LLOVIZNA MOJA MI ROSTRO

El cielo es de plástico, blanco, de alta calidad.
La nieve flota en la ventana oscura.
La noche se oculta detrás
de la persiana.

La noche y Férula se abrazan.

No me soporta un pelo de la cabeza.
Finge, se hace notar, no me deja dormir.
Férula es dueña de cada pelo de mi cuerpo.

Rechino los dientes, camino y acabo en la tumba.
Es de barro, no tiene un tamaño concreto.
Tengo paralizados los brazos.

Férula se marcha.
Llovizna moja mi rostro.
Echaba de menos a Llovizna.

CONDONES, AZÚCAR Y MOLLETES

A todos
nos gusta gustar,
a ti sin embargo, no te veo.

Hasta trece mil cabellos nuevos
me han dicho, pero yo,
no me lo creo.

Eres una estrella.
Tienes tu propia línea de bikinis.
Una lengua de fuego te quiere chupar el ano.

*

Has tallado trampas de madera.
Has comprado condones,
azúcar y molletes.

{} {} {}

Hasta trece mil cabellos nuevos
me han dicho, pero yo,
no me lo creo.

UN BELENCITO MODERNO

Hijo mío,
igual mañana
tengo que hacer algunas cosas.

Ese olor entre las muelas, vetusto
entre los huesos, ese olor
no me deja pensar.

La gente no contesta a la pregunta
de que si hay mucha gente
abajo, la gente no
contesta.

Una señora mira su cartilla.
Una paloma irlandesa busca comida.
Olloki de noche parece un belencito moderno.

¿Te das cuenta?
¡Un belencito moderno!

La vida me sigue montada
en un coche con los faros des – va – i – dos.

La vida me sigue y algún día conseguirá
que me salga de la carretera
y muera.

CASTILLO DE OLITE SE LLAMABA MI PLANTA

La
mejor
sanidad
privada para
ti también……..

Te lo mereces……..
Se lo merecen todos……

Un coche del tanatorio no se salta
los semáforos en
rojo…………

No tiene risa….
Su prisa es relativa…..

Castillo de Olite se llamaba mi planta.
Charco de agua se llamaba mi planta extraña.
Cayó al suelo y lo hizo de pie……….

[ ]

Un sonido seco de martillo
de metal contra
metal……

HAY RAZONES

La desconocida número dos era dulce,
de cuello rizado castaño
y mejillas de fresa.

Tenía un pelo en el brazo,
grueso como la pata de un insecto.

Le olía el ombligo a mortadela,
o al menos eso decía ella.

Soy una novela incompleta,
una novela con defecto de fábrica.

Dijo un día.

No soy como el agua que cae del cielo
sin que se sepa exactamente
por qué.

Hay razones.