la Universidad de Pensilvania se fueron los encargados del estudio) determinaban cuanto debía durar el coito perfecto.

Como era de esperar lo importante es no pasarse ni quedarse corto. Nada de sesiones maratonianas donde uno se acaba cansando ni de coitos exprés, según el estudio médico el coito perfecto debe durar entre 3 y 13 minutos, ni más ni menos.

El estudio buscaba el tiempo para una relación saludable y estas son las conclusiones a las que llegaron, entre 1 y 2 minutos se considera una relación sexual «demasiado corta»; de 3 a 7 minutos, «adecuada»; «deseable» si se mantiene entre 7 y 13 minutos y «demasiado tiempo», hasta la media hora de duración. En el tiempo expuesto no se incluyen los juegos preliminares, si no que solo se refiere a lo que es penetración vaginal.

Todos estos datos contrastan con muchas encuestas en la que hombres y mujeres creen que el coito perfecto debe durar entre 15 y 20 minutos, casi el doble de los datos ofrecidos por el estudio. Por ello Corty y Guardiani ven importante este estudio para “evitar decepciones”, alejar mitos y “animar” a muchos hombres y mujeres. Además van a utilizar este estudio para ayudar en sus terapias sexuales ya que son muchos hombres y mujeres los que acuden con problemas físicos y psicológicos derivados de este tema, ya que las preocupaciones sobre la duración del coito son muchas.

El cine y los medios de comunicación no suelen ayudar mucho en este tema, las películas nos ofrecen unos prototipos de hombres con pene grande, con erecciones muy duraderas que pueden aguantar toda la noche. Uno de los objetivos de este estudio es alejar esos mitos, y ofrecer una visión mucho mas real de la sociedad. En este estudio también han participado miembros de la Sociedad para la Investigación de Terapia Sexual, que incluye psicólogos, psiquiatras, trabajadores sociales, terapeutas familiares y de pareja.

Todas las personas tienen diferentes necesidades después de practicar el sexo. Hombres y mujeres por lo general toman una actitud diferente que en alguna ocasión puede ocasionar pequeños conflictos.

Lo cierto es que cada sexo esta condicionado por un factor hormonal , por ello cada cuerpo reacciona de manera diferente. En el caso del sexo femenino, son muchas las mujeres que después del orgasmo necesitan ser abrazas, besadas, abrazadas, acariciadas o recibir muestras de cariño. Esto es debido a que después del orgasmo el cuerpo femenino siente una sensibilidad muy fuerte.

En los hombres después del orgasmo se produce una fuerte relajación, de ahí que muchos sientan la necesidad de dormir. Como hemos dicho esto se debe a una fuerte carga hormonal que relaja los músculos.

Estas son las características mas generales que se suelen dar después de practicar el sexo, pero todos/as somos diferentes, y nos pueden surgir diferentes conductas postcoitales como puede ser querer continuar con el sexo, necesitar un momento de relajación y silencio…

Cada persona es un mundo, y después del sexo cada uno reacciona de manera diferente. Lo más importante es que cada miembro de la pareja conozca y sepa respetar las necesidades de su compañero para que los dos puedan llegar a una satisfacción sexual plena.

¿Qué haces tú después del sexo?

El petting tal y como nos pone wikipedia es un anglicismo para designar cualquier tipo de relaciones sexuales con la excepción del coito. Su nombre viene del verbo “to pet” que significa acariciar, besar… aunque también tiene otros significados en el ingles como puede ser las caricias que se hacen los animales de compañía (recordamos que “pet” también significa mascota).

Esta práctica es muy dada en la adolescencia y juventud. En muchas ocasiones los adolescentes se inician en las relaciones sexuales con el petting. Dentro del petting están incluidas todas las practicas sexuales en las que no existe penetración. Caricias, mimos, abrazos, besos, frotamientos con la ropa puesta…También esta dentro de esta práctica la masturbación y mucha gente la extiende hasta el sexo oral. Por supuesto se puede llegar hasta el orgasmo.

Las razones de la existencia del petting son muchas. Jovenes y adolescentes que no se sienten preparados para mantener relaciones sexuales con penetración, encuentros sexuales de parejas que se acaban de conocer esa misma noche y que no existe la suficiente confianza para realizar el coito e incluso es usado por parejas que quieren preservar la virginidad hasta el matrimonio.

Además a todo esto se une que es una manera efectiva de evitar embarazos no deseados y en muchos casos de contraer enfermedades de transmisión sexual. Por ello muchas parejas que en un momento puntual no tienen un método anticonceptivo a mano optan por el petting.

Como hemos dicho el petting es una fase previa antes de mantener relaciones sexuales con penetración. No existe ningún tipo de técnica para practicarlo, todo vale exceptuando la penetración. Largos besos con lengua, caricias , esa mano que se adentra por el pantalón explorando el cuerpo de la pareja, mordiscos… La adolescencia es la etapa donde mas se practica, las parejas buscan conocerse y dar rienda suelta a su carga hormonal con juegos sexuales que les lleve al placer sin llegar a la penetración, pero hay países en los que esta práctica es muy común incluso pasada esta edad como en EEUU. (El 80 % de los jóvenes universitarios estadounidenses reconocen haberlo practicado).